BUENOS AIRES -- Real Madrid y FC Barcelona, así, en ese orden, son los dos clubes más valiosos del planeta según Forbes, la revista especializada más prestigiosa del mundo, referencia global en materia de finanzas y negocios desde 1917. Que ambas entidades ocupen semejante lugar de poder en el ámbito del fútbol explica la repercusión a nivel mundial que tiene cada partido en el que se enfrentan.
Se trata de un cruce con dos denominadores comunes. Un solo país -por el momento-, y mucho dinero. Forbes indica que 3,44 billones de dólares es el valor de mercado del Real Madrid, club que ingresa 675 millones de dólares al año. Y que 3,20 billones de dólares es el valor de mercado del FC Barcelona, club que ingresa 627 millones de dólares anuales. No obstante, la rivalidad también se libra en otro ámbito. El de la identidad. En ese terreno, el fausto de su liturgia recibe un nombre equiparable a una pelea boxística bien vendida en Las Vegas. Cartera vs Cantera.
El Real Madrid, desde que Florentino Pérez asumió su primera presidencia el 17 de julio de 2000, al haber gastado 1148 millones de euros en fichajes en 14 años, representa lo primero. El FC Barcelona, desde que en ese mismo año reforzó su apuesta por la promoción de sus pichones de cracks, es sinónimo de lo segundo. Dos fechas históricas puntuales exponen el antagonismo de ambas filosofías. El 24 de julio de 2000 Florentino Pérez presentaba a Luis Figo, su primer galáctico, después de pagar los 60 millones de euros de su cláusula de rescisión... al FC Barcelona. Por su parte, el 17 de septiembre de 2000 Lionel Messi aterrizaba en Barcelona junto a Jorge, su padre, para comenzar en el club blaugrana una carrera que ya es de película.
Es cierto que los dos clubes gastan fortunas para reforzarse casi cada temporada. Incluso en la actual, el Barça, impedido de fichar hasta enero de 2016 a raíz de la sanción que le ha impuesto la FIFA este año, ha ampliado el monto destinado a contrataciones para que no dejarse sorprender por cualquier eventualidad. Pero el mayor dispendio suele llevar puesta la camiseta blanca.
Ya sobre el partido, a horas del gran clásico, uno está en condiciones de afirmar que el Real Madrid no alineará como titulares a más de 2 jugadores surgidos en su semillero. Apenas el 18% del equipo dirigido por Carlo Ancelotti será marca registrada de la Casa Blanca. El arquero Iker Casillas y el lateral derecho Dani Carvajal serán los únicos emblemas de La Fábrica, en el once inicial sobre el césped del Santiago Bernabéu. Entre los suplentes habrá dos más, también defensores. Nacho y Arbeloa. El tercer arquero, Fernando Pacheco, está convocado pero será descartado.
Y también uno está en condiciones de afirmar que el FC Barcelona disputará el clásico con no menos de 5 jugadores de la pedrera por decisión de Luis Enrique, su entrenador. Gerard Piqué, Sergio Busquets, Xavi Hernández, Andrés Iniesta y Lionel Messi serán los embajadores de La Masia en Chamartín. Casi el 46% del equipo tiene su origen en Can Barça. Entre los suplentes y el resto de convocados, el grupo de los denominación de origen crece con Montoya, Bartra, Sandro, Rafinha y Jordi Alba, que se unen a Pedro Rodríguez y Munir El Haddadi, a quienes no se puede contar estrictamente como canteranos si bien tuvieron un paso fugaz por las inferiores, ya que llegaron a La Masia con edad avanzada.
En estos últimos dos párrafos se resume el ADN de cada equipo en este tiempo. Su identidad actual. El Real Madrid compra de forma compulsiva, a la vez que descarta diamantes en bruto extraídos de sus tripas para exportarlos a equipos varios en operaciones de escasa relevancia. Como en toda regla, hay una excepción. En este caso, se trata de Álvaro Morata, delantero goleador surgido de La Fábrica, por quien la Juventus ha pagado 20 millones de euros este verano.
El último gran recuerdo de pibes formados por el Real Madrid en su casa se remonta al amanecer de los años 80, con la magia de la Quinta del Buitre surgida de la ya extinta Ciudad Deportiva. Cinco jugadorazos con Emilio 'El Buitre' Butragueño como líder, junto a Manuel Sanchís, Míchel, Martín Vázquez y Pardeza. En tanto, el FC Barcelona aumenta desde 1979 el respaldo a sus divisiones inferiores, y con el paso de los años ha comprendido que el futuro del fútbol está en globalizar la búsqueda de talento para luego galvanizarlo...con estilo propio.