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El hombre que triunfó a los saltos

BUENOS AIRES -- Se quedó quieto. Convencido de que su principal rival, el chino Liu Xiang, había cometido una salida en falso, no se despegó de los tacos de salida. Un instante. Dos. Vio alejarse a los corredores, y la alarma no sonaba. Entonces sí, resignado, arrancó. Ya era tarde. El cubano Dayron Robles terminó último la carrera eliminatoria del mundial bajo techo de Valencia, España, y se quedó afuera.

Fue un 8 de marzo de 2008.

Cinco meses después, mientras escuchaba música en China, a la espera de la final olímpica de los 110 metros con vallas, no pudo evitar acordarse de ese momento amargo.

Le sirvió de inspiración.

Unos minutos más tarde, voló sobre la pista del Nido de pájaro, en una de las demostraciones estéticas más espectaculares de la justa olímpica.

De andar algo irregular en las competencias al aire libre, aquel día en Beijing Robles secó de dudas al ambiente del atletismo. Fue técnicamente perfecto.

"He aprendido mucho de Valencia: que cada carrera exige una perfecta concentración. Aunque se presente fácil, hay que afrontar cada carrera como si fueras a batir el récord del mundo", había afirmado meses antes de Beijing 2008.

En el país de oriente, el cubano redondeó un 2008 intensísimo. Un fracaso en el mundial bajo techo había marcado el comienzo de esa temporada. Pero quedó rápidamente tapado por el logro de la plusmarca del orbe, con un 12.87 que aún hoy está en pie y, claro, la medalla de oro en los Juegos Olímpicos.

"El día más impresionante y más emocionante para mí fue el récord mundial, la carrera de Ostrava me dio la confianza necesaria para seguir, y Beijing fue como terminar el trabajo", sostuvo hace poco tiempo.

Robles, nacido en Guantánamo el 19 de noviembre de 1986, contó en una ocasión que proviene de una familia pobre, en la que su gran inspiración para el deporte fue su madre, una jugadora de voley reconocida en el país centroamericano.

Su primer impacto, con el que saltó a la fama mundial, fue su segundo lugar en los 60 metros con vallas en el Mundial de Atletismo de Moscú, donde perdió con el estadounidense Terrence Trammell por escaso margen.

De allí en más se metió en la conversación grande. Y poco a poco se transformó en la gran amenaza para quien hasta ese momento dominaba la especialidad, Xiang.

El chino, ya una estrella mundial y una celebridad en su país cuando apareció Dayron, lo miró de reojo desde el principio. Le pareció que podía ser un rival, pero jamás se imaginó que iba a ser 'el' rival.

"Desde el pasado año, Robles ha mejorado rápidamente". "Pero es difícil todavía que mi récord sea batido", sostuvo Liu tras ser vencido por el cubano en una competencia de la Golden League (hoy Diamond League) en septiembre de 2007. Menos de nueve meses después, Robles superó aquel crono del oriental y se transformó en el nuevo plusmarquista mundial.

Luego, el oro en Beijing. Y dos años más tarde, el cubano obtuvo el título en el Mundial bajo techo de Doha.

Las carreras de Robles y Xiang quedaron emparentadas de allí en más. Ambos tienen una medalla olímpica de oro. Y ambos amenazan con retirarse tras los próximos Juegos Olímpicos.

¿Será Londres el escenario del desempate histórico y final?