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Argentina, con guiños a favor

Ormaechea abre ante Larsson en el Parque Roca Asociación Argentina de Tenis

BUENOS AIRES -- La historia contrasta con la semana pasada. El escenario es el mismo, el Mary Terán de Weiss de Parque Roca, pero el clima es bien distinto. No la temperatura, porque el calor parece haberse quedado a vivir en Buenos Aires, pero sí la repercusión. Menos flashes, sin cámaras y con cuatro chicas bien descontracturadas. Sonrisas y mucha unión en un grupo que viene de atravesar la Zona Americana y de vencer a China en los playoffs por el ascenso al Grupo Mundial II. Esta vez, ya pasada la gran victoria -y algo convulsionada- del equipo de Martín Jaite en la Copa Davis, es turno de las muchachas de Bettina Fulco en la Fed Cup.

Como punto de partida, el sorteo arrojó muchas más certezas que sólo el orden de juego para la serie. Es cierto, Paula Ormaechea abrirá fuego ante Johanna Larsson, pero este viernes en el Mary Terán de Weiss además quedó en claro que el capitán sueco Lars-Anders Wahlgren no tiene del todo claro a la formación argentina y que la segunda raqueta de la visita y número 71ª de la WTA no llega en las mejores condiciones. Sin dudas estos son tres guiños para Argentina, en una serie que se presenta muy dura y que hace pensar en el núcleo del equipo de Fulco en animarse a un 50 y 50 de chances.

Pero vayamos por pasos. ¿Por qué tres guiños?

Primero, porque el sorteo se presentó favorable, o por lo menos cómo querían las chicas argentinas. Ormaechea (197ª) reconoció que no tenía preferencia por el orden, pero se puso contenta por abrir la serie. "Me gustó la experiencia del año pasado", dijo la oriunda de Sunchales, con relación a las cuatro series de la Zona Americana y el playoffs por el ascenso ante China. A su vez, Florencia Molinero no dudó y, entre risas, replicó: "Yo sí quería jugar segunda".

Segundo, porque el capitán Wahlgren se fue con una sensación incómoda del sorteo por la formación argentina. Resaltó que él creía que el segundo single argentino estaría a cargo de María Irigoyen, por lo que "tendrán que replantearse algunas cosas". Un pensamiento raro teniendo en cuenta que Florencia Molinero (9-1 en singles) dio el presente en los individuales durante todo 2012, mientras que la tandilense, por su parte, no juega singles en la Fed Cup desde julio de 2011.

Tercero, porque la adaptación de Johanna Larsson no parece ser la mejor. Viene de jugar en canchas duras bajo techo y se sumó más tarde al plantel en Buenos Aires. Tiene pocas horas sobre clay y en las prácticas se la vio fastidiosa, incluso hasta tirando su raqueta al piso en varias ocasiones. No obstante, es peligrosa. En su última aparición sobre polvo de ladrillo, en julio en Bastad, alcanzó las semifinales dejando en el camino a dos top-35: la española Anabel Medina Garrigues y la checa Klara Zakopalova. "No vengo jugando en polvo de ladrillo, pero aquí estoy para jugar", soltó la blonda, de pocas palabras en la conferencia, tal como su compañera Sofia Arvidsson. Otra diferencia a los alemanes en la Davis, quienes se mostraron muy sueltos ante cada consulta.

Este desconocimiento y poca preparación, por su parte, tiene un opuesto en la Argentina. La capitana Fulco estudió en detalle a sus rivales, a tal punto de que sumó al juvenil Agustín Torre en los entrenamientos porque "Larsson no juega tan plano y tiene un estilo más cercano a un varón, con mucho top" y no dejó de llamarle la atención la llegada tardía de la 71ª del mundo. "Vi que no se está movimiento bien. No es fácil el cambio de superficie", destacó la ex 23ª de la WTA en 1988.

Y todo eso contagia a las argentinas, que no quieren dejar la oportunidad. "Nos costó mucho llegar acá. Es una serie muy dura, pero vamos a tener la chance de disfrutarla. Siempre es un orgullo representar al país", destacó Irigoyen, la más grande del equipo con 25 años y quien hará dupla con Mailén Auroux, quien, algo más pasional, dijo que "sería muy lindo tener la oportunidad de jugar y ganar en un quinto punto definitorio, pero ojalá la serie se cierre antes a nuestro favor". Un dato no menor: la pareja argentina ganó los cinco partidos que jugó sobre tierra batida por la Fed Cup.

Así, a punto de comenzar una serie muy dura pero con buenos indicios en la previa, Argentina va por su vuelta al Grupo Mundial I, honor que perdió en 2005 tras una cerradísima caída ante la Bélgica de Kim Clijsters. Las chicas están listas para seguir escribiendo su historia.