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MÉXICO -- La caída del Tri ante Honduras dejó herida a la Selección Mexicana, y el primer daño colateral de esta derrota fue el cese de José Manuel de la Torre, pero el peso de este fracaso aún puede ser mayor sí no se saca un resultado positivo contra Estados Unidos en Columbus, Ohio, donde los aztecas se juegan medio boleto para la Copa del Mundo. La misión luce más que difícil, ya que los estadounidenses necesitan una victoria para asegurarse su pase al Mundial de Brasil, y no han perdido ni un solo punto en su casa (suman tres victorias). Por si fuera poco, el Tri nunca ha podido obtener un punto en Columbus, siempre ha perdido por el mismo marcador, 2-0 en tres ocasiones. Pese a este negro panorama, hay luz para la selección y estas son las claves para que México consiga la que sea una histórica victoria. REVIVIR LA CONEXIÓN CHÍCHARO-ORIBE
Durante el periodo de José Manuel de la Torre fue uno de los reclamos y dudas más recurrente: ¿No pueden jugar juntos Oribe y el Chicharito? Aunque la mayoría de los especialistas, entrenadores y el público mexicano opinaban que sí, el Chepo tenía otra idea, y al final le costó el puesto. Ante Estados Unidos se necesita gol y el Tri tiene elementos de sobra para hacerlo. Es cierto, Javier no pasa por su mejor momento, casi no juega con el Manchester United, pero ha demostrado ser desde su primera convocatoria un revulsivo en el equipo y cuando ha jugado a lado del delantero de Santos no lo ha hecho mal. Oribe es inamovible, anotó el gol contra Honduras, pero necesita un socio en el área. Estos dos hombres son los que pueden llevar a México a Brasil. APELAR A LOS MÁS 'MACHOS'
En el partido del martes, no hay lugar para lo débiles, el Tri necesita darle prioridad al carácter sobre el talento y concentrarse en ganar sí o sí. No se necesita ser fino y la clase se puede quedar en casa, en Columbus se necesita garra, entender que el resultado va más allá de gustar. En resumen, hay que jugar con el cuchillo entre los dientes. OLVIDAR EL CONTEXTO
Es cierto, parece imposible. México se juega la vida ante Estados Unidos, en una cancha donde nunca ha ganado, es más ni siquiera ha podido sacar un punto y nunca ha marcado ahí. Además jugará sin mexicanos que lo arropen... Pero a pesar de todo esto, hay una luz al final del camino y el por lo menos, al primer enemigo ya se le evitó: el frío. Se prevé que mañana en Columbus se juegue a 29 grados, evidentemente sin nieve y con una posibilidad de lluvia. Esto ya es un paso, y el siguiente lo debe dar la selección en el aspecto mental: recordar que, pese a todo lo que se juegan, al final sólo se trata de un juego, y tiene la capacidad de ganar en EU sin importar el lugar del mundo donde se enfrenten. Honduras hizo historia ganando a México en el Azteca el viernes, ¿es tan difícil pensar que ahora el Tri la puede hacer ganando en Ohio? EXPLOTAR LAS BAJAS DE EE.UU.
Jürgen Klinsmann tuvo que llamar, de emergencia a cuatro jugadores para el duelo ante México; la razón, tuvo cuatro bajas claves en su equipo. Jozy Altidore, Geoff Cameron y Matt Besler no estarán ante el Tri al estar suspendidos por acumulación de tarjetas, mientas que uno de sus principales referentes, Michael Bradley, no se recuperó de unas molestias y esto lo obliga a perderse el duelo. La principal línea que México debe explotar es la defensa: Cameron y Besler fueron titulares ante Costa Rica y han sido hombres de confianza para Klinsmann en la última línea del equipo. Ahora se le dará la responsabilidad al joven Omar González, quien fue titular del equipo durante la Copa Oro, pero dista de tener experiencia. A su lado estará Clarence Goodson, quien fue convocado de último minuto, y por lo tanto no ha entrenado a la par del equipo. MANTENER PORTERÍA EN CERO
Ganar ante Estados Unidos en Columbus sería histórico, pero también sumar un punto y el no recibir gol asegura, al menos, un punto. El Tri ante EU ha sufrido en los últimos años al ser superado en aspectos físicos, como la velocidad y su talla, ya que ganar balones por arriba se ha vuelto una proeza. México debe salir a buscar ganar, pero sin volverse loco y debilitar su última línea, como le ocurrió en el penúltimo duelo contra los de Klinsmann, donde por el afán de ganar un duelo amistoso se perdió al irse con todo al frente. México está obligado a sacar puntos, no a proponer el partido, y tiene que ser inteligente para saber cuándo le conviene tener el balón y cuando estar bien parado. La gran duda es, mantener a Diego Reyes quien demostró que estar en la banca del Porto le está cobrando dividendos, o en su lugar poner al Maza Rodríguez, quien viene a la baja.
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