GOODYEAR, Ariz. -- A Mat Latos le endiglaron algunos adjeticos poco agradables en San Diego -- desde inmaduro a cabeza caliente a "completamente ido" -- pero sus nuevos patronos en Cincinnati esperarán antes de hacer algún juicio de valor sobre él. Mientras Latos produzca, él puede coleccionar rocas lunares como pasatiempo, y el equipo se lo va a celebrar.
Luego que los Rojos sangraran su sistema de fincas para adquirir a Latos desde los Padres en diciembre, el manager de Cincinnati Dusty Baker tiene conocimiento de primera mano de la presión que encarará su nuevo abridor. En 1975, los Bravos cambiaron a Baker y al jugador del cuadro Ed Goodson a los Dodgers por cuatro jugadores. Baker se lastimó, no pudo producir y fue incesantemente abucheado en Los Angeles en esta primera temporada, así que él entiende el escrutinio que va a recibir Latos como la pieza más importante de un cambio 4 por 1.
Baker y Latos compartieron un vuelo de Salt Lake City a Cincinnati para la caravana de invierno del equipo en enero pasado, y el manager le dijo el siguiente mensaje: No te preocupes por justificar que tu vales lo que dimos en el cambio.
"Él es un hombre diferente, pero le dije, 'Solo se tú mismo,'" dijo Baker. "Es como decía Van Morrison: '¿Cómo vas a conocer a alguien más si se tiene toda una vida para aprender a conocerte a ti mismo?'"
Por si acaso, Latos no conoce a Van Morrison. Pero afortunadamente, los Rojos lo adquirieron por su recta de 93 mph y no por su conocimiento de las estrellas del rock irlandés.
Latos, de 24 años, puede cae presa de las emociones, como se evidenció en la tonta disputa en la que cayó con los fanáticos de San Francisco hace par de años y su afición a hiperventilarse cuando está en la lomita. Él es un chico nativo del sur de la Florida, que luce más como un aficionado al surf en California, y que ahora debe adaptarse a una vida en la tierra de Roy Rogers y Skyline Chili.
"Eso no me preocupa," dijo Latos. "Seguiré yendo al océano, pero estaré en el mar en algún momento durante la temporada baja."
Latos se ganó puntos al llegar temprano a los entrenamientos primaverales y lanzar en el bullpen antes del periodo mandatorio para ello. El coach de lanzadores Bryan Price pasó los primeros días de los entrenamientos evaluando el movimiento de los pitcheos de Latos y su personalidad. Durante una conversación, ellos discutieron la variedad de tatuajes de serpientes de Latos. Price, fanático de la serie de television "Family Guy," también disfruta los tatuajes de los personajes de dicha serie Brian y Stewie Griffin en la pantorrilla de Latos.
"Él es un tipo bastante sociable, y se ha sentido cómodo en nuestros alrededores desde el inicio," dijo Price. "Hubo algunos artículos en San Diego que decían, 'Es difícil de tratar y trabajar.' Pero, ¿sáben qué? Yo tengo una hija de 24 años. No es como que uno firma un contrato y todos estos tipos pasan de tener 18 años a 30, o de 24 a 35. Si uno tiene tipos que tienen 24 años y que entienden la importancia de la ética del trabajo y la preparación, ellos están por encima del promedio."
Con 33 aperturas, más de 200 entradas y algún crecimiento personal de parte de Latos, los Rojos estarán mejor equipados para dar el salto de 79 victorias a ser contendores a los playoffs esta temporada. Si el chico luce como un as, ellos serán la mayor amenaza que tendrán los Cardenales de San Luis en la División Central de la Liga Nacional.
Hace apenas un año, los Rojos lucían como un equipo en ascenso. Tenían el momentum de la primera aparición de la franquicia en postemporada desde 1995, el Jugador Más Valioso de la Liga Nacional en Joey Votto, un nucleo sólido de jugadores de posición a su alrededor y suficiente pitcheo abridor para quitarle peso al bullpen si todo caía en su sitio.
Pero no fue así. Bronson Arroyo contrajo mononucleosis en los entrenamientos primaverlaes, trató de lanzar con dolor de espalda y permitió 46 cuadrangulares, la mayor cantidad en la temporada. Johnny Cueto se perdió las primeras cinco semanas con una lesión en el bíceps. Homer Bailey fue dos veces a la lista de lesionados, y Edinson Vólquez dejó de ser el lanzador dominante que solía ser y se convirtió en una máquina de permitir cuadrangulares. El cuerpo de lanzadores de los Rojos se ubicó en el puesto No. 12 en la Liga Nacional con efectividad combinada de 4.16 y permitieron la cuarta mayor cantidad de bases por bolas y la segunda mayor cantidad de cuadrangulares en la liga.
El gerente Walt Jocketty tuvo que escarbar bastante para adquirir a Latos, enviando a Vólquez, el primera base Yonder Alonso, el receptor Yasmani Grandal y el relevista derecho Brad Boxberger a San Diego. Latos se levantó tarde de la cama en la mañana del 17 de diciembre y vio varios mensajes telefónicos de parte de su agente Hunter Bledsoe, quien le informó que los Rojos habían hecho un movimiento monstruoso para adquirirlo. Alguna gente de béisbol afirmó que Cincinnati dio demasiado por él.
"Pienso que Boxberger va a ser un preparador muy importante," dijo un escucha de la Liga Nacional. "Grandal, para mí, es como el bateador ambidiestro Alex Avila. Este tipo puede recibir y correr un juego. Y Alonso realmente puede batear. Pienso que sobrepagaron por él. Los Padres recibieron los peloteros correctos."
Si los Padres estaban pensando a largo plazo, los Rojos están apostando por un cambio rápido para un equipo enigmático. Cueto y Arroyo están saludables en esta primavera. Bailey entrenó con pesas, trabajó con un nutricionista y aumentó 15 libras en búsqueda de ser más fuerte y más duradero. Añadan al ganador de 12 partidos Mike Leake a la ecuación, y es posible que los Rojos puedan irse con cinco abridores derechos -- a pesar que ellos cuentan con convertir a Aroldis Chapman en abridor y que dieron un contrato de liga menor al zurdo Jeff Francis.
"Uno preferiría tener un zurdo allí., pero nos iremos con los cinco mejores abridores que tengamos," dijo Baker. "Un buen derecho es mejor que un mal zurdo."
Jocketty también mejoró el bullpen, al adquirir al zurdo Sean Marshall en un cambio con los Cachorros y al adquirir a Ryan Madson con un contrato de un año y $8.5 millones. Madson tenía razones para esperar un acuerdo mejor cuando comenzó el invierno, hasta que las negociaciones entre su agente Scott Boras y el gerente de los Filis Rubén Amaro Jr. chocó con un obstáculo inesperado en noviembre, y Filadelfia firmó a Jonathan Papelbon. En ese momento Madson no se dio cuenta que se le había pasado su mejor oportunidad para conseguir un contrato multianual, y que él no recibiría lo esperado por esos 32 rescates logrados en el 2011.
Madson lanzó su cuota de roletas y permitió apenas dos jonrones en 60 2/3 entradas la pasada temporada, así que está bien preparado para los acogedores confines del Great American Ball Park. Si, Madson está herido por dentro por haber perdido la posibilidad de conseguir un acuerdo de $30 millones o más, no lo demuestra, y ha hecho un buen trabajo manteniendo su tristeza para si.
"Lo que me molestó fue: Yo hice todo lo que pude el año pasado, y aún así no sucedió," dijo Madson. "En este punto, ya eso es agua pasada. Pienso que la peor parte es tratar de responder todas las preguntas sobtre ello. Para mí, lo que pasó, pasó. Ahora solo trato de ponerme en forma para la temporada."
A los Rojos no les faltan preguntas. Se supone que los equipos contendores tengan fortaleza en su parte media, y Cincinnati está al menos a la mitad de eso. Brandon Phillips, acercándose a la agencia libre, se ubica en el segundo puesto detrás de Robinson Canó entre los intermedistas con 997 hits desde su debut con los Rojos en el 2006. El jardinero central Drew Stubbs necesita ponerle un detente a sus astronómicos totales de ponches, pero tiene poder, velocidad y habilidad para perseguir pelotas en las bandas de poder de los jardines.
Los Rojos tienen juventud en puestos clave. El campocorto Zack Cozart y el receptor Devin Mesoraco tienen un total combinado de 29 partidos y 87 turnos al bate de experiencia en Grandes Ligas. Mesoraco, nativo de esa renombrada meca del beisbol, Punxsutawney, Pa., debe asumir su responsabilidad doble de contribuir ofensivamente y manejar el cuerpo de lanzadores a medida que se prepara para compartir tiempo de juego con Ryan Hanigan detrás del plato.
"Tiene mucho que aprender en poco tiempo," dijo Baker. "Uno espera que pueda ser como Buster Posey, pero no hay muchos como él."
Latos, quien cumplió 24 años en diciembre pasado, es apenas seis meses mayor que Mesoraco, y los Rojos tienen que preguntarse lo que vendrá para Latos cuando crezca. ¿Acaso va a dar un salto hacia delante para acercarse a lanzadores derechos élite como Justin Verlander, Jered Weaver y Félix Hernández? ¿O le seguirán las interrogantes de San Diego hasta Ohio?
Los fanáticos de los Rojos, al igual que la gerencia del equipo, han mantenido una mente abierta. La esposa de Latos, Dallas, recibió muchos mensajes via Twitter dándole la bienvenida a la ciudad y deseándoles lo mejor en el 2012. Latos recibió evaluaciones positivas en Cincinnati de parte de su ex compañero de los Padres Aaron Harang, y se está preparando para la transición.
"He escuchado que el Día Inaugural allí es uno de los mejores, sino el mejor, en el béisbol," dijo Latos. "El ir de una atmósfera de béisbol en San Diego a una gran atmósfera de béisbol en Cincinnati, con toda la historia que hay allí, va a ser un año bien excitante."
Solo en caso que Latos necesite un recordatorio, el Día Inaugural en Cincinnati será el jueves 5 de abril ante Miami. Él estará ahí, junto con su recta y su colección de tatuajes de Family Guy y serpientes. Él es solo un lanzador libre, que espera dejar su marca.