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Lo mejor del 2013 en Inglaterra

Getty Images

1) LUIS SUÁREZ, EL GOLEADOR LE GANA AL CHICO MALO


El delantero uruguayo del Liverpool es un combo: a veces se le despierta su costado canibal y le muerde una oreja a Branislav Ivanovic, y otras le hace cuatro goles al Norwich o acumula 19 goles en 12 partidos (con cinco asistencias incluídas). Por un lado, la FA lo suspende por 10 fechas y, por el otro, lo incluye en el equipo ideal y lo premian como 2º mejor jugador de la Premier (sólo detrás de Gareth Bale). En un momento determinado se emperra en dejar Anfield y meses después firma una extensión por cuatro años, convirtiéndose en el futbolista mejor pago en la historia de los Reds. Todo esto fue y es Suárez y seguro mucho más. Tómalo o déjalo. Liverpool, sin dudas, lo toma, soñando con volver a la Champions y, por qué no, conquistar su primera Premier.


2) SIR ALEX FERGUSON: EL FINAL QUE SE MERECÍA


"Gracias Manchester United (...) has sido la experiencia más fantástica de mi vida"....Y un día, después de más de 26 años en el banco de Old Trafford, Sir Alex Ferguson se retiró. La noticia en sí misma no parece ser buena para los hinchas de los Diablos Rojos quienes, después de 38 títulos, idolatraban al DT escocés igual o más como a sus jugadores estrella. Los Roy Keane, Eric Cantoná, David Beckham, Ruud van Nistelrooy y Cristiano Ronaldo pasaron, pero Fergie siempre estuvo allí y, con él, los éxitos. Ya no verlo al frente del equipo es raro, pero al menos, pudo irse como su trayectoria lo merecía: campeón. El United se coronó con cinco fechas de anticipación y, aunque a Ferguson le hubiera gustado llegar a los 100 puntos, con 89 le sacó 11 de ventaja al segundo, Man.City. Y después, todos los honores: la despedida en Old Trafford donde fue recibido con un pasillo, como a los campeones y con el triunfo ante Swansea. La FA lo eligió mejor entrenador de la temporada, está nominado al Balón de Oro y una calle de la ciudad fue rebautizada con su nombre. Además, sigue siendo un hombre influyente en el club, porque su experiencia vale y mucho. Como debe ser.


3) WIGAN, DESCENSO CON GLORIA


Fue uno de los grandes golpes del año, aunque ya parezca tan lejano. Este título es especial porque Los Latics lucharon toda la temporada para escaparle a la zona baja, mientras silenciosamente avanzaban en la FA Cup, aunque es cierto, ante rivales de inferior categoría, excepto por Everton en cuartos. Llegó a la final en Wembley, donde nadie lo esperaba y con Manchester City como oponente, no existía duda de quién sería el campeón. Y durante 90 minutos se sostuvo eso, pese al 0-0 que obligaba el tiempo extra, pero un cabezazo de Ben Watson sobre la hora dejó a todo boquiabiertos. Sí, Wigan era campeón. Wigan era campeón de un torneo importante por primera vez en su historia y ante, hasta allí, el rey vigente de la Premier League.
Sólo ocho días después, los Latics descendieron a la Championship y luego perdieron al gran guía de esta hazaña: Roberto Martínez. Pero ya nada borraría su nombre grabado en la historia grande del fútbol inglés.


4) SWANSEA, COMO CISNE EN EL AGUA


Apenas en su segunda temporada en la Premier League -luego de una gran campaña debut-, el equipo de Michael Laudrup consiguió un título. No cualquier título, el primero grande de su historia y por primera vez para un equipo galés. Si bien Bradford no fue obstáculo en la final (Swansea ganó 5-0), para llegar hasta allí tuvo que dejar en el camino a dos gigantes: Liverpool en la tercera ronda, por 3-1 en el mismísmo Anfield. Y luego a Chelsea, en semifinales que implican una serie de dos partidos. Y le ganó 2-0 en Stamford Bridge y resistió el 0-0 en el Liberty Stadium. Levantar la Copa de la Liga no sólo le dio gloria, también un pasaje a la Europa League (donde ya está en 16vos de final) y, a diferencia del Wigan, en la Premier finalizó en noveno lugar, con Michu como goleador con 18 tantos.


5) EUROPA MÍA


La decepción de quedar eliminado de la Champions League en fase de grupos sólo podría ser redimida con el título en la Europa League. Sí, para un equipo como Chelsea parece un premio consuelo, pero no en el contexto en el que estaban los Blues: ya sin Di Matteo, quien fue despedido tras una mala racha que los dejó sin poder defender la corona europea y lejos en la Premier, incluso haciendo dudar que pudiera lograr un lugar en el Top Four. Sin embargo, pese a la hostilidad y exceptisismo de los hinchas hacia Rafa Benítez, el DT español revitalizó a Fernando Torres y confió en jugadores como David Luiz, Juan Mata y Frank Lampard para llegar hasta la final, en la que derrotaron 2-1 al Benfica, para convertirse en el primer equipo campeón simultáneamente de Europa League y de la Champions, ya que aún no se había definido esta última. Además, este triunfo le dio el envión que necesitaba para finalizar la Premier dentro de los cuatro primeros. Lo que se dice, salvó la temporada.