BUENOS AIRES -- Floyd Mayweather fue la figura del 2013. Más allá de su victoria frente a Robert Guerrero, realizó un entrenamiento en público en el MGM, para vencer ampliamente por puntos a Saúl "Canelo" Álvarez. Fue también, el gran show del año, al menos en lo que respecta a los números: más de 20 millones de dólares de recaudación en la arena, más record de audiencia para Showtime, y una recaudación general estimada en los 160 millones. También se batió el record de lo ridículo, cuando se supo que para la jurado C.J. Ross, la pelea fue empate en 114. Posteriormente -y por suerte para el boxeo- la señora decidió renunciar...
Mientras en la división de los pesados los hermanos Wladimir y Vitali Klitschko siguen ganando sin apremios ante rivales de poca jerarquía -aunque el mayor de los hermanos ucranianos ya haya sido nombrado campeón "emérito" por el CMB, dado que centra su actividad en su candidatura a la presidencia de su país-, la gran acción se ha centralizado en otras categorías tradicionales a través de sus principales protagonistas. Así, el mexicano Juan Manuel Márquez sigue dando trabajo, más allá de una derrota -discutida- ante Timothy Bradley. Y, por su parte, Manny Pacquiao –noqueado por Márquez el año pasado- volvió a la acción, venciendo a Brandon Ríos en Macao, la nueva Tierra Dorada en donde Bob Arum ya ha sentado sus reales. Ríos venía de protagonizar dos grandes batallas frente a Mike Alvarado -una en diciembre en favor de Ríos y otra en marzo para "Mile High", quien se alzó con la corona welter junior OMB-, pero nada pudo hacer frente al "Pacman".
Ya se empieza, pues, a discutir si se viene una nueva Pacquiao-Márquez, o una Pacquiao-Bradley, lo que no deja de ser atractivo para el negocio.
De la misma manera, que mientras el año no cerró demasiado bien para el argentino Sergio "Maravilla" Martínez -hizo una sola pelea, que ganó con polémica ante Martin Murray en Buenos Aires- quien sigue soportando sus lesiones, la expectativa es buena para 2014, cuando ya se habla en forma casi concreta de Martínez-Cotto en Nueva York para el 7 de junio. Mientras tanto, en la categoría mediano crece Gennady Golovkin, la nueva figurita de HBO, quien tras despachar a Curtis Stevens en el Theatre del Madison, lanzó la frase esperada "Ahora lo quiero a Maravilla". El actual campeón mediano de la AMB quiere que el próximo sea su año...
Entre los cinco grandes del año, no olvidar y tener bien presente a Andre Ward, el campeón mundial de los súper medianos, en una división en la que se anotan Carl Froch, Mikkel Kessler o Robert Stieglitz.
Si Floyd, Manny, Juanma, Maravilla y Ward pueden ser considerados los cinco mejores, habría que ir desglosando por categorías en busca de otros protagonistas del año.
Bernard Hopkins, tras vencer al alemán Karo Murat, reteniendo así su corona FIB, y con 48 años y 9 meses, se convirtió en el boxeador más viejo en retener una corona mundial. Y lo sigue pidiendo a Floyd (¿En qué peso? Porque Bernard es medio pesado y Floyd welter...).
No olvidar al ruso Sergei Kovalev y al kazajo Beibut Shumenov, quien ya suena como futuro rival de Hopkins para abril, como tampoco al potente haitiano nacionalizado canadiense Adonis Stevenson.
Entre welters y welter juniors la cosa anduvo muy movida y atractiva. La gran victoria de Marcos Maidana sobre Adrien Broner, puede muy bien anotarse como una de las más grandes sorpresas del año, que llevó al argentino a capturar la corona regular de la división en la AMB. No olvidar a quienes se alistan esperando su momento, desde el campeón interino -Keith Thurman, hombre peligroso y pegador si los hay- hasta el siempre vigente Paulie Malignaggi que se recuperó de su caída ante el propio Broner al derrotar a Zab Judah, pasando por Kell Brooks. Quien sí parece haber perdido gran terrero fue Devon Alexander, más aún luego de ser destronado de su título mundial welter FIB a manos de un joven pero de escasa trayectoria hasta ese momento como el estadounidense Shawn Porter.
No se puede mencionar a los welters sin meterse con los welter juniors. Recordar que Maidana fue titular interino y regular de esa división por la AMB, y luego subió de categoría. Y, de la misma manera, se afirma que Danny García, campeón CMB welter junior, subiría de división. A propósito, la victoria de Danny sobre el argentino Lucas Matthysse también debe ser considerada una sorpresa, al menos, por la proporción en que el muchacho de Filadelfia estaba abajo en las apuestas. Sin embargo, ganó con precisión e inteligencia. Mientras Lucas -que venía entonado con una gran nocaut sobre el estadounidense Lamont Peterson-, deberá comenzar a barajar las cartas, también se anota en la lista al inglés Amir Khan, sin dejar de tener un ojo puesto en Floyd (todos quieren pelear con Floyd...). Atención, tener muy en cuenta al ruso Ruslan Provodnikov.
En el importante lote de las divisiones de menor tonelaje, mencionemos al mexicano Miguel Vásquez (ligero). A su vez, el estadounidense Miguel Ángel "Mikey" García: primero campeón pluma OMB que tras coronarse sobre Orlando Salido, que se anotó una gran victoria sobre Juan Manuel López cuando cedió su corona en la báscula.
Luego subió de división y terminó categóricamente con el reinado del puertorriqueño Román "Rocky" Martínez como monarca ligero junior OMB, cetro que ya el 25 de enero deberá exponer frente al mexicano Juan Carlos Burgos.
Tener muy en cuenta a Johnny González, quien venció en forma espectacular a su compatriota, el también mexicano Abner Mares, por el cetro pluma CMB, una de las grandes sorpresas del año. Fue, además, el Nocaut del Año para el CMB.
Otro mexicano como Orlando Salido -México, en total terminó el 2013 con 8 campeones mundiales, de los cuales solo uno, el minimosca Moisés Fuentes, OMB, es Interino-, recuperó su campeonato mundial pluma -justamente dejado vacante por "Mikey"- al noquear al puertorriqueño Orlando Cruz, demostrando su vigencia.
Si el cubano Guillermo Rigondeaux logró una de las más impactantes victorias sobre el filipino Nonito Donaire, tengamos en cuenta para el futuro de la división pluma junior al mexicano Leo Santa Cruz. Es un tremendo pegador que tras haber reinado como monarca gallo y consagrarse en la división superior al dar cuenta de su compatriota Víctor Terrazas, cuando se midió con un boxeador fino y de contragolpe como el puertorriqueño César Seda, ganó, si, pero quedó en claro que hay mucho por aprender.
En una categoría tan cercana como la pluma, dos importantes apariciones tuvo el año que se despide. El ruso Evgeny Gradovich, con un ritmo e intensidad llamativa y más habitual entre los mexicanos -no por nada se le dice el "ruso mexicano"-, se hizo primero al destronar del título pluma FIB al australiano Billy Dib, y tras una defensa, noquearlo en la revancha. Y silenciosamente, por el lado de la AMB, el sudafricano Simpiwe Vetyeka acabó con el indonesio Chris John noqueándolo en seis capítulos, no sólo imposibilitándole realizar la decimonovena defensa exitosa de su súper campeonato mundial pluma AMB, sino que tal resultado significó luego el retiro de un monarca que reinaba desde hacía diez años. Jesús Cuellar, de Argentina, porta el titulo Interino de la división.
En estas categorías a su vez, Japón, sin la resonancia de las grandes carteleras mundiales, ejerce importante preponderancia entre las 130 y 112 libras: además de junto con Estados Unidos ser el país con mayor cantidad de campeones mundiales en la actualidad, con 9.
Se desatacan Takashi Uchiyama -junior ligero AMB, que expone el 31 de diciembre ante su compatriota Daiki Kaneko-, Takashi Miura -junior ligero CMB, que también pondrá en juego el cetro el 31 de diciembre ante el mexicano Dante Jardón-, Shinsuke Yamanaka -monarca gallo CMB-, Akira Yaegashi -mosca CMB-, entre los principales.
Pero si de japoneses, uno de los hechos más salientes del año llegó con la consagración como campeón mundial gallo OMB de Tomoki Kameda, en un hecho inédito en el boxeo mundial, junto con sus hermanos Koki -gallo AMB- y Daiki -supermosca FIB-: tres hermanos campeones mundiales en forma simultánea. Sin embargo, meses más tarde, Koki renunció a su reinado para descender a supermosca.
Las categorías más pequeñas, generalmente opacadas por las grandes o las tradicionales, también dejaron mucho de qué hablar a lo largo del año.
Una de sus principales figuras sin dudas fue el mexicano Juan Francisco Estrada, quien en abril sorprendió a muchos al destronar en decisión dividida al hawaiano Brian Viloria de sus títulos mosca AMB y OMB en Macao, y tras defenderlos en julio en el mismo escenario sobre el filipino Milan Melindo, ya se habla de una revancha contra Viloria. Justamente Estrada venía de caer en noviembre de 2012 en su primera oportunidad mundialista frente a uno de los más temidos de estos pesos.
Se trata del nicaragüense Román "Chocolatito" González, actual súper campeón mundial minimosca AMB. Si bien sus tres peleas del año no han sido titulares, ya ha dicho que su objetivo es subir a mosca para desafiar al monarca regular AMB, el argentino Juan Carlos Reveco.
Sería una pelea grande, organizada en Japón por Teiken, que le significaría la posibilidad al "Chocolatito" conquistar su tercer campeonato en igual cantidad de divisiones. Y también dentro de los pesos chicos, el argentino Omar Narváez dejó en claro su vigencia al superar al mexicano Felipe Orucuta en Buenos Aires y tras dos defensas más de su título supermosca OMB -noqueó al japonés Hiroyuki Hisataka y al mexicano David Carmona-, lleva ya 28 combates mundialista (con marca 26-1-1 en peleas titulares).
Fuera de lo que son los campeones mundiales, vale la pena también mencionar una política de captación de talentos que Top Rank venía desarrollando desde hace unos años, pero que se consolidó en 2013 con la firma de recientes estrellas olímpicas.
El chino Zou Shiming -doble medallista de oro olímpico y tricampeón mundial amateur- lleva la bandera especialmente por ser la figura necesaria para abrir la "nueva Meca" boxística de Bob Aurm, como es Macao.
Y esto tiene que ver no solamente por el mercado chino, sino por las escasas exenciones impositivas que debe tributar. Pero junto a él, se destacan otros medallistas olímpicos de similar -y hasta incluso superior- nivel como el ucraniano Vasyl Lomachenko -oro olímpico y quien tras debutar con Top Rank, ya se habla que iría por el título pluma OMB o por el supergallo-, el japonés Ryota Murata -oro olímpico-, el ruso Egor Mekhhontcev -oro olímpico-, y el brasileño Esquiva Falcäo -plata olímpico-, que se suman a los anteriormente firmados José Ramírez, de Estados Unidos, Félix Verdejo, de Puerto Rico, y Oscar Valdez, de México, con quienes aspira tener la llamada siguiente generación de campeones.
Oscar tuvo problemas con sus adicciones y no estuvo presente en el gran acontecimiento de su empresa, Mayweather-Canelo. Y, aunque hubo un breve acercamiento a Bob Arum en forma epistolar, se dice que no hay arreglo: Bob siegue siendo, por cierto, un gran piloto de tormentas.
HBO y Showtime no se pueden quejar de las peleas que pusieron al aire y los espectadores menos, teniendo en cuenta que esto permite avizorar muy buenos choques para el año que ya comienza. Como en otras épocas, el "todos contra todos" es, seguramente, la clave de la atracción. Es que, más allá de los títulos, el aficionado quiere "peleas reales", en donde no sea fácil pronosticar un ganador.
A brindar por los nuevos campeones, por aquellos que se mantienen sea como sea, por las peleas que se vieron y a brindar por aquellos que, peleando aun en preliminares, sueñan un día con que la voz de un Michael Buffer o un Jimmy Lennon, digan: "Y en este rincón..."
Brindemos por los que vienen, que es brindar por la esperanza.