La temporada 2012-13 resultó ser otro rotundo fracaso para el Arsenal, luego de ser eliminado en los octavos de final de la UEFA Champions League por el Bayern München.
Los Gunners no consiguen levantar un trofeo desde el 2005, cuando ganaron la FA Cup derrotando en la final al Manchester United a través de la definición de penales, y bajo el mando del mismo Arsène Wenger.
En octubre del 2013 el francés cumplirá 17 años dirigiendo al Arsenal, y su periplo en el banquillo del club londinense puede dividirse en dos etapas: sus primeros 10 años, plagados de éxitos con 3 títulos de Premier League, 4 FA Cups, 3 Community Shields y un subtítulo de Champions League en el 2006, el que sería su último gran logro. Llegó a tener un conjunto que no sólo ganaba trofeos, sino que además practicaba un fútbol brillante, llegando a ser considerado el mejor equipo del mundo con jugadores de una gran técnica que se entendían muy bien en el campo como Thierry Henry, Dennis Bergkamp, Patrick Viera, Robert Pires, Fredrik Ljungberg, Marc Overmars y Sylvain Wiltord, entre otros.
Luego del subtítulo en Champions League en 2006, a Arsenal le comenzaron a ser esquivos los títulos. Son 8 años de absoluta sequía, en los cuales tan sólo se ha establecido como un gran animador de la Premier League, y aunque han seguido clasificando a todas las ediciones de la UEFA Champions League, no han logrado hacer algo verdaderamente importante.
La última esperenza del Arsenal esta temporada era la Champions League, que se fraguaba en una vía de escape para que un presionado Wenger le devolviera a su afición lo que tanto anhelaba: la obtención de un título a como diera lugar. Sobre todo después de que el club de Londres fuera eliminado de la Capital One Cup en cuartos de final, la FA Cup en octavos y están sin posibilidades en la Premier League, ya que se encuentran quintos en la tabla de posiciones, a 24 puntos del líder Manchester United.
Por lo tanto la situación de Wenger se torna cada vez más complicada, la presión va en aumento, y pareciera que su permanencia en el banquillo de los Gunners está en riesgo, sin importar todo lo que le ha dado el francés al club.
"Cuando no ganas, la gente comienza a cuestionar tu trabajo, tu legado y todo lo que has hecho anterioremente. Es triste, pero así funciona esto", expuso Thierry Henry hace un mes al diario británico The Daily Mirror sobre la situación de su exentrenador, a quien de paso defendió y le reafirmó su admiración.