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BUENOS AIRES-- "Ya puedo caminar, es una buena noticia", dice Juan Martín Hernández, y sonríe. El panorama, a tres días del duelo contra Sudáfrica en Mendoza por el Personal Rugby Championship, es un poco más alentador para Juani. Si bien todavía no se entrenó esta semana con normalidad, el back está mejor de la "contusión
en el soleo" y tiene esperanzas de llegar al choque del sábado. Ya hace un largo tiempo, el entrenador Santiago Phelan decidió anunciar el equipo los martes. Sin embargo, en esta oportunidad, lo dará el jueves para esperar las evolución de Hernández, y también de Manuel Carizza, Eusebio Guiñazú y Marcos Ayerza, las otras dudas Pumas por estas horas. "Me siento bien, mucho mejor que cuando salí de la cancha y en el comienzo de la semana. Hoy me siento como si fuese un golpe después de un partido, no como un golpe tan fuerte. Me sigue doliendo un poco, pero espero que estos días que pasen me ayuden y pueda estar disponible". Pero no sólo él participará de la decisión, sino también los médicos. Y ahí tiene una parada brava el ex Deportiva Francesa. "Ojalá que sí pueda estar, por las ganas que tengo. Es difícil convencer a los médicos. Siempre fui bastante propenso muscularmente a lesionarme. Además de mis grandes lesiones que tuve, siempre tuve desgarritos. Problemas que vivo con ellos. Están muy atentos a si corro de más, a las exigencias como para que no tenga una lesión más grave. Hay que tratar de manipularlos", agregó. Además, lo que pasó con Patricio Albacete en Soweto, quien sólo duró 13 minutos y se volvió a desgarrar, no ayuda mucho para la situación de Hernández. "Lo que pasó con él es muy reciente, y lamentablemente no lo tendremos por unas semanas. A mí también me pasó de apurarme, y tener lesiones peores", confesó. Dejando de lado su lesión por un momento, Hernández opinó de su cambio de puesto a último momento para el test con Sudáfrica en la apertura del Rugby Championship: "Si el entrenador quiere que juegue de full back, es porque cree que es lo mejor. Lo que dije hace un tiempo es que no tenía problema de jugar en ningún lado, lo único que no quería, que no me convenía a mi y en consecuencia al equipo, es jugar todo el tiempo de una posición y al otro fin de semana que pase a otra. Y pasó esto. Tati lo sabe y lo hablamos, y pasó y es así. Yo soy un simple soldado. Trataré de darle lo mejor al equipo". Para Hernández el 73-13 ante los Boks no fue el peor momento de su vida deportiva -reconoció que fue perder la semifinal en el Mundial 2007- pero sí ésta es la semana más difícil para trabajar. "No podés estar peor, en cuanto a resultado y como equipo. Hay mucho para mejorar. Lo que queremos es poder mirarnos a los ojos cuando termine el partido. No se pudo hacer eso el sábado en Soweto. Eso sería un gran paso para este grupo. No resultados, sino poder dejar todo y saber que el de al lado dio todo por vos. Es muy básico, pero eso sería una mejoría. ¿Cómo se hace? Es mental. El orgullo que cada uno tiene adentro sacarlo en Mendoza", admitió. Por último, Juani dejó una reflexión y su deseo para lo que viene: "Todo lo que entrenaste, lo que haces, los sueños, el medirte contra los mejores, y arrancar así fue muy malo. Pero siempre hay revancha. No sé si vamos a ganar, pero ojalá podamos revertir esta imagen. Sobre todo para nosotros, porque creo que no lo merecemos. Hicimos todo para entrenarnos y estar siempre lo mejor posible. Sería muy lindo que podamos jugar bien, hacer algo de lo que entrenamos. Y ganar sería lo mejor".
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