BUENOS AIRES -- Los jugadores de Racing, flamantes campeones, se sumaron a los festejos en el Obelisco poco antes de las tres de la madrugada a bordo de un micro descapotable, en el punto culminante de las celebraciones en el centro porteño.
A las 2.46 entró el ómnibus con la leyenda Racing Club Campeón 2014 a paso de hombre entre la multitud y el denso tránsito sobre la avenida 9 de Julio, con los jugadores saltando y cantando al son del "Dale Campeón" y haciendo flamear banderas.
Los estoicos hinchas de Racing, que intentaban hacer interminable la fiesta que puso fin a 13 años sin títulos, aguardaron la llegada de los futbolistas, que habían prometido sumarse a la sacrificada grey académica en los especiales festejos.
Fue tan larga la celebración, que los medios necesitarán del diario de dos días para dar cuenta de todo lo que pasó en el centro neurálgico de la ciudad de Buenos Aires con Racing Campeón.
"Tenemos que ir al Obelisco a festejar con la gente", anunció en el campo de juego Iván Pillud y la gente ya instalada en la Plaza de la República lo tomó al pie de la letra. A la una de la madrugada, con la mayoría de las ediciones de diarios cerradas, los hinchas iban llegando al centro, caminando algunos desde Avellaneda por la autopista 9 de julio, otros con autos, inclusive por los carriles del Metrobus. Hasta que cerca de las 3 de la madrugada apareció la silueta del micro rodeado de los fans y en medio del humo de fuegos de artificio, para coronar una larga noche de fiesta.