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Jugadores a seguir en Wimbledon

BUENOS AIRES -- Se viene Wimbledon, el tercer Grand Slam de la temporada. ¿Candidatos? Los de siempre. Novak Djokovic, Roger Federer, Andy Murray y Rafael Nadal. Súmele Ferrer, Tsonga, Berdych o Del Potro. No vamos a descubrir nada. Pero, lejos de los principales focos de atención -y también un poquito más allá, por qué no-, también podría haber algo de ruido. Ésa es la idea de este espacio. No nombrar a los favoritos, mucho menos aventurar a un campeón, sino marcar a algunos jugadores que podrían dar pequeños golpes. O tal vez grandes. O quizás ninguno. Depende de ellos.

El tridente alemán: Tommy Haas, Philipp Kohlschreiber y Florian Mayer

Por historia y presente, Tommy Haas es uno de los que deben ser mirados de cerca en Wimbledon. El exN°2 del mundo, actual 13°, viene de hacer semifinales en Halle (con buenas victorias ante Ernests Gulbis y Monfils; y derrota ante Federer en tres sets) y de extender su récord positivo sobre la superficie a 50-25, con títulos en Halle en 2009 y 2012. Después de sus primeras rondas en 2011 y 2012 en el All England Club, va por la revancha y busca repetir -o mejorar- las semifinales de 2009. Su talento y el plus de agresividad que pone sobre césped, la clave.

Philipp Kohlschreiber siempre muestra su buena adaptación al césped, pese a que su mejor superficie es el polvo de ladrillo. El año pasado, sin ir más lejos, hizo cuartos de final en Wimbledon, donde además alcanzó la tercera ronda en tres ocasiones más. Es el 18° del mundo y cuenta con un récord de 40-20 sobre césped, con un título en Halle 2011 y una final, en el mismo torneo, en 2008. Sus potentes impactos son su llave.

Un poco más relegado, pero sin perder mucha pisada, está Florian Mayer. El extravagante germano tiene buenos antecedentes sobre hierba. Hizo cuartos de final en Wimbledon en 2012 y 2004, lo que deja en claro que perdura y que no es casualidad. Eso sí, necesitará un poco de azar para avanzar de rondas dado que no saldrá preclasificado. Espera que el sorteo le haga un guiño y lo ponga lejos de los grandes favoritos. Sus cambios de ritmo, son su slice especialmente, su punto fuerte.

En busca del golpe: Marin Cilic

El croata de 24 años siempre es una amenaza sobre césped, pero no termina de sacudir el cuadro de Wimbledon. Hizo octavos de final en 2012 y 2008; y dejó sabor a poco. Con un buen paso en Queen's, título el año pasado y finalista hace unos días, Cilic tiene avales de sobra y desde la organización se lo hicieron saber en la previa: lo subieron del 12° al 10° lugar entre los favoritos. Con un récord de 29-15 en césped, quiere festejar fuerte en el All England Club. Su servicio, la derecha y su volea le permiten soñar.

Los experimentados: Lleyton Hewitt y Xavier Malisse

Hewitt siempre se anota en pasto. Y hace unos días lo dejó en claro en Queen's, al alcanzar las semifinales tras vencer a Dimitrov, Querrey y Del Potro. A los 32 años y siendo 70° del mundo parece despertar su fuego interior sobre césped, donde jugó sus últimas tres semifinales: Queen's 2013, final en Newport 2012 y campeón en Halle 2010, tras derrotar a Federer. Tiene un récord de 115-34 en césped, sólo detrás de Roger, y sabe lo que es ser campeón de Wimbledon (2002). A prestar atención a sus últimas derrotas en el Grand Slam londinense: Tsonga (2012), Soderling (2011), Djokovic (2010 y 2007), Roddick (2009), Federer (2008, 2005 y 2004), Baghdatis (2006; el chipriota era 16°) y Karlovic (2003). Todos rivales de jerarquía y peligrosos en esta superficie. Su incansable lucha, su aliado.

En menor medida, mucha menor, está Xavier Malisse. El belga, de 32 años y 60° del mundo, puso sobre la mesa una vez más sus credenciales sobre las canchas verdes. Tuvo en jaque a Del Potro en Queen's y derrotó a Ferrer en s'Hertogenbosch. Ojo, no es un improvisado. Hizo semis en Wimbledon en 2002; y alcanzó los octavos de final en los últimos dos años, con cuatro victorias incluidas frente a, por entonces, top 20: Gilles Simon, Fernando Verdasco, Florian Mayer y Jurgen Melzer.

Tres que buscan explotar: Jerzy Janowicz, Grigor Dimitrov y Ernests Gulbis

Es cierto, Jerzy Janowicz ya hizo ruido en el Masters 1000 de París, pero ahora va en busca de golpear en un Grand Slam. No tiene grandes números sobre césped (2-2) y viene de caer en primera ronda de Halle ante el bosnio Mirza Basic, pero contará con el plus de ser preclasificado. Y con otra a favor: la confianza. En 2012, estando fuera del top 100, sorteó la clasificación y alcanzó la tercera ronda. Ahora es consciente de que puede más.

Grigor Dimitrov viene pisando fuerte este año. Su victoria ante Novak Djokovic habla por sí sola. No obstante, en césped aún no ha tenido buenos resultados, seguramente algo que va de la mano de su juventud. Hizo segunda ronda en los últimos dos años. Ahora está en otro momento de su carrera y sueña a lo grande. Cuenta con dos grandes soportes. Fue campeón de Wimbledon en juniors en 2008 y además, por su estilo de juego y técnica, se lo asocia con Roger Federer, campeón en la Catedral en siete ocasiones. Razones suficientes para tenerlo en cuenta.

El letón Ernests Gulbis será, seguramente como él dijo en la previa de Roland Garros, el no preclasificado más duro a enfrentar. Es 38° del mundo y no cuenta con muchas rondas ganadas sobre césped, aunque sí suma buenos triunfos en Wimbledon ante el checo Tomas Berdych y el estadounidense John Isner. En el All England, entre otros, cayó ante Rafael Nadal, Andy Murray y Baghdatis. También, sin dudas, necesitará un guiño en el sorteo. Y, además, saber controlar sus emociones dentro de la cancha. Su potencial da para mucho más. Ya lo dejó en claro en este 2013, en el que volvió a ser nombrado como una amenaza en los grandes torneos.

Excampeones en juniors: Jeremy Chardy y Andrey Kuznetsov

Al igual que Dimitrov, Jeremy Chardy sabe lo que es festejar el título en Wimbledon. Antes de su pase a profesionales levantó la copa de campeón en 2005. Es cierto que el francés aún no pudo volver a responder con eficacia en el All England Club, donde alcanzó la tercera ronda en 2010, pero en esta ocasión será preclasificado por primera vez en su carrera. Puede ser el momento para despegar.

Distinto es el caso del ruso Andrey Kuznetsov. El actual 77° del mundo fue campeón en Wimbledon para juniors en 2009, pero todavía no logró insertarse en el circuito. A los 22 años aún le cuesta. No anduvo bien en la previa del tercer Grand Slam del año, con rápidas caídas en Queen's y s'Hertogenbosch, aunque su ilusión y las ganas de comenzar a subir son sus mayores fundamentos.