IRVING -- Casi todas las veces que ha hablado Jerry Jones sobre la plantilla de los Dallas Cowboys, aparenta ser un episodio más de control de daños.
Esa ciertamente fue la impresión cuando el dueño de la franquicia discutió su confianza en los profundos de la plantilla de los Cowboys durante una charla telefónica con los propietarios de abonos de temporada del equipo.
"Creo que estamos en buena forma en la posición de profundo", dijo Jones.
Sí, Jones está consciente de que los profundos que proyectan como titulares se combinan para cuatro inicios de NFL. Todas ellas pertenecen a Barry Church, quien impresionó lo suficiente en Valley Ranch como para recibir un acuerdo de cuatro años y 9 millones de dólares --además de 3.4 millones en incentivos-- después de sufrir una ruptura en el tendón de Aquiles a principios de la temporada pasada.
Jones también parece listo para colocar a Matt Johnson, quien se perdió toda su temporada de novato por problemas en el tendón de la corva y otras lesiones, en el Anillo de Honor.
"No sé cuándo he visto a otro jugador impresionar a nuestros entrenadores sin haber jugado en un partido como lo ha hecho Matt Johnson", externó Jones.
Los Cowboys tienen otras alternativas en la posición: el recluta de tercera ronda, J.J. Wilcox, quien jugó en la ofensiva hasta su temporada senior en Georgia Southern; el veterano de nueve campañas, Will Allen, quien no inició para los Buccaneers en las últimas dos campañas de Monte Kiffin en Tampa Bay; y el veterano de tres temporadas Danny McCray, quien fue forzado a jugar tanto como profundo la temporada pasada, que terminó por confirmar que está mejor equipad para quedarse con los equipos especiales.
"Pienso que realmente hemos añadido mucho potencial", dijo Jones. "Los entrenadores me dijeron que con el esquema, 'No debemos preocuparnos tanto por el rango'. Respondí, '¿Qué? ¿No preocuparnos por el rango?'.
"[Kiffin[ dijo, 'No, nuestro esquema les da ángulos. Consigue a alguien que sea joven. No se preocupen demasiado por la experiencia como en el pasado. Consigan a algunos jugadores con instintos y de ahí nos encargamos nosotros'".
Créanlo o no, eso de hecho merece el beneficio de la duda, dado el historial de Kiffin en Tampa Bay.
Cuando Kiffin arribó en Tampa en 1996, los Bucs tenían muy poca experiencia en la posición de profundo. Su profundo fuerte tenía seis inicios en las tres campañas de su carrera de NFL. El profundo libre había iniciado tres encuentros la temporada previa, como novato.
John Lynch, un recluta de tercera ronda en el 1993, terminó estableciéndose como uno de los profundos fuertes de élite en la historia de la NFL, jugando en nueve Pro Bowls. Los Bucs llenaron la vacante de profundo libre con un puñado de reclutas de rondas medias y agentes libres baratos durante la estadía de Lynch en Tampa Bay, finalizando en el Top-10 en las más importantes categorías defensivas todos los años, excepto en la primera temporada completa de Lynch, cuando ranquearon Nº 11 en yardas permitidas.
La historia de Kiffin exprimiendo el máximo a inversiones de nivel medio en la posición de profundo no garantiza nada, claro está. Sin embargo, sí provee evidencia legítima para aquellos dentro de Valley Ranch que insisten que no hay necesidad de caer presas del pánico sobre la situación de profundos de los Cowboys.