BUENOS AIRES -- Nació un 18 de noviembre de 1981, en Abidjan, Costa de Marfil. Pero con el correr de los años se transformó en uno de los líderes del rugby en Francia. A los 10 años dejó su país natal y se instaló junto a su familia en Dordogne. Primero hizo judo y después sí a los 16, empezó con el deporte de la ovalada. Pasó por Bégles-Bordeaux, Colomiers y Biarritz, y fue figura del multicampeón Toulouse. Hasta 2012, capitán del seleccionado francés y hasta hoy, un referente e indiscutido en el plantel de Philippe Saint-André. ¿Quién es? Thierry Dusautoir.
Con un perfecto castellano, y luego de disculparse por no haber respondido antes, uno de los mejores alas del mundo aceptó un mano a mano con Scrum, tras del pobre Seis Naciones con Francia y ya con la cabeza puesta en su equipo, que lucha en el Top 14 francés y que sin la Copa Europa en el camino, necesitan revertir su imagen en la Challenge Cup.
- ¿Qué balance hicieron del último Seis Naciones con Francia? ¿Qué sienten?
- Desde ya estamos muy decepcionados de nuestro Seis Naciones. Haber obtenido el último puesto no es algo aceptable para un equipo como el nuestro. Pero somos conscientes de que tenemos un equipo joven y que esta experiencia va a ayudarnos a lograr algo positivo en el futuro.
- ¿Por qué pensás que después de lo que fue un 2012 muy bueno, recién pudieron ganar al final del torneo?
- Comenzamos de una mala manera perdiendo contra Italia y eso tuvo una repercusión negativa sobre el equipo, con respecto a la presión. Hasta este momento sólo había tenido la oportunidad de vivenciar únicamente victorias y las críticas eran únicamente positivas. Llegó un momento en el que nuestro peor adversario se transformó en nosotros mismos.
- ¿El último triunfo ante Escocia llevó un poco de tranquilidad al grupo?
- Sí, seguro. Era importante ganar este último partido por nosotros y para el público. Sabemos que fue un mal torneo pero estamos contentos de haber podido ganar frente a Escocia.
- ¿Cómo viste al campeón Gales?
- Fue bien merecido este título, sobre habiendo cerrado el torneo con una magnífica victoria contra Inglaterra. Pienso que tenemos muchas cosas positivas que aprender de los galeses, ya que venían de perder ocho partidos seguidos antes de jugar contra nosotros y de ganar el torneo.
- Queda junio y noviembre ahora con Francia, ¿es la oportunidad para dar vuelta esta floja actuación?
- Vamos a ir a Nueva Zelanda para jugar contra la nación más grande del mundo. Va a ser una experiencia excepcional y enriquecedora para nosotros .
Por unos meses, el seleccionado quedó a un lado. Y Toulouse es su presente. Hoy están terceros en el Top 14, detrás de Toulon y Clermont. Eliminados de la Copa Europa en primera fase, algo histórico para el club francés, también tendrá revancha en la Challenge Cup, donde lo espera Perpignan en cuartos de final.
- Se viene el final del torneo con Toulouse en el Top 14, ¿a quién ves como favorito? ¿Cómo ves a Toulouse?
- Los candidatos son Clermont y Toulon, que están en lo mejor de su rugby. Nosotros venimos de quedarnos fuera de la Copa Europa, pero vamos a luchar para clasificarnos a las semifinales. Estamos trabajando muy duro para jugar un mejor rugby del que venimos jugando hasta ahora.
- No seguir en la Heineken Cup debe haber sido un golpe duro, ¿ganar la Challenge Cup es un objetivo para revertir esa imagen en Europa?
- Vamos a jugar a fondo las dos competiciones porque está en el ADN del club ganar títulos.
- ¿Qué significa Patricio Albacete para el equipo?
- Pato es un increíble jugador, uno de los mejores con los que tuve la oportunidad de jugar. Es evidente la importancia que tiene en el equipo ya sea con Los Pumas o con Toulouse. Además es muy amigo mío y me hizo conocer Argentina.
Como Yoann Maestri, días atrás en una charla con Scrum, Dusautoir reconoció que no será sencillo tener argentinos en los clubes del Top 14: "Son buenos jugadores pero pienso que va a ser más difícil para ellos jugar en Francia y para Los Pumas con el Rugby Championship".
Dusautoir, un señor del rugby, que mira para adelante y da la cara incluso en las situaciones más difíciles, dentro y fuera de la cancha.