EAST RUTHERFORD -- Algunas ideas en la enorme victoria de los New York Giants, 52-27, sobre los New Orleans Saints en el MetLife Stadium.
Lo que significa: Los Giants continúan en el primer lugar de la NFC Este y en control de su propio destino de playoffs. Al medio día, los Washington Redskins y los Dallas Cowboys lograron sendas victorias de último segundo para mantenerse a no más de juego de distancia con tres pendientes. Así que una derrota de los Giants los hubiese colocado en un empate divisional triple con equipos que mantienen ventaja de desempate sobre ellos. Con la victoria, los Giants se mantienen con un juego al frente y mostraron que aún pueden ganar se segundo título divisional en fila si consiguen triunfos en el resto de sus partidos.
Súper Stevie: El safety de los Giants, Stevie Brown, reemplzando una vez más al lesionado Kenny Phillips, forzó un balón suelto y tuvo dos intercepciones del mariscal de campo Drew Brees. Suma ya siete intercepciones en la campaña, un número increíble para un jugador que fue una idea tardía cuando empezó el campamento. La defensiva de los Giants funciona mejor cuando Phillips está sano, pero lo que Brown les ha dad en lugar de Phillips ha sido oxígeno puro.
Juego terrestre: Hasta los 10 minutos finales del partido, los Giants no hicieron mucho corriendo el balón contra una defensiva de los Saints que entró al partido como la peor contra la carrera. Parte del problema fue una lesión temprana sostenida por el corredor Ahmad Bradshaw, quien regresó al partido en veces pero tuvo que cederlo su lugar al novato David Wilson durante un número significativo de acarreos. Los Giants movieron el balón por aire y no lograron encontrar ritmo por tierra. Es algo en lo que han trabajado durante casi dos temporadas completas, y los Giants mantienen la frustración al no poder resolver este aspecto de su ofensiva.
Motivación de novato: Wilson regresó una patada de salida para anotación, la primera vez en su carrera que lo ha hecho, y tuvo una actuación estelar en regresos de patada. También corrió 52 yardas para una anotación que sólo apiló la ventaja en los últimos minutos. Ha sido un jugador rápido y explosivo todo el año en los equipos especiales, y si Bradshaw no es capaz de jugar la próxima semana, los Giants probablemente se sientan seguros elevando a Wilson al puesto titular. Es posible que aparezca en el momento justo.
Tranquilidad de Eli: El mariscal de campo de los Giants, Eli Manning, tuvo momentos complicados, y sus dos intercepciones ayudaron a los Saints a aguantar durante algún período. Pero fue más bueno que malo en este, lanzando pases de anotación de cuatro receptores distintos y moviendo el balón de forma efectiva cuando se le necesitó. La serie que llevó a la anotación de Domenik Hixon hacia el final de la primera mitad, mostró a un Manning clásico y le dio a los Giants un aliciente con ventaja de ocho puntos hacia el entretiempo, en lugar de uno.
Algo que mejorar: La defensiva de los Giants aún asoma fugas, y fue la segunda semana consecutiva que fueron embestidos con juego terrestre. Entraron a la semana ranqueados en el N° 22 de la liga en defensiva total, pero empatados en tercero en diferencial de entregas, que ha sido clave en cualquier éxito que han tenido como defensiva. Hemos visto a equipos ganar campeonatos con este tipo de defensivas flexibles que buscan forzar entregas. De hecho, los Saints de hace tres años fueron un ejemplo estelar. Pero sin un lugar asegurado en playoffs, le vendría bien a los Giants encontrar mayor consistencia detendiendo los avances rivales.
Lesiones: El esquinero de los Giants, Prince Amukamara, salió del partido en el cuarto período por una lesión en el tendón de la corva, que obviamente no debe perderse de vista. Amukamara ha sido el mejor esquinero de los Giants este año, y durante su breve carrera en la NFL no ha mostrado que puede sanar rápido.
Lo que sigue: Los Giants viajan para enfrentar a los Atlanta Falcons en el Georgia Dome al medio día del domingo. Los Falcons están 11-2 y son los mejor perfilados para obtener la ventaja de jugar en casa la postemporada de la NFC, aunque perdieron contra los Carolina Panthers el domingo y han mostrado algunos problemas últimamente. Están 6-0 en casa este año y 32-7 en el Georgia Dome a lo largo de las últimas cinco temporadas.