SAO PAULO -- El club brasileño Corinthians declaró el jueves siete días de luto por la muerte de un adolescente boliviano de 14 años que fue impactado en el rostro por un petardo supuestamente lanzado por hinchas del equipo durante el partido de la Copa Libertadores jugado el miércoles con el San José, en la ciudad de Oruro.
En una nota de prensa divulgada el jueves, el Corinthians, actual campeón de la Libertadores y mundial, manifestó la "consternación" causada por la "pérdida irreparable" del joven Kevin Beltrán Espada y expresó su "solidaridad" a los familiares del chico boliviano.
Según la nota, firmada por el presidente del club, Mario Gobbi Filho, el Corinthians "decreta luto oficial de siete días" por la tragedia, y el equipo jugará con una franja negra los partidos de la próxima semana, con el Bragantino, por el Campeonato Paulista, y con Millonarios, de Bogotá, por la Libertadores.
El joven boliviano recibió el impacto del petardo en el ojo derecho cuando los hinchas del Corinthians celebraban en el estadio Jesús Bermúdez, de Oruro, el gol de su equipo en el partido, que terminó empatado 1-1, y falleció cuando era trasladado a un hospital.
Según los médicos que a atendieron a Beltrán Espada, el petardo penetró hasta la cavidad craneal y le causó pérdida de masa encefálica y la muerte casi inmediata.
Al terminar el partido, el técnico del Corinthians, Adenor Leonardo Bacchi "Tite", consternado, expresó su pesar por el fallecimiento del chico.
"Yo cambiaría mi título mundial por la vida del chico, lo cambiaría", expresó el técnico.
Según medios brasileños, doce hinchas del Corinthians, de entre 18 y 35 años de edad, están detenidos en Bolivia por el incidente en el estadio que costó la vida al joven espectador.
MINISTRO CONDENA VIOLENCIA
El ministro de Deporte de Brasil, Aldo Rebelo, expresó su "profundo pesar" por la muerte de un joven boliviano durante un partido del Corinthians, condenó la violencia en el fútbol y exigió un "castigo ejemplar" para los culpables.
Rebelo se solidarizó con los familiares de Kevin Beltrán Espada, de 14 años, quien falleció tras ser impactado en el rostro por un petardo supuestamente lanzado por hinchas del equipo brasileño durante un partido jugado este jueves con el San José, en la ciudad boliviana de Oruro, por la Copa Libertadores.
Mediante una nota oficial en la que calificó de "inaceptable" todo tipo de violencia en el deporte, el ministro señaló que su despacho "aguarda la conclusión de las investigaciones a fin de que sean descubiertos los culpables", para quienes exigió un "castigo ejemplar".