BUENOS AIRES -- James Rodríguez se transformó en el primer colombiano en jugar el clásico español y su participación fue positiva: su equipo ganó 3-1 ante el Barcelona y el jugador tuvo una destacable actuación.
El centrocampista fue clave en la jugada colectiva que terminó en el tercer gol del Real Madrid. La jugada comenzó con Isco recuperando la pelota tras un error de Iniesta. Luego el español tocó con Cristiano Ronaldo y el portugués jugó con James. Ahí sí el colombiano recibió y asistió con un pase preciso a Benzema para que este liquidara el partido.
James aguantó una hora la exigencia de su demarcación, presente en los ataques jugando en la banda derecha del tridente ofensivo pero con la obligación de echar una mano en defensa para evitar la superioridad del rival en la medular. Dejó acciones de gran calidad técnica pero le faltó continuidad.
Los números de James en el partido fueron los siguientes: 6 tiros al arco, 1 asistencia, 3 chances creadas y 5 centros.
Pudo marcar de cabeza tras un buen centro de Marcelo pero perdonó su oportunidad más clara rematando fuera. El resto de intentos con su zurda no encontraron el arco rival. A pesar de eso, fue una de las figuras del equipo de Ancelotti y no le pesó en absoluto el hecho de jugar su primer clásico: mostró carácter y personalidad.
Cumplió en ataque y también en defensa, tuvo un gran desgaste físico y estuvo a la altura, con tan sólo 22 años, del gran derby español.