BUENOS AIRES -- El plantel de Boca Juniors retomó este lunes los entrenamientos con vistas al debut en el torneo Final del próximo sábado ante Quilmes, mientras en el club comenzó a instalarse repentina, sorpresiva y nuevamente el nombre de Juan Román Riquelme, quien en dos oportunidades manifestó su decisión de no jugar en esa institución.
Luego de la derrota en el superclásico del pasado sábado ante River por 2-1, en equipo conducido por Carlos Bianchi comenzó a pensar exclusivamente en los partidos "en serio", tal como los calificó el entrenador.
Lo hizo en el complejo Pedro Pompilio, el mismo día en el que comenzó a tejerse un enésimo eventual retorno de Riquelme a Boca, luego de interrumpir su contrato en julio pasado luego de perder la final de la Copa Libertadores con Corinthians y tras coquetear a fines de 2012 y principios de este año con esa posibilidad.
Incluso en esa última oportunidad, Riquelme se reunió con el presidente de Boca, Daniel Angelici, y el por entonces flamante entrenador, Carlos Bianchi, pero dijo que "no traicinaría su palabra" de no volver a esa institución y nuevamente se alejó de Boca.
El estratega, quien también estuvo en la mira de Palmeiras, también se juntó luego con Sergio Massa, hombre fuerte del club Tigre, mientras que el restante club en el que estaría dispuesto a jugar en el país, Argentinos Juniors, sólo esgrimió una tibia intención de contratarlo a través de su presidente, Luis Segura.
Lo concreto es que hoy volvió a oírse su nombre en La Bombonera y el complejo Pedro Pompilio, aunque si por su palabra fuera, la posibilidad no debería ser más que remota.
En ese contexto, el plantel se entrenó pensando en el duelo con Quilmes, equipo que lo venció en la primera fecha del torneo Inicial y al cual intentará superar no sólo para tomarse revancha de esa derrota sino para dejar atrás rápidamente el sabor amargo del superclásico en Córdoba.