FORTALEZA (Enviado especial) -- La Selección Colombia cerró la mejor Copa del Mundo de su historia con gran dignidad ante el mejor Brasil del campeonato. Perdió 2-1 pero terminó jugando dentro del área del conjunto de Scolari, que de todas maneras mereció el triunfo. ESPNFC.com estuvo en el estadio Castelao y presenta los momentos clave del partido.
EL GOL DE THIAGO SILVA
Rompió todos los esquemas y condicionó a la Selección Colombia, que por primera vez en el torneo no comenzó arriba en el marcador. Sufrir un gol a los siete minutos contra Brasil y de visitante puede ser un golpe devastador para cualquiera. Y, aunque el equipo de Pekerman mejoró en el segundo tiempo y estuvo cerca de lograr un empate heroico, esa definición de Thiago Silva tras un tiro de esquina fue clave en el desarrollo del juego.
El Seleccionado local salió con todo, embravecido y en busca de mejorar la imagen tras la pálida actuación contra Chile. Lo consiguió con un primer tiempo en el que jugó con intensidad, precisión y rapidez. Colombia se mostró nervioso y casi siempre en inferioridad numérica. Todo esto sucedió por el tanto del defensor de PSG. Ese gol invalidó las estrategias pensadas por el DT argentino y obligó a Colombia salir, lo que hizo que Brasil jugara con más soltura.
LA DESPEDIDA
Una derrota siempre duele. Y más aún en una Copa del Mundo. Sin embargo, hay muchas maneras de despedirse de un torneo como éste y la de Colombia es la mejor. El equipo jugó mal y fue superado con claridad en el primer tiempo, pero reaccionó y, con actitud, emparejó el trámite en la segunda parte. Se topó con un golazo de David Luiz, pero reaccionó, descontó y casi logra la hazaña sobre el final.
No se pudo, pero la imagen de los futbolistas en el estadio Castelao es todo un símbolo. Había lágrimas en los rostros de muchos de ellos, pero también orgullo por haber hecho lo posible, por haberse recuperado de una primera parte muy complicada y por haber terminado el juego en el área del anfitrión, del máximo cantidato. Además, el aplauso de todo el público, incluso de los brasileños, es un premio muy merecido que el plantel cafetero sabrá valorar.
EL GOL DE JAMES
Después del segundo tanto brasileño, todos en el estadio Castelao pensamos: el partido está liquidado. Brasil jugaba confiado, seguro y convencido de que lo que estaba haciendo era lo correcto. Además, el público empujaba y sostenía al Scratch. Sin embargo, once minutos después, Carlos Bacca ingresó al área y Julio César le cometió infracción. Penal y gran incertidumbre en Fortaleza y en todo Brasil.
James definió bien, sin dudar, y descontó. Fue un momento de zozobra del equipo brasileño, que por primera vez veía cómo el desarrollo del juego podía salir de su control. Tras el gol, Colombia mostró las garras, atacó como pudo y tuvo algunas opciones de gol. Terminó el partido en el área rival y cerró con dignidad una actuación que había comenzado muy mal.
EL GOL ANULADO A MARIO YEPES
Iban 21 minutos del segundo tiempo y Colombia perdía 1-0 ante Brasil. El trámite del juego era parejo y el local no tenía la intensidad de los primeros momentos. Tiro libre para Colombia bien ejecutado por James Rodríguez. Varios rebotes en el área y la pelota que le queda a Mario Yepes. El defensor define fuerte al lado del palo. Gol. Festejo del banco colombiano. Pero hay bandera en alto: posición adelantada.
En la primera impresión, que es la que cuenta en circunstancias como esta, no parece off-side de ninguno de los colombianos que estaban en posición de ataque. Sin embargo, en la repetición se ve al capitán colombiano apenas unos centímetros fuera de juego. Está claro que, en principio, el juez tiene la razón, pero esta acción fue trascendental para el desarrollo del partido, ya que enseguida vino el tiro libre de David Luiz que se convirtió en el segundo gol del anfitrión.
EL TIRO LIBRE DE DAVID LUIZ
Fue un verdadero premio para el futbolista más decisivo de la cancha. El defensor de Chelsea fue el mejor marcador de Brasil pero por momentos también fue el mejor delantero. Rapidísimo, firme y encarador, David Luiz se tuvo confianza y se hizo cargo del tiro libre. A los 24 minutos del segundo tiempo, el árbitro cobró una infracción muy dudosa y el central sacó un remate impresionante, que David Ospina rozó con sus dedos pero era imposible de atajar. Su grito de gol será recordado casi como aquel de Tardelli.