BUENOS AIRES -- Los jugadores de Boca Juniors que quedaron en Buenos Aires, la mayoría de los considerados titulares, se entrenaron por la mañana del martes en el complejo Pedro Pompilio a las órdenes de Marcelo Herrera, uno de los asistentes del director técnico Carlos Bianchi y el profesor Julio Santella, coordinador de preparadores físicos.
El arquero Agustín Orion, con un vendaje en el dedo mayor de la mano izquierda, desarrolló la rutina común a la mayoría de los presentes pero no se calzó guantes ni realizó actividad específica de su puesto aunque se estima que podría jugar el próximo sábado ante River Plate en Córdoba.
Ribair Rodríguez (traumatismo de cadera) trotó por el perímetro de la cancha principal, sin tomar contacto con la pelota y Claudio Pérez (desgarro de recto anterior derecho) trabajó bajo la supervisión del kinesiólogo Leonardo Betchakian en tanto que Diego Rivero (distensión de gemelo derecho) no tuvo tareas en campo.
Después de cumplir con ejercicios físicos dirigidos por Santella, los futbolistas desarrollaron dos sesiones de fútbol en espacios reducidos, seis contra seis con tres arcos chicos.
Con remeras blancas jugaron Orion, Franco Sosa, Dino Castagno, Pablo Ledesma, Walter Erviti y Juan Imbert en tanto que sin remeras lo hicieron Matías Caruzzo, Clemente Rodríguez, Leandro Somoza, Leandro Paredes, Juan Manuel Martínez y Santiago Silva.
En medio de ambas sesiones, se llevó a cabo un ejercicio de coordinación, conducción y definición en una de las mitades de la cancha, con Sebastián D'Angelo y el juvenil Ramiro Martínez como arqueros.
El plantel de Boca, ya todo reunido tras el regreso de los que viajaron a Mendoza y con Bianchi a la cabeza, volverá a entrenarse en Casa Amarilla el miércoles a partir de las 18.30.