ASHBURN -- Robert Griffin III hizo su debut como capitán en la NFL con un instito típico de RG3, calzando zapatos dispares, diciendo que regresó "aún más hambriento" tras unos días de descanso, y lamentando que quizás no se enfrente a Michael Vick el domingo.
Los jugadores ofensivos de los Redskins votaron el miércoles para nombrar a su mariscal de campo como capitán el resto de la temporada. El entrenador Mike Shanahan dijo creer que es la primera vez que tiene un novato en una posición con tanto liderazgo.
"Ahora ya sabes que todos te voltean a ver para hacerte cargo, hacer que todo funcione", dijo Griffin. "Para mí, no hay presión. Sólo le traspaso a todos que no soy sólo yo. La gente dirá que sí soy yo y me culparán y reconocerán por todo, pero son los muchachos a mi alrededor los que me hacen genial".
El título es una simple confirmación de la realidad. Desde el día que llegó, Griffin ha aprovechado con ansias el liderazgo que viene al ser un mariscal de campo titular en la NFL, y es la principal raazón por la que los Redskins (3-6) tienen la módica esperanza de poder revertir su temporada.
Usualmente Shanahan deja que los jugadores voten por una escuadra de capitanes antes de la temporada, luego votan otra vez a mitad del calendario. Griffin se une al tackle izquierdo Trent Williams como capitán a la ofensiva. Barry Cofield y Stephen Bowen se añadieron a London Fletcher en la defensiva. Lorenzo Alexander se mantiene como el único capitán de equipos especiales.
Griffin dijo que está recargado tras tomarse unos días "para alejarse de lo cotidiano" durante su semana de descanso. Siente que la postemporada se mantiene como una meta real para los Redskins debido a los problemas de sus rivales en el Este de la NFC.
"Regresé más hambriento... creí haber tenido hambre antes de semana de descanso", dijo Griffin. "Regresas y te das cuenta de cuánta energía acumlas tras una semana".
Ciertamente no perdió su creatividad. Para el entrenamiento, Griffin utilizó un zapato rojo en el pie izquierdo, y uno blanco en el otro.
"En la universidad solía usar un zapato blanco y uno negro", dijo Griffin. "Y el mensaje general es un trabajo conjunto de todos. Miércoles, jueves, los zapatos serán diferentes, y el viernes lo juntaremos todo y estaremos listos para el domingo".
En su breve carrera en la NFL, Griffin ha evocado comparaciones con otros pasadores ágiles, pero el nombre de Vick es el que se menciona más a menudo. Ambos se conocieron cuando Vick habló en el simposio de novatos este año, con Vick diciendo que le emocionaba su primer choque en el campo.
Se suponía que eso pasaría el domingo. En su lugar, el novato Nick Foles será probablemente el titular para los Phildelphia Eagles, porque Vick aún se recupera de la conmoción que sostuvo en la derrota frente a los Dallas Cowboys.
"Es desafortunado por muchas razones", dijo Griffin. "El factor clave que la gente ve en él y en mí, es el nivel de emoción que le ponemos al juego, las cosas que podemos hacer. Aparte de eso, trato de manterme al margen de las comparaciones".
Pero la lesión en la cabeza de Vick hace las comparaciones aún más inevitables. Griffin ya sostuvo su primera conmoción en la NFL, y su bravura como corredor hace cuestionar su durabilidad; las mismas preocupaciones que han seguido la carrera de Vick.
"No es una fábula con moraleja; el fútbol americano es un juego violento", dijo Griffin. "Y Vick, él ha sido un poco golpeado a lo largo de su carrera. Hay otros pasadores que son maltratados a lo largo de su carrera. Hay un número de mariscales ahora mismo que están conmocionados, lesionados del hombro, cosas así".
Shanahn dijo que no hay manera de saber si Griffin podrá evitar ese tipo de lesiones que han mermado la carrera la Vick.
"Si alguien puede responderlo, sería muy inteligente", dijo Shanahan. "No sé si puedas responder esa pregunta en la National Football League. Siempre esperas que la gente se mantenga saludable. Creo que Robert ha mejorado mucho para saber en qué momento deslizarse, cuando deshacerse del balón".
Es cierto que Griffin ha mostrado mejor juicio cuando se trata de evitar fuertes golpes, pero puso a temblar al estadio cuando giró como hélices de helicóptero tras un golpe, en una carrera de cuarta oportunidad, hace dos semanas contra los Carolina Panthers.
"Era cuarta y 4", dijo Griffin, "vale cualquier cosa".