GRAPEVINE -- El apoyador Bruce Carter ha escuchado un nombre una y otra vez desde que los Dallas Cowboys contrataron a Monte Kiffin como coordinador defensivo.
"Todos me han bombardeado con, 'Derrick Brooks, Derrick Brooks'", dijo Carter. "Eso es algo bueno".
Brooks fue el apoyador "Will" de prototipo en el esquema Tampa 2, algo evidenciado por sus 11 apariciones de Pro Bowl durante las 13 temporadas que fue entrenado por Kiffin en los Buccaneers.
Ciertamente, es prematuro poner a Carter en esa clase, pero como fue el caso de Brooks en Tampa, Kiffin heredó a un jugador joven con rasgos físicos e instintos que lo volvieron una pieza perfecta para hacer jugadas grandes desde el puesto de apoyador débil en su sistema.
Carter podría ser el apoyador más rápido en la NFL. Registró 4.39 segundos en las 40 yardas durante el pro day de North Carolina y rebasó al receptor de Atlanta, Julio Jones, la temporada pasada.
Carter emergió como una fuerza de extremo a extremo en el rol de apoyador medio con la 3-4 de Rob Ryan la temporada pasada, antes de perderse los últimos cinco partidos por una luxación de codo.
Totalmente recuperado, Carter está ansioso por dominar el 4-3 de Kiffin en la forma que Brooks lo hizo. En cuanto escuchó que Kiffin llegaría, Carter comenzó a estudiar videos del trabajo de Brooks en Tampa Bay, cuando jugaban una defensiva dominante.
"Siempre estaba alrededor del balón", dijo Carter. "Siempre volaba por todos lados. Lograba las jugadas. Siempre estaba en la posición correcta en el momento correcto. Eso es algo que quiero hacer".
Kiffin y los Cowboys cuentan con ello.