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Las mejores temporadas individuales

(Nota: La siguiente es una versión actualizada de un artículo publicado originalmente en ESPN.com en enero del 2008).

BRISTOL -- El mariscal de campo de los New England Patriots, Tom Brady, disfrutó una temporada regular tan dominante en el 2007 que nos hizo reflexionar sobre cómo se compara su rendimiento en contra de las hazañas más impresionantes en la historia de la liga. Cinco años más tarde, el corredor de los Minnesota Vikings, Adrian Peterson, está haciendo lo mismo, inspirándonos a actualizar nuestra lista de las 10 mejores temporadas individuales en la historia de la NFL.

¿Cómo determinamos los mejores años individuales en la NFL? Algunos creen que todo se reduce a los jugadores que tienen los mejores números. Otros ven el contexto como algo más crítico, especialmente cuando algunos jugadores --como O.J. Simpson y Jerry Rice-- establecieron sus récords en menos partidos que los jugadores que los rompieron.

Así que aquí está lo que pensamos acerca de cuáles jugadores tuvieron las mejores actuaciones desde que la AFL y la NFL se fusionaron en 1970. Estamos seguros que tendrán sus propias opiniones:

1. Dan Marino, Miami Dolphins, 1984: Marino utilizó su segunda campaña profesional dentro de la NFL para aterrorizar secundarias semana a semana. Dotado de un veloz desprendimiento del balón, y un cañón en el brazo, tuvo una temporada que requirió una sección propia en el libro de récords de la liga. Marino impuso nuevas marcas para yardas (convirtiéndose en el primer jugador en superar las 5,000 yardas en una campaña, con 5,084) y pases de touchdown (superando la marca anterior de 36 con sus 48) y guió a los Dolphins al Super Bowl de esa temporada. La carrera de Salón de la Fama de Marino incluyó varias grandes temporadas, pero ninguna superó esas hazañas.

De hecho, hay una razón principal por la que su desempeño sigue ocupando un lugar más alto que las recientes actuaciones de Peyton Manning y Brady. La aplicación de las reglas era distinta. Tanto Manning como Brady se han beneficiado de la decisión de la liga, tomada en el 2004, de poner un mayor énfasis en la aplicación de la regla del contacto ilegal, que sanciona a los defensivos que tocan a los receptores más allá de las primeras cinco yardas desde la línea de golpeo. Si Marino hubiera tenido esa ventaja, nadie habría igualado la temporada que tuvo hace 28 años.

2. Eric Dickerson, Los Angeles Rams, 1984: Todo lo que tienen que saber sobre la temporada récord de Dickerson --sumó 2,105 yardas por tierra ese año-- es que los Rams no tenían ataque aéreo. Su ofensiva dependía primordialmente de las carreras de Dickerson por derecha, las carreras de Dickerson por izquierda, y las carreras de Dickerson por cualquier lugar del centro. Que haya generado tanto yardaje es un reconocimiento a los hombres que bloquearon para él y a las notables habilidades con las que contaba. Este hombre fue uno de los mejores corredores puros que la NFL haya visto jamás.

Algunos escépticos se quejan de que Dickerson necesitó 15 partidos para alcanzar la marca de las 2,000 yardas --mientras que O.J. Simpson lo hizo en apenas 14 partidos en 1973-- sin embargo Dickerson era espectacular y constante. Como prueba consideremos que Dickerson estableció un récord ese año al superar la marca de las 100 yardas 12 veces esa temporada. Uno no hace eso por tener más acarreos. Y uno no conserva el récord de yardas por tierra tanto tiempo como Dickerson sin hacer algo verdaderamente especial.

3. Adrian Peterson, Minnesota Vikings, 2012: Incluso si Peterson no supera el récord de Dickerson, está teniendo una temporada para la historia. Ningún corredor ha hecho lo que él ha realizado con tantos factores en contra: la rodilla quirúrgicamente reparada, la falta de armas ofensivas a su alrededor, la inconsistencia de un ataque aéreo dirigido por un mariscal de campo de segundo año. El hecho de acercarse a la marca de las 2,000 yardas con todos esos retos nos dice que el tipo ha logrado algo que podríamos nunca volver a ver. En 15 partidos, Peterson está promediando 6.0 yardas por acarreo y 126.5 yardas por partido.

4. Peyton Manning, Indianapolis Colts, 2004: Solamente un mariscal de campo en la historia de la NFL --Aaron Rodgers de los Green Bay Packers en el 2011-- ha sido más eficiente en una temporada completa que Manning este año. Sí, la temporada de Manning es recordada principalmente porque lanzó un entonces récord de 49 pases de touchdown. Pero otra marca de la liga que rompió Manning esa temporada --su índice de pasador de 121.1 fácilmente eclipsó la marca anterior de 112.8 establecida por el ex mariscal de los San Francisco 49ers, Steve Young, en 1994-- fue igual de notable. Eso básicamente significa que Manning no tuvo un desempeño que fue menos que excelente en toda la temporada (Rodgers llegó a romper el récord de Manning con un índice de pasador de 122.5 en la temporada del 2011 recordada por ser orientada al ataque aéreo).

Manning estaba tan encendido que estableció récords de la liga al lanzar al menos cuatro pases de touchdown en cinco partidos consecutivos y tener seis juegos en general con al menos cuatro pases de anotación. Sin embargo la parte más intrigante es lo que podía haber hecho con más tiempo de juego. Debido a que los Colts lo retiraban del campo en el último cuarto de al menos cinco victorias por paliza y durante casi todo el juego en el último partido de la temporada, Manning intentó 497 pases. Con algunas oportunidades más, Manning habría establecido récords que Rodgers y otros nunca habrían sido capaces de tocar.

5. Tom Brady, New England Patriots, 2007: Mucha gente esperaba que Brady fuera tan confiable como siempre cuando los Patriots adquirieron a los receptores abiertos, Randy Moss, Wes Welker y Donte' Stallworth, durante la temporada baja de ese año. Pero pocos podían haber imaginado el asalto que dirigiría sobre los libros de récords de la NFL una vez que comenzó la temporada regular. No fue solamente que Brady hiciera historia con sus 50 pases de touchdown y su racha de 10 partidos con al menos tres pases de anotación. La concentración de este jugador nunca se desvaneció mientras los Patriots terminaban una temporada regular perfecta.

Junto con los pases de touchdown, Brady estableció un récord personal para menos intercepciones (ocho), y lideró a la NFL en yardas aéreas (4,806) e índice de pasador (117.2). Combinen esos números con el hecho de que New England se convirtió en el primer equipo en terminar con marca 16-0 una temporada regular y lo que obtendremos es un año que nunca olvidarán. Brady era fácilmente el mejor mariscal de campo en juegos grandes de su general, incluso antes de la temporada del 2007. Ahora nos está dando motivos para creer que podría ser el mejor pasador en la historia de la NFL para cuando se retire.

6. LaDainian Tomlinson, San Diego Chargers, 2006: La NFL ha visto a otros corredores tener grandes rachas anotadoras en años recientes, específicamente Emmitt Smith de los Dallas Cowboys y Shaun Alexander de los Seattle Seahawks. Sin embargo nunca lograron lo que hizo Tomlinson hace seis años. Tomlinson estableció marcas de la liga para touchdowns por tierra (28), touchdowns totales (31) y puntos (186) en una temporada. También lanzó un par de pases de touchdown.

En general, Tomlinson estableció 13 récords de la liga durante su gran año, pero eso ni siquiera es la parte sorprendente. Lo que es verdaderamente asombroso es lo dominante que se volvió Tomlinson en la segunda mitad del año.

En retrospectiva, Tomlinson anotó 23 de sus touchdowns en apenas ocho partidos. Anotó únicamente ocho veces en sus primeros seis juegos ese año y no anotó ningún touchdown en sus últimos dos juegos. Además, Tomlinson también lideró a la liga en yardas por tierra (1,815) mientras acumulaba un total de 2,323 yardas totales. Esa última cifra se ubica como el séptimo total más alto en la historia de la liga.

7. Drew Brees, New Orleans Saints, 2011: Brees rompió el récord de Marino al lanzar para 5,476 yardas la temporada pasada. Si eso no fue suficiente, conectó el 71.2 por ciento de sus intentos con 468 pases completos --ambos récords de la liga-- y sumó 46 pases de touchdown. Brees tiene la ventaja sobre la temporada del 2011 de Rodgers con base en el hecho de que el récord que Brees rompió (yardas aéreas de Marino en 1984) estuvo vigente más tiempo que el que Rodgers rompió (índice de pasador de Manning en el 2004). Pero cuando se trata de dominación pura, los números de Brees no parecen ser tan devastadores como lo que realizaron Marino, Manning y Brady en el mejor año de sus carreras. En todo caso, ejemplifican lo orientada al pase que se ha vuelto la NFL recientemente. Si Brees hubiese logrado esa hazaña en un año distinto, podría haberse ubicado en un lugar más alto aquí. Pero ya que logró esas marcas en una temporada en la que 10 pasadores distintos lanzaron para más de 4,000 yardas y otros dos (Brady y Matthew Stafford de los Detroit Lions) lanzaron para 5,000 yardas, y un cierre patronal en la temporada baja afectó a las defensivas de la liga, el logro recibe un golpe en este caso.

8. Jerry Rice, San Francisco 49ers, 1987: Rice es otro de los jugadores de esta lista que disfrutó tantas temporadas fenomenales que es difícil señalar sólo una de ellas. Pero la de 1987 se destaca por una razón: su producción en un corto periodo de tiempo. Aún con la huelga de jugadores limitando a Rice a 12 partidos, se las arregló para producir un récord de la NFL con 22 recepciones de touchdown. También anotó 23 touchdowns en general, quedándose una anotación por debajo del récord para una sola temporada en poder de John Riggins en aquel momento.

Desde luego, algunos podrían argumentar que Rice tuvo años en los que sus números fueron más prolíficos en otras áreas --por ejemplo, atrapó 122 pases para un entonces récord de 1,848 yardas y 15 touchdowns en 1995-- pero hay muchos receptores que tienen una gran cantidad de recepciones y yardas. Los realmente especiales llegan a la zona final. Y ya que le tomó a Moss, entonces con New England, 16 partidos para romper la antigua marca de Rice (con 23 touchdowns en el 2007), consideraremos que el viejo pertenece a esta lista. Por cierto, Rice fue nombrado el Jugador Más Valioso de la NFL en aquel año.

9. Lawrence Taylor, New York Giants, 1986: Taylor disfrutó de varias temporadas sobresalientes en New York, pero nada de lo que hizo por esa franquicia se compara con lo que logró en 1986. Produjo 20.5 capturas, el mayor número de su carrera en una sola temporada. Sumó 105 tacleadas, cinco pases defendidos y dos balones sueltos forzados. Fue tan brillante que no fue suficiente con nombrarlo Jugador Defensivo del Año. Se convirtió en el primer jugador defensivo en ser reconocido como el Jugador Más Valioso de la NFL, desde que Alan Page lo logró con Minnesota en 1971.

El dominio de Taylor no terminó en la temporada regular. Ayudó a guiar a los Giants en los playoffs --superaron a sus rivales de la NFC, San Francisco y los Washington Redskins, por marcadores combinados de 66-3--, y a derrotar, 39-20, a los Denver Broncos en el Super Bowl.

10. O.J. Simpson, Buffalo, 1973: Sería sencillo decir que Barry Sanders de Detroit (2,053 yardas en 1997), Jamal Lewis de los Baltimore Ravens (2,066 yardas en el 2003) o Chris Johnson de los Tennessee Titans (2,006 yardas por tierra y un récord de la NFL con 2,509 yardas desde la línea de golpeo en el 2009) pertenecen a esta lista, pero Simpson merece ser reconocido por esta temporada en la que rompió la marca de yardas por tierra. Cuando Simpson sumó 2,003 yardas por tierra en 1973, fue uno de los momentos más sorprendentes en la historia de los deportes. Fue el primer corredor en llegar a la marca de las 2,000 yardas y ninguno de los corredores que ha logrado esa hazaña lo ha hecho en 14 partidos. De hecho, sigue siendo una apuesta segura decir que ningún otro corredor será tan productivo en tan poco tiempo.

La temporada de Simpson es aún más impresionante debido a cómo terminó. Tenía 1,584 yardas de cara a las últimas dos semanas de esa temporada, pero su línea ofensiva le abrió el camino para que llegara a los libros de récords. Sumó 219 yardas en contra de New England antes de acumular otras 200 ante los New York Jets en el último juego de la temporada. Ese esfuerzo por sí mismo debe decirnos lo extraordinario que era Simpson.

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