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Tagliabue cerca de tomar su decisión

NEW ORLEANS -- El ex comisionado de la NFL, Paul Tagliabue, ha informado a oficiales de la liga y a los jugadores implicados en el escándalo de las recompensas de los New Orleans Saints, que planea completar todas las audiencias para el 4 de diciembre y tomar una decisión poco después.

Cuatro jugadores fueron suspendidos inicialmente, pero esos castigos fueron anulados y Tagliabue fue designado para desahogar las nuevas audiencias. Mientras tanto, el apoyador de los Saints, Jonathan Vilma, y el ala defensiva, Will Smith, aún están jugando.

Incluso mientras Tagliabue avanza en el proceso, una juez federal aún está considerando los argumentos de los jugadores de que Tagliabue debería ser removido como mediador, debido a que es parcial hacia la NFL. Con base en el calendario establecido por Tagliabue, la juez de distrito de los Estados Unidos, Ginger Berrigan, podría elegir tomar una decisión tan pronto como la próxima semana.

Por ahora, sólo el ex coordinador defensivo de los Saints, Gregg Williams, el ex asistente defensivo, Mike Cerullo, Vilma, el entrenador en jefe asistente de los Colts, Joe Vitt, el jefe de la oficina de seguridad de la NFL, Jeff Miller, están programados como testigos.

Ellos están programados para aparecer en una serie de audiencias en Washington, D.C., que se llevarán a cabo desde el martes hasta el 4 de diciembre. Eso significa que Vilma y Smith probablemente estarán disponibles al menos para los próximos dos partidos de los Saints en contra de los San Francisco 49ers este domingo y contra los Atlanta Falcons el 29 de noviembre. También podrían jugar ante los New York Giants el 9 de diciembre.

Ninguno de los jugadores ha cumplido un solo partido de sus suspensiones todavía, aunque Vilma no tuvo permitido asistir al campamento de entrenamiento de los Saints antes de que la primera resolución del comisionado, Roger Goodell, fuera anulada durante la Semana 1 de la temporada regular.

Vilma inicialmente fue suspendido por toda la temporada del 2012 y Smith recibió una suspensión de cuatro partidos.

Los otros dos jugadores castigados son los ex miembros de los Saints: el apoyador de los Cleveland Browns, Scott Fujita, quien en este momento se encuentra en la lista de reservas lesionados, y el liniero defensivo agente libre, Anthony Hargrove, quien originalmente se encontraba suspendido por ocho encuentros, pero más tarde vio reducida su sanción a siete encuentros y se le consideraron los primeros cinco partidos que se perdió como agente libre. Fujita inicialmente fue suspendido tres juegos y más tarde su sanción se redujo a un encuentro.

Ante la incansable resistencia de la Asociación de Jugadores de la NFL y los abogados que por separado representan a Vilma, quien afirma que Goodell podría no ser objetivo, el comisionado se excusó como mediador en el asunto de las recompensas y nombró a Tagliabue, su predecesor, en su lugar el 19 de octubre.

Tagliabue señaló en su más reciente comunicado que otros testigos podrían ser programados. Tagliabue también informó que espera decidir para el lunes si se permite que el archivo personal de Cerullo con los Saints sea incluido como evidencia.

Los jugadores han argumentado que Cerullo fue la principal fuente de información de la NFL acerca del programa de recompensas de los Saints. También han señalado que la credibilidad de Cerullo está en duda porque fue despedido por el club al término de la temporada del 2009 - 2010 y había acusado a la organización de evitar que consiguiera trabajo en otro cuerpo de entrenadores en la NFL.

La investigación de la NFL concluyó que los jugadores de los Saints fueron recompensados por sus golpes que sacaran de los partidos a jugadores rivales del 2009 al 2011. La liga indicó que había pruebas de que los Saints ofrecieron recompensas por golpear a mariscales de campo estelares, incluyendo a Brett Favre, Kurt Warner y Aaron Rodgers.

Los jugadores y entrenadores de los Saints han reconocido que tenían un sistema que recompensaba a los jugadores por realizar jugadas grandes que incluían intercepciones, balones sueltos forzados, capturas y golpes sólidos, similar a programas que han tenido otros equipos en la liga durante mucho tiempo. Sin embargo, los jugadores y entrenadores de los Saints dicen que nunca tuvieron la intención de lesionar a ningún jugador rival.

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