|
LOS ÁNGELES -- J.J. Barea es alguien que se hizo un nombre durante la postemporada y su meta principal, al igual que la de todos en los Minnesota Timberwolves, es hacerse un lugar en la gran cita. El boricua cree que para esto será fundamental conseguir que toda la plantilla esté a pleno. "Primero es mantenernos saludables", aseguró. "Tratar de darnos una oportunidad de llegar a los playoffs". El armador es uno de los averiados, ya que intenta dejar atrás una lesión en el pie. "Estoy jugando", aclaró con una sonrisa de alivio. "Tengo una molestia en el pie izquierdo que mejora todos los días y está casi casi lista". La temporada ha tenido varios traspiés, ya que Ricky Rubio aún no ha regresado tras su operación de rodilla y los delanteros Kevin Love y Chase Budinger han pasado tiempo alejados de la tarima. "Empezamos bien", recordó. "Después tuvimos una baja de cuatro juegos. Tenemos a Kevin Love de regreso y solo tenemos que tomar un poco de ritmo". El diminutivo jugador llegó a Minnesota previo a la temporada pasada para aportar veteranía y una influencia positiva a una plantilla joven y llena de potencial. Dentro de la cancha, Rick Adelman le pide que emule lo que realizó con los Dallas Mavericks. El puertorriqueño fue una pieza fundamental del andamiaje de aquel equipo que ganara el anillo en 2011. "Mi rol es casi siempre el mismo", apuntó. "Venir del banco con mucha energía y hacer lo que el equipo necesite. De 20 a 25 minutos por juego hacer lo que pueda. Me gusta". Las aspiraciones de los suyos pasarán por cómo complete su recuperación del armador español. "Va muy bien", confirmó sobre Rubio. "Él es joven y tiene que tener calma. Ya pronto empieza a practicar, pero poco a poco. Es un tremendo compañero y jugador y queremos que esté con nosotros". Barea también compartió las sensaciones que le genera compartir una plantilla con mucho sabor extranjero. Los lobos cuentan con jugadores nativos de Rusia, Montenegro, España además del representante de la Isla del Encanto. "A mí me gusta y es interesante", expresó. "Podemos hablar de las cosas que pasan en los países de uno y todos tenemos un montón de historias. Nos juntamos con los americanos y hacemos un buen núcleo". REGLA ANTI-SIMULACIONES Barea se vio envuelto en la nueva reglamentación de la liga que apunta a controlar las simulaciones, siendo uno de los primeros jugadores en recibir una advertencia al respecto. "Es una regla bien difícil de poner en la NBA porque en cada posesión pasa algo", opinó. "Es algo que están tratando para mejorar el juego". Sin embargo, el base aclaró que esto no le hará modificar su estilo sobre el tabloncillo. "Yo siempre voy a dar todo lo posible para mejorar mi equipo", remató. "A mí nunca me va a cambiar mi juego".
|
