LONDRES -- El marchista Horacio Nava fue el mejor de los mexicanos que tomaron parte en la prueba de los 50 kilómetros de caminata, en donde el ruso Sergey Kirdyapkin fue el ganador con nuevo récord olímpico en Londres 2012, con 3:35.59 horas.
Ante un fuerte calor que se sintió en la calles cercanas al Palacio de Buckingham, Nava detuvo el crono en 3:46.59 horas, para ubicarse en el puesto 16 de la competición.
Sin embargo, el marchista, originario del norteño estado mexicano de Chihuahua, no mejoró su resultado de hace cuatro años en Beijing 2008 cuando se ubicó en el puesto seis con un crono de 3:45.21.
En cuanto a la actuación de los mexicanos, el segundo mejor fue Omar Zepeda, en el puesto 23 con 3:49.14 horas, y el tercero José Leyver, quien se quedó en el sitio 28 con 3:55.00 horas.
Fue una prueba en la que los andarines mexicanos tuvieron que poner fuerza en las piernas para no flaquear ante el ritmo impuesto por el ruso Sergey Kirdayapkin, quien se alzó con la medalla de oro y récord olímpico, para dejar atrás el impuesto por el italiano Alex Schwazer de 3:37.09 en Beijing 2008.
En pleno corazón de Londres, los andarines mexicanos salieron en busca de los primeros sitios, pero a pesar de haber iniciado con buen ritmo en los kilómetros iniciales, no pudieron soportar los embates de los rivales, quienes estuvieron a paso firme en el grupo puntero.
Personas como el chino Si Tianfeng, el irlandés Robert Heffernan y los rusos Igor Erokhin y Sergey Bakulin, quienes trabajaron para su compañero Kirdyapkin, marcaron el ritmo, pero conforme avanzó la competencia se fueron atrás para enviar a los punteros a la fuga.
Al tiempo que los mexicanos Nava, Zepeda y Leyver estuvieron casi juntos, pero la estrategia de impulsar a quien estuviera mejor posesionado fracaso porque no soportaron el jalón de los demás y tuvieron que ceder terreno.
Pero el ímpetu no quedó en los marchistas nacionales, quienes fueron observados por el medallista de Los Ángeles 84, Raúl González, quien siempre se mostró preocupado por el desempeño de los andarines y, a pesar del aliento, los tres mexicanos no pudieron salir a flote.
En los kilómetros finales, es decir a los 40 kilómetros, el ruso se fue con todo y ya no perdió el liderato. Pero en la recta de última vuelta, las cosas dieron un cambio para las preseas de plata y bronce.
El australiano Jared Tallent, de ir en quinto sitio, se metió en segundo en la última vuelta, y el chino Si Tianfeng trató de alcanzarlo, pero no le fue posible y se quedó con la tercera plaza.
De esta manera, la marcha mexicana se queda lejos de medalla y tendrá que esperar cuatro años más para buscar la posibilidad de ascender al podio. La última vez que se logró medalla fue en Sydney 2000 con Joel Sánchez en los 50 kilómetros, con un crono de 3:44.36 horas.