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La Católica no es ningun cuco

La Católica no supo como quebrar al San Pablo en Chile Getty Images

BUENOS AIRES -- Queridos lectores, me va a odiar toda la espléndida fanaticada de la Católica, pero este equipo no es ningún cuco. Lo demostró este jueves ante un equipo firme, serio y contundente como es el San Pablo.

El equipo brasileño no le hizo el juego a la Católica y se llevó un punto de oro de Chile. Se llevó sólo un punto, pero pudieron ser tres. Al comienzo del partido, San Pablo dejó en claro sus pretensiones y con un poderosísimo disparo de Jadson astilló el arco del arquero Toselli.

Y así, de entrada, San Pablo dominó de todas las formas y pudo llevarse tres puntos de oro. Luis Fabiano fue la gran estrella de la noche. El internacional delantero volvió loca a la defensa de la Católica de Chile que, no le encontró la vuelta en todo el partido.

Llegó el gol de San Pablo, de cabeza. Y a partir de ahí, el partido se emparejó. El local salió precipitadamente a buscar el empate. Tuvo que realizar una serie infernal de esfuerzos para lograr empatar.

Es una obviedad decir que a los chilenos se les complicará y mucho. Tienen que jugar en Brasil, ante un equipo que se mostró superior en Santiago, y si no media un disparate, le ganará en Brasil sin problemas.

De esta manera el equipo chileno paga caras muchas de sus irregularidades, de su ya clásica seguidilla de errores que anoche casi lo terminan por eliminar de la Copa.

Pobre de pie, pobre de cabeza. Sin ideas, sin entender la fórmula para contrarrestar el juego que le proponía el San Pablo, la Católica se enrededó en su propia impericia.

El segundo tiempo pudo ser para la Católica, si se ordenaba, si hacía bien las cosas y si sus poderosos delanteros acertaban alguna pelota. Nada de eso sucedió. El San Pablo se asentó en su juego y cerró todas las puertas. Como un linyera pidiendo una moneda en la puerta, del lado de afuera, quedó la famosa Católica de Chile.

El partido terminó en empate. Pero es un claro transpié para el equipo de Chile. Deberá jugar en tierra caliente, con un equipo que se insinúa más y mejor.

Como si esto fuera poco, si pierde, no tendrá la oportunidad de jugar la final de este certamen.

Muchos analistas dan al San Pablo como posible candidato. Otros en Chile, todavía sueñan con el milagro.