TIJUANA -- La cábala lo acompaña siempre. No Falló. Jorgealberto Hank Inzunza se aleja de los medios es fiel a su creencia personal de no hacer declaraciones en una final. Lo hizo en la liga de Ascenso y sus Xolos subieron a la Liga MX. Ahora su ilusión esta puesta en que Tijuana se consagre monarca del máximo circuito del futbol mexicano.
Es amable. Apenas se le comenta la posibilidad de una entrevista y respetuosamente deja en claro que a nadie le concedería declaraciones porque cree fervientemente que en esta ocasión su escuadra levantará el trofeo de campeón. Sin embargo posa en su estadio horas antes del partido de ida que definirá al campeón del Apertura. Han sido muchos años en los que Jorgealberto le ha invertido para llevar a su equipo al lugar donde se encuentra, por lo que la obtención del título sería una graduación más en los logros que ha conseguido con los Xolos.
La ciudad hasta esta mañana todavía no toma esa pasión que regularmente arrastran las sedes donde sus equipos celebran finales, sin embargo la efervescencia vendrá en las próximas horas cuando miles de seguidores asistan al estadio Caliente para impulsar a sus Xolos para obtener el campeonato.
Es común ver en las calles playeras de singulares divididas en dos algunas de ellas con las playeras de Chivas-Xolos, América-Xolos, Cruz Azul –Xolos, Pumas ya que la gente reconoce que este equipo se ha ganado su corazón ya que la identidad de su ciudad comienza a ganarles la identidad de sus colores.
El animo de la gente se ve distinto y la primera pregunta que haces es si Xolos podrá dar el paso que les de su consolidación como un equipo importante en la Primera División del Futbol Mexicano. Hoy se espera un lleno en el estadio Caliente que ya construye una tribuna más para albergar a un total de 33333 aficionados, número cabalístico también que le ha traido suerte a sus propietarios misma creencia que hoy que Jorgealberto Hank Inzunza mantiene con su silencio y su sueño de ver de a sus Xolos morder al Diablo y porque no dar el campanazo final de consagrarse en la historia del futbol mexicano.