Especial para ESPN.com 11y

Carlos Alberto recibió la Copa

CIUDAD DE MÉXICO -- Carlos Alberto, capitán de la Selección brasileña que se ha proclamado campeona del Mundo por tercera vez, recibió entre el clamor del público la Copa Jules Rlmet de manos del presidente de México, licenciado Gustavo Díaz Ordaz.

El capitán brasileño, tras besar la preciada copa, la ofreció a los miles de espectadores del Estadio Azteca, brazos en alto, y luego la fue pasando a sus compañeros para que la besasen.

Todos los jugadores fueron saludados y obsequiados por las autoridades que acompañaban al primer mandatario mexicano.

Mientras los brasileños daban la vuelta olímpica, los jugadores italianos, encabezados por Fachetti, también subieron al palco presidencial para saludar a las autoridades.

El clamor en el Estadio Azteca fue ensordecedor y los gritos de "¡Brasil! ¡Brasil!" resonaron en el colosal estadio.

LAS FELICITACIONES DEL PRESIDENTE
El presidente de la República de Brasil, Emilio Garrastazú Médici, felicitó al plantel de la Selección de su país tras el título mundial obtenido en México.

"En la hora en que el equipo nacional conquista definitivamente la Copa del Mundo luego de memorable campaña, en la cual enfrentó y venció a adversarios del más alto valor, deseo que todos vean en el presidente al hombre común, a un brasileño que, por sobre todas las cosas, siente un inmenso amor por Brasil y una creencia insobornable en este país y en este pueblo", expresó el mandatario en un mensaje público.

"Ver la felicidad de nuestro pueblo en el sentimiento de la más pura exaltación patriótica. Identifico en la victoria conquistada en la fraterna lucha deportiva, la prevalencia de principios de los que nos debemos armar para la propia lucha en favor del desenvolimiento nacional".

"Identifico en el suceso de nuestra Selección de fútbol la victoria de la unidad y de la convergencia de esfuerzos, la victoria de la inteligencia y de la bravura, de la confianza y de la humildad, de la constancia y de la serenidad, de la capacidad técnica, de la preparación física y de la consistencia moral".

"En este momento de victoria traigo al pueblo mi mensaje, indenficándome en todo con la alegría y la emoción de todas las calles para festejar, en nuestro incomparable Seleccionado de fútbol, la propia afirmación del valor del hombre brasileño".

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