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Jones quiere ser el WR principal

INDIANAPOLIS -- Tras una temporada en que lideró la liga con 14 recepciones para anotación, James Jones se dijo listo para convertirse en el receptor abierto N° 1 de los Green Bay Packers.

Con la salida del receptor y agente libre, Greg Jennings, Jones se mostró confiado en asumir ese rol durante una entrevista con NFL Network.

"Lo estoy", dijo Jones. "Lo estoy. Siento que estoy listo para asumir ese papel y tomar la posición de receptor N°1. Aún tenemos muchos receptores buenos, con Jordy Nelson y Randall Cobb. Simplemente estoy contento que, si perdemos a Greg, muchos de nosotros tendremos muchas más oportunidades para hacer jugadas y con suerte ayudemos a ganar partidos".

La temporada pasada, Cobb lideró a los Packers en recepciones (80) y yardas recibidas (954), pero definir al principal receptor no tiene que ver únicamente con las mejores estadísticas. Un verdadero receptor N° 1, para aquellos equipos que nunca lo han tenido, es un jugador en el que puedes contar para hacer una jugada que cambie el partido en momentos críticos, sin importar la formación defensiva.

Hace un año, era válido cuestionar la aptitud de Jones para asumir dicho rol. Dejó caer 7.3 por ciento de los pases que le lanzaron en 2011, de acuerdo con ESPN Stats & Information, el 11° porcentaje más alto entre los 132 receptores calificados. Ese número era 7.4 por ciento en 2010, colocándolo en el lugar 120 de 136 calificados.

La temporada pasada, no obstante, Jones recortó esos errores por más de la mitad y terminó con un porcentaje de pases caídos de 3.1. Eso lo colocó en el lugar 38 entre los 134 receptores, y estuvo por debajo del promedio de 4.7 por ciento en la NFL.

El mariscal de campo de los Packers, Aaron Rodgers, siempre ha dicho que administrará el profundo conjunto de jugadores habilidosos lanzándole al hombre desmarcado. El receptor abierto N° 1 de los Packers en 2013 --ya sea Jones, Cobb, Nelson o alguien más-- será el jugador que se desmarque constantemente y atrape el balón de forma rutinaria en los momentos más importantes. Así de simple es en Green Bay.

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