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Ferrer: "Más fácil de lo esperado"

CASTELLON -- David Ferrer y Nicolás Almagro quedaron muy satisfechos luego de la positiva primera jornada, ya que pusieron arriba 2-0 a España sobre Austria, de local, en los cuartos de final de la Copa Davis.

Ferrer, el número cinco del mundo, subrayó la enorme distancia con su adversario, Andreas Haider Maurer, más allá de los 100 primeros del circuito (139º), y sumó su tercer triunfo seguido como local, que afianza su condición de invicto cuando juega en casa.

"Ha sido más fácil de lo esperado. Haider Maurer cometió muchos errores. No me voy ni con muy buenas ni con malas sensaciones. Lo mejor fue la victoria", dijo Ferrer.

"El partido pasaba por jugar rápido y por intentar que el austríaco no tomara ritmo. El no ha estado a la altura. He intentado no dar puntos gratis", apuntó Ferrer tras el partido, que no alcanzó la hora y media de juego.

Austria, que ofreció en la jornada inicial menor resistencia que Kazajistán en la eliminatoria de primera ronda, en Oviedo, se queda sin argumentos para mantener el amparo en el factor sorpresa y ampliar su historia, en este duelo en Castellón, sobre arcilla.

El paso por los cuartos de final, que no alcanzaba desde hacía 17 años, prevé un devenir efímero. Se aferra al dobles del sábado el equipo centroeuropeo, para dilatar su despedida. A lo largo de su historia nunca ha levantado un 2-0 en contra.

A España el guión le salió perfecto. "El primer partido marcaba bastante la dinámica de la eliminatoria. Almagro ha estado muy bien y sólido. Ha tenido temple y ha ganado con claridad. En el segundo encuentro, el problema de Austria es que tenía a David enfrente. Hay que reconocer la predisposición de Ferrer, que ha puesto ganas, disciplina y concentración", señaló el capitán, Alex Corretja.

El choque de cuartos queda visto para sentencia. El partido de dobles, donde España mantiene la incógnita de Marc López, con una lesión lumbar, puede dejar resuelto el duelo y sin trascendencia la última sesión.

Ferrer, invicto en 13 partidos en polvo de ladrillo esta temporada, aumentó la ventaja de los campeones defensores, mientras España busca su 23º triunfo al hilo como local en la Copa Davis. La última derrota sufrida por España en arcilla fue en 1999, ante el Brasil de Gustavo Kuerten.

"Queda aún mucho. Está claro que ganar el primer punto ayuda y estamos un poquito más cerca. Es verdad que el partido de la eliminatoria podía ser este y se ha ganado", reconoció Almagro.

"He jugado un partido bastante completo. En todo momento he hecho lo que he trabajado. He jugado con altura y peso para que él no estuviera cómodo y no pudiera hacer su tenis. Estoy feliz por el partido que he jugado", aseguró.

El capitán del equipo de Austria, Clemens Trimmel, asumió resignado el oscuro futuro de su cuarteto en el duelo contra España, después del 2-0 de la primera jornada, aunque aseguró que afrontarán el resto del enfrentamiento "profesionalmente".

"Vamos a prepararnos para el partido de dobles, que intentaremos ganar para mantenernos en el enfrentamiento. Lo haremos profesionalmente. Con motivación y garra para afrontar la serie. Pretendemos hacer un papel digno en lo que queda", destacó Trimmel.

El capitán de Austria se mostró contrariado. No entraba en sus expectativas acabar la primera jornada con una desventaja de 2-0. "Evidentemente, la situación no es nada favorable. Contábamos con terminar con empate 1-1. No ha sido el caso. Y si España era favorita antes, ahora lo es más todavía", concluyó.

El vencedor de esta serie tendrá como rival al que gane entre Francia y Estados Unidos, que se miden en Mónaco. La fecha de las semifinales será del 14 al 16 de septiembre.

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