BUENOS AIRES. – La quinta fecha de la eliminatoria sudamericana cambió una tendencia que venía firme hasta aquí en las cuatro jornadas anteriores.
Por única vez en este camino a la Copa del Mundo Brasil 2014, hubo más victorias visitantes (2) que locales (1). Completó la grilla un empate.
La cuenta global, ahora, es de 12-4-4 a favor de los dueños de casa.
Con respecto a los goles, hubo pocos. Apenas 9 (la producción más baja se dio en la 4ª, con 8) en los 4 partidos. Ahora suman 55 en 20 encuentros, lo que arroja un promedio de 2,75 por match.
Argentina goleó a Ecuador con una facilidad asombrosa y se llevó los mayores aplausos. Pero los 3 puntos para los dirigidos por Alejandro Sabella eran previsibles y, en ese sentido, pesan más las 3 unidades conseguidas por Chile en La Paz y por Colombia en Lima. Incluso, el punto de Venezuela en Montevideo aparece como más importante a la hora de los recuentos finales.
De todos modos, la verdadera incidencia de todas estas suposiciones se verá más adelante. Lo cierto es que los resultados dejaron un nuevo líder, Argentina, que podría perder esa condición ya que quedará libre en la fecha 6.
Veamos lo más saliente que nos dejó la fecha 5.
El jugador: dos. Lionel Messi (Argentina) y Angel Di María (Argentina).
El del Barcelona y el del Real Madrid demostraron un altísimo nivel en el Estadio Monumental.
Del primero, nada sorprende.
Del segundo, si bien se le reconoce su calidad, creemos que nunca había jugado tan bien en la Selección Argentina.
Messi participó en todos los goles argentinos y marcó un golazo (el 3º). Di María puso una asistencia maravillosa en el 1º (aunque Kun Agüero estaba en claro offside no sancionado) y señaló el 4º con un zurdazo de pique al piso pleno de categoría y plasticidad (la posición del cuerpo y el latigazo rozaron la perfección).
Por ellos, acompañados también por Fernando Gago, pasó el abastecimiento a los puntas.
Aportaron circulación, traslado y precisión en velocidad. Resultado: dinámica y goles.
Excelentes actuaciones para ambos.
Prometedor lo de Di María como el socio que Messi necesita en el armado.
A los dos rosarinos los calificamos con un 9.
Las otras figuras: dos. Juan Arango (Chile) y Arturo Vidal (Venezuela).
¿Qué hicieron estos hombres para sus selecciones? Aportaron eso que no se compra en cualquier esquina, y que suele resultar la diferencia en la alta competencia. ¿Qué? Jerarquía.
Arango es crack. Con 32 años es el referente absoluto de la escuadra de César Farías.
Jugador con trayectoria europea, es un gran manejador de los tiempos en ofensiva. A esa virtud, le agrega su excelente pegada, lo cual aumenta su capacidad para conducir el juego de los suyos (en el empate 1-1 ante Uruguay puso un centro precioso en la cabeza de Salomon Rondon que derivó en el gol en contra de Diego Godín).
Es la cara de La Vinotinto, el símbolo. Con él como estandarte, los venezolanos buscarán concretar el sueño de su primera participación mundialista.
Vidal, que viene de consagrarse campeón invicto de Italia con la poderosa Juventus, es un polifuncional sobresaliente.
Juega en todos los puestos de la defensa y del mediocampo, y en todos lo hace muy bien. Y, como si eso no fuera demasiado, pasa con determinación al ataque, y anota goles (como el segundo para que La Roja gane 2-0 en La Paz ante los bolivianos).
Con apenas 25 años, es un líder natural en el equipo de Claudio Borghi.
La calificación para ambos: 8.
El equipo: por primera vez en 5 fechas, nos quedamos con Argentina.
Y lo hacemos por su producción de mitad de cancha en adelante, que fue devastadora.
El 4-0 ante Ecuador se justifica, únicamente, por la jerarquía de quienes forman su circuito ofensivo (Gago, Di María, Messi, Agüero e Higuaín).
En esta ocasión, el resultado está a la vista, sobró con ello.
Pero nos permitimos una crítica que excede esta actuación más que alentadora.
Para este analista, el DT Alejandro Sabella aún no encontró un arquero y una defensa.
Sergio Romero conforma a muchos, e incluso hemos escuchado a colegas periodistas hablar maravillas de sus condiciones para el arco. Estamos en desacuerdo, no lo consideramos ni siquiera bueno.
Con respecto a la línea de 4, no hay un solo defensor indiscutible. Son todos, como mucho, aceptables.
Y en el nivel internacional, es imposible marcar pauta con tanta fragilidad defensiva.
Volviendo al 4-0 ante Ecuador, cuando se juntan 5 jugadores de excelsa jerarquía, y todos actúan de 7 puntos para arriba, es mucho. Acá en Sudamérica, y también en el resto del mundo.
El partido: Argentina 4 vs. Ecuador 0.
¿La razón? Ya está dicho anteriormente. La producción ofensiva de los albicelestes fue sensacional.
El gol: el de Lionel Messi, el tercero de Argentina.
Arrancó con un pase de Fernado Gago para Lionel Messi. El "10" aprovechó los metros libres para desplegar una de sus típicas aceleraciones mortales. Buscó a Gonzalo Higuaín que, además de abrirse hacia la derecha distrayendo marcas, le devolvió a la perfección una pared-asistencia. Messi llegó a la carrera y de primera, de zurda, la clavó arriba desde la puerta del área. Golazo tremendo.
El equipo ideal: Claudio Bravo (Chile); Luis Amaranto Perea (Colombia), Mario Yepes (Colombia), Pablo Contreras (Chile), Gabriel Cichero (Venezuela); Juan Arango (Venezuela), Arturo Vidal (Chile), Egidio Arévalo Ríos (Uruguay), Angel Di María (Argentina); Gonzalo Higuaín (Argentina), Lionel Messi (Argentina).
El dato: Uruguay lleva 6 partidos sin poder derrotar a Venezuela por eliminatorias sudamericanas.
En ellos, acumuló 4 empates y 2 derrotas.
El último éxito charrúa fue en el camino hacia el Mundial de Corea-Japón del 2002 (3-1).
El árbitro: ninguno alcanzó los 7 puntos.
Aceptables los arbitrajes del argentino Néstor Pitana en Perú-Colombia; y del paraguayo Antonio Arias en Uruguay-Venezuela.
Malas labores del peruano Víctor Rivera en Argentina-Ecuador; y del ecuatoriano Alfredo Intriago en Bolivia-Chile.
La polémica de la fecha: el público boliviano, sus jugadores y el entrenador Gustavo Quinteros se quejaron airadamente por lo que ellos entendieron dos penales en su favor no sancionados por el juez Alfredo Intriago. Se pidieron dos manos en el área chilena. Una de Marcelo Díaz (totalmente casual) y otra de Charles Aránguiz.
La pregunta que nos dejó la fecha: ¿Cuánto podrá sostenerse el ciclo del argentino Gustavo Quinteros al frente de la selección boliviana?
Queridos lectores de ESPNDEPORTES.COM, se nos fue la 5ª.
Argentina es puntera exclusiva, pero todo puede cambiar tras el próximo fin de semana.
Hasta entonces.