|
Aficionados y Fanáticos al "Rey de los Deportes": Llegó el momento de reconocer a lo mejor de la temporada en las Grandes Ligas, en una de las elecciones más complicadas de los recientes años, debido a que los tres finalistas en cada uno de los premios presentan argumentos que parecen suficientes para quedarse al final con su reconocimiento respectivo. NOVATO DEL AÑO: Esta categoría se puede tornar totalmente cubana, con las presencias de José Iglesias en la Liga Americana y José Fernández y Yasiel Puig en la Nacional, tratando de buscar lo que sería un doblete histórico, de ganar "Candelita" el reconocmiento en el joven circuito y alguno de los dos candidatos de Marlins o Dodgers respectivamente en la Nacional. La parte difícil del posible "Doblete Cubano" sin lugar a dudas la lleva José Iglesias. A pesar de que la temporada del nativo de La Habana ha sido espectacular, el popular "Candelita" lució mucho más a la defensiva, y sabemos que en muchas ocasiones ese aspecto no es tan tomado en cuenta por quienes votan. A pesar de ello, su .303 de bateo combinado entre Medias Rojas y Tigres, puede ser un argumento suficiente, pero siempre tomando en cuenta que en la primera mitad de la temporada con los patirrojos bateó para .330, cayendo después a un .259 de recta final con los felinos. El gran favorito, Wil Myers, bateó .293 con .831 de OPS y los antecedents en ese sentido son contundentes. El jardinero de los Rays es apenas el 5o. novato en la historia con 22 años de edad o menos en alcanzar marcas de .290/.800 respectivamente desde 1975, y los dos recientes en conseguirlo, Mike Trout en 2012 y Derek Jeter en 1996, se quedaron con la distinción, por lo que, aunque sigo soñando con el "Doblete Cubano", me parece que Myers va a romper con esa situación. En la Liga Nacional, la batalla entre Puig y Fernández parece acaparar la votación. Sin restarle méritos a Shelby Miller, lo conseguido por los dos cubanos parece darles más argumentos. Las 12 victorias y el 2.19 de efectividad del nativo de Santa Clara, son adornadas por el hecho de que su promedio de carreras limpias admitidas desde el 1 de junio hasta el final de la campaña fue un spectacular 1.50, no superado ni siquiera por quien terminó como número uno en ese departamento, Clayton Kershaw (1.82 ERA en ese periodo). Yasiel Puig, por su parte, revolucionó por completo a unos Dodgers que volvieron a la vida cuando el de Cienfuegos fué subido de las sucursales. Los Esquivadores jugaron pelota de .418 antes de su llegada y de .645 ya con él, marcándose la mayor diferencia en el hecho de que anotaron 3.5 carreras por juego en promedio sin Puig, pero 4.2 con él en la alineación. MANAGER DEL AÑO: John Farrell fué el campeón, Terry Francona hizo de los Indios la más grata revelación y Bob Melvin volvió a hacer un milagro en Oakland a pesar de una de las nóminas más bajas en las Grandes Ligas. Los Medias Rojas de Farrell se convirtieron en apenas el segundo equipo en ganar una Serie Mundial al año siguiente de haber terminado en ultimo lugar (Twins en 1991), argumento más que suficiente para considerarlo serio candidato. Mientras Boston mejoró en 28 victorias en relación al 2012, los Indios de Francona ganaron 24 juegos más que el año pasado. Ambos cuentan con argumentos suficientes, pero me sigo quedando con Melvin, que de conseguir el galardón, alcanzaría a Lou Piniella, Jim Leyland y Dusty Baker con 3 títulos de Manager del Año, sólamente superados por los 4 de Bobby Cox y Tony LaRussa… palabras mayores. En la Liga Nacional, me parece que Fredi González y Clint Hurdle están en clara posición de ventaja sobre Don Mattingly a quien en dos ocasiones se relacionó con el concepto "le quedó grande el equipo", la primera, al inicio de la campaña y antes de la llegada de Puig y la segunda, durante la postemporada. González tuvo a los Bravos en el primer lugar de su división de principio a fin, pero Clint Hurdle hizo el milagro de regresar a los Piratas a la postemporada y de tener una temporada ganadora en Pittsburgh por primera vez en 21 años, lo cual, representa toda una hazaña y, para mí, el argumento principal para darle el reconocimiento al capitán de ese barco. El único manager de los filibusteros en conseguir esta distinción a lo largo de la historia ha sido Jim Leyland, que lo logró tanto en 1990 como en 1992, por lo que Hurdle podría colocar su nombre en esa lista muy selecta luego de su tercera temporada al frente de la nave. A la mitad de semana vamos con los candidatos al Cy Young y el MVP…
|
