SANTIAGO DE CHILE -- Un grupo de disidentes a Cruzados SADP, la concesionaria que dirige a Universidad Católica, aburridos del mal presente del equipo que entrena Julio César Falcioni, pretende invertir 10 millones de dólares en el equipo, pero quieren cambios en la estructura de la institución que preside Luis Larraín.
En nota de El Mercurio, los 'opositores', encabezados por el empresario Juan Pablo Swett, admiten que "hemos conversado con grandes inversionistas, que sumados a muchos pequeños accionistas, nos permite disponer de U$ 10 millones para aumento de capital".
"La idea es que estos dineros vayan al rescate de la UC. Además ellos han visto una interesante oportunidad de negocio, siempre y cuando el plan incluya modificaciones estructurales en la sociedad anónima. El dinero está sujeto a señales de cambio", añadió Swett.
Otro de los representantes, Ademir Domic, valoró haber "sido escuchados por la comisión de Cruzados y confiamos en que el proyecto de aumento de capital que se está elaborando considere los cambios necesarios".
Eso sí, la exigencia es que los hinchas tengan representación en la mesa directiva y que Cruzados "se pueda administrar como cualquier SA y que los controladores tengan poder de decisión en el equipo", con el fin de disminuir el rol de la Fundación, tan cuestionada.