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Los mejores

Decidir cuál es el estadio más difícil de visitar fue la tarea de esta semana para los expertos de la NFL. ESPN.com

BRISTOL -- Nos sacamos los guantes y nos colocamos tapones en los oídos cuando los panelistas de ESPN.com buscaron identificar la sede más difícil de visitar en la NFL.

Luego, los guantes regresaron a las manos, para soportar el frío del estadio Nº 1 de nuestra lista.

Lambeau Field, hogar del "Ice Bowl", la tundra congelada, y hasta el ya tradicional "Lambeau Leap", sobrevivieron a Tim Graham y Kevin Seifert para terminar como la sede más complicada para los equipos visitantes. Cuatro de los otros seis panelistas de la ESPN.com ranquearon a Lambeau primero en sus papeletas, colocando a la sagrada casa de los Green Bay Packers por encima del Heinz Field de los Pittsburgh Steelers por el lugar de honor.

Qwest Field de los Seattle Seahawks, donde los oponentes han cometido 104 inicios en falso desde el 2005 (el mayor total de la liga), fuer tercero. Estadios a cielo abierto ocuparon los primeros cinco lugares, y ocho de los primeros 10. Quince inmuebles diferentes consiguieron al menos un voto.

El Superdome de los New Orleans Saints fue el estadio techado que terminó ranqueado más alto, en el sexto sitio. El Metrodome de los Minnesota Vikings concluyó octavo, detrás únicamente del Qwest en salidas en falso de los oponentes a lo largo de las últimas cinco campañas.

Este tema fue sujeto de intenso debate. A primera vista, no pareció que Lambeau necesita demasiada defensa.

"Lambeau Field tiene la combinación perfecta de historia y modernidad, mientras que la mayoría de estadios son lo uno o lo otro", explicó James Walker después de colocar a Lambeau en la cima de su listado. "Se pueden sentir a los fantasmas ahí. El clima lo hace complicado. Y junto con Heinz Field, los aficionados locales no venden sus entradas. Los aficionados visitantes no se adueñan del estadio".

Graham no quedó impresionado. Colocó al Lambeau noveno en su papeleta. Hasta Seifert pensó en tres inmuebles más imponentes que Lambeau: Qwest, Heinz y el Superdome.

"Recuerdo perfectamente a un mediocre equipo de los Miami Dolphins viajando un largo camino para derrotar a los Packers en el Lambeau la temporada pasada", explicó Graham. "Los Packers han sido vapulkeados algunas veces en el Lambeau a lo largo de los tres últimos años pese a tener buen talento. No puedo ignorar eso".

Miami, Minnesota, Cincinnati, Houston, Carolina, Atlanta y Dallas han ganado en Lambeau a lo largo de los tres últimos años.

Graham ranqueó en primer ligar al Arrowhead Stadium de los Kansas City Chiefs.

"Me doy cuenta de que los Chiefs han sido destrozadas en Arrowhead también, pero no es culpa del estadio que Kansas City haya contado con plantillas pobres", dijo Graham.

Arrowhead ranqueó cuarto global, con el histórico Soldier Field de los Chicago Bears completando el Top-5. Ambas sedes ofrecen temperatura lo suficientemente fría como para congelar a los visitantes de climas más templados. Las condiciones del campo en Chicago son otro motivo de preocupación.

"Siempre que he cubierto un partido allí, ha hecho frío y ha sido miserable", sentenció Pat Yasinskas sobre la casa de los Bears. "Equipos del sur odian esa combinación. Tomemos el frío y sumemos la leyenda de Halas, Butkus, Sayers y Payton, y se trata de un lugar intimidante para jugar".

La memoria de la mística de Mile High

El viejo Mile High Stadium, un pilar en Denver desde 1948 hasta 2001, podría haber quedado en primer lugar en una lista de esta índole. El nuevo apareció solamente en cuatro de ocho papeletas, para concluir en en sitio Nº 12.

"La magia se ha desvanecido", escribió Bill Williamson, quien puso primero a Lambeau y cuarto a Arrowhead, pero que no hizo un lugar para Mile High entre sus elegidos. "Es raro, porque el aire es tan delgado como solía ser, pero los Broncos han perdido su ventaja de locales. Se trata de un equipo que perdió por 45 puntos en casa la temporada pasada. No pertenece en esta lista, por ahora".

Por supuesto, estadios y aficiones no pueden ganar partidos por sí solos. La fortaleza de las plantillas juega un papel crítico para tratar de maximizar las ventajas que pueda ofrecer una casa. Si quitamos a Peyton Manning de Indianapolis, y repentinamente Lucas Oil Stadium, que apareció segundo en la lista de Graham y en el escalón Nº 11 global, se vuelve considerablemente más habitable para los visitantes.

"Se trata de un sitio excelente para mirar un juego, seguro", expresó Paul Kuharsky. "Pero el volumen no es similar al del RCA Dome, y por supuesto el clima no es factor. Las molestas sombras en las ocasiones en que se abre el techo no parecen molestar a los jugadores como molestan a los espectadores".

Kuharsky no listó al Lucas Oil o a ningún otro estadio de la AFC Sur en su papeleta.

Hablando de sedes, no plantillas

Kuharsky ranqueó al Oakland Coliseum segundo pese a que los Raiders regularmente juegan sin llenar su estadio. Cubrió al equipo para el Oakland Tribune en 1995, el primer año de los Raiders de vuelta en el área de la bahía desde Los Ángeles.

"Los asientos vacíos partidos cancelados en televisión local no son algo en lo que piensan los oponentes cuando aficionados disfrazados gritan muy de cerca a la banca de los visitantes", explicó.

Dan Graziano adoptó un razonamiento similar. Ranqueó sexto a Oakland mientras que entregó su Nº 1 al Ralph Wilson Stadium en Buffalo, donde el pobre talento de los Bills ha dejado a los locales sin guarida. Ningún otro panelista consideró a Buffalo en su Top-10.

"Nunca he tenido más frío en mi vida que cuando estuve en ese estadio", dijo Graziano. "Es frío, hace viento y es malo. Siempre he sentido que la gente que tiene éxito ahí como pasadores, pateadores de lugar y de despeje deben ser ranqueados más alto por las condiciones a las que deben sobreponerse".

La lógica de Graziano tiene sentido.

"Sin la intención de hablar por los demás, creo que es un estadio fácil de olvidar en una encuesta porque los Bills han sido irrelevantes por mucho tiempo", dijo. "Personalmente no tomé en cuenta al equipo local en mis selecciones, porque creo que es variable. Ahora, el lugar más complicado es Gillette Stadium porque los Patriots han sido tan buenos. Pero si los Pats apestan en los siguientes cinco años, no hay modo de que ese estadio entre a una lista del 2016. Pero el frío inmueble de Buffalo seguirá siendo un lugar poco agradable para visitar".

Cambios sísmicos

Qwest Field, construido para reemplazar al Kingdome a partir de la campaña del 2002, se ha establecido rápidamente como una de las casas más temidas. Se unió a Lambeau y Heinz como las únicas sedes en ser mencionadas en todas las papeletas.

Los New York Giants cometieron 11 inicios en falso ahí en un juego del 2005. De vuelta un año más tarde los Giants pidieron a la NFL investigar si los Seahawks estaban metiendo sonido artificial al lugar. Luego, cometieron tres castigos por inicio en falso en el primer cuarto de la revancha, antes de caer por 35-3 al medio tiempo. La temporada pasada, sismólogos locales registraron actividad debajo del estadio coincidiendo con la escapada de 67 yardas de touchdown de Marshawn Lynch.

Aunque Seifert y yo colocamos al Qwest en la cima de nuestras papeletas, Williamson lo dejó en décimo lugar.

"Respeto a Qwest Field y al 'Jugador Nº 12'", explicó Williamson. "Es una atmósfera divertida, pero creo que hay estadios más difíciles de visitar en la NFL. Me gustaría ver a Seattle ganar más partidos y edificar una mayor tradición antes de ranquear a ese estadio como de élite".