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Gavilán y Chocolate, dos destinos

Un personaje: Kid Chocolate fue amigo de Gardel Servicios de ESPN.com

BUENOS AIRES -- Aunque en muchos registros oficiales, incluyendo el del Boxing Hall of Fame, Eligio Sardiñas Montalvo, conocido por Kid Chocolate, nació un 6 de enero de 1907, en realidad la fue otra. Según los historiadores Elio Menéndez y Víctor Joaquín Ortega, "El Kid vio la luz primera el 28 de octubre de 1910, en la populosa barriada habanera del Cerro, en Santa Catalina número 6". Y luego acotan que, en realidad, el Kid se anotó en esa fecha para poder cambiar su edad en los registros oficiales para cuando viajó por primera vez a Nueva York, en donde para combatir a 8 asaltos había que tener un mínimo de 21 años... Cumplido el requisito de la puntualidad histórica, el 6 de enero da crédito y excusa para recordarlo...

De la misma manera, pero en esto caso sin leyenda alguna, un 6 de enero pero de 1026, nació en Berrocal, Camagüey, Gerardo González, Kid Gavilán, que fuera campeón mundial de peso welter y que está considerado, a su vez, uno de los grandes peleadores de su país.

Kid Chocolate fue el primer cubano campeón mundial. Aún hoy está considerado entre los diez mejores boxeadores de la categoría pluma de la historia, puesto que fue un prodigio de velocidad, destreza y elegancia. Su campaña en los Estados Unidos fue brillante. Estamos hablando de los años 30: Chocolate no pudo resistir las tentaciones de la Gran Manzana, sumados a su éxito y simpatía profesionales, por lo que se convirtió en una especie de playboy de la época. "El Negrito del cerro" era, en el ring, una cosa muy seria. Hizo 100 peleas como amateur sin conocer la derrota. En Nueva York triunfó en el Madison, pero fue en Filadelfia en donde logró su corona mundial, la de los ligeros junior, un 15 de julio de 1931 ante Benny Bass, por nocaut en 7 vueltas. Luego, el 13 de octubre de 1932, en Nueva York, se alzó con la corona de los plumas, al vencer a Lew Feldman, nocaut técnico en el 12do asalto.

Para esos tiempos, ya Kid Chocolate era ya una celebridad. Aun perdiendo, había realizado una pelea extraordinaria frente al inglés Jack Kid Berg, ante 40 mil personas en el Polo Grounds. Esa noche, dando una gran ventaja de kilaje --unos 5 kilos--, Chocolate resignó su condición de invicto, pero dando una tremenda batalla. Tanto, que para muchos había ventajas para el cubano. En la revancha, realizada en 1932, Chocolate tampoco pudo con Berg.

Fue rival de boxeadores de la talla de Fidel La Barba, Battling Batalino, Al Singer o Tony Canzonieri, quien lo noqueó en 1933, cuando ya su esplendor se estaba apagando. Muchas veces combatió otorgando grandes ventajas de peso. Y, por cierto, también fue minado por enfermedades venéreas, comunes en su época. Efectuó un total de 146 combates, de los cuales ganó 131, perdió 9 y empató 6. Peleó entre 1928 y 1938.

Fue amigo de Carlos Gardel, a quien conoció en París. El cantante argentino le dedicó un tango, "Rosas de Otoño". Y, cuando Gardel luego viajó a Nueva York, Kid Chocolate le dijo: "Ahora el invitado eres tú". Conocía todos los lugares del Barrio Latino. Le encantaba el buen champán y las mujeres rubias. Y no se privaba de nada... Una de las anécdotas que lo pintan de cuerpo entero, dicen que un ladrón le robó 33 trajes de su departamento de Nueva York. Desesperado, telefoneó a su sastre: "Es muy urgente, solo me dejaron 20 trajes...", cuentan que dijo.

Kid Gavilán se hizo profesional a los 16 años, en 1943. Durante tres años combatió en su país, Puerto Rico y Cuba. Y luego, como no podía ser de otra manera, también buscó el éxito en la Meca del Boxeo de esos tiempos, Nueva York, en donde hizo su primera pelea como profesional en 1946. Fue derrotado por Ike Williams y el gran Ray Robinson, y venció a Tommy Bell. En 1949 intentó el campeonato mundial frente a Ray Robinson, quien volvió a vencerlo por puntos, aun cuando fueron muchos los que pensaron que la victoria debió haber sido para el cubano.

Obtuvo la corona mundial de peso welter en 1951, tras vencer a Johnny Bratton, por puntos. Perdió la corona en 1954, por puntos, con Johnny Saxton. Para ese entonces había intentado, sin éxito, el título de los medianos ante Bobo Olson, quien lo derrotó por puntos.

Fue una figura popular y querida en Buenos Aires, adonde arribó en 1952. El 16 de agosto de ese año, con una cinta negra en su pantalón, le ganó sin grandes esfuerzos a Mario Díaz, un peleador astuto y lleno de mañas. Luego enfrentó a un temible pegador, Rafael Merentino, quien salió a imponer la dinamita de sus golpes: Gavilán, tras recibir un impacto muy duro, salió a definir lo antes posible y lo derrotó en el noveno. Años más tarde, Merentino confesó que de ese tremendo castigo sufrió una lesión ocular de la que nunca se repuso. Gavilán también enfrentó a otro tremendo noqueador como Eduardo Lausse, pero éste optó por una pelea más "segura" y terminó perdiendo por puntos. El cubano, para entonces, ya era amigo de Juan Domingo Perón. El General era un amante del deporte y del boxeo en especial.

El cubano regresó una vez más a la Argentina, cuando ya no era campeón mundial. La gente lo ovacionaba cuando exhibía su "Bolo punch", un golpe de derecha que, se decía, había aprendido de su trabajo en el campo, con las cañas de azúcar (de hecho, muchos olvidaban que el inventor había sido Ceferino García). Anduvo por Montevideo, donde noqueó a Juan Burgues y cayó por puntos frente a Dogomar Martínez. Y, en el Luna Park, venció a Cirilo Gil y perdió con Eduardo Lausse. Frecuentaba la noche porteña y, como Kid Chocolate, tampoco se privaba de placer alguno. Por fin, volvió nuevamente a los Estados Unidos: su amigo, el General Perón, estaba cerca de la caída.

Kid Gavilán, que fuera conducido por Blinkie Palermo, conocido mafioso ligado al boxeo, totalizó 143 peleas, de las cuales se impuso en 107, ganando 28 por nocaut. Perdió 30 y empató 6. Se dice que, cuando perdió el campeonato mundial, ante Johnny saxton, fue una pelea arreglada por una cuestión de apuestas. Nunca perdió por nocaut. Combatió entre 1943 y 1958.

Kid Gavilán murió el 13 de febrero de 2003, en Miami, acosado por el Mal de Parkinson, el de Alzheimer y la más oscura de las dolencias: la soledad. Fue olvidado por la mayoría, inclusive por sus compatriotas, ya que optó por quedarse en los Estados Unidos a decidir su destino.

Kie Chocolate, que llegó a decir alguna vez "El Boxeo soy yo", murió en la pobreza un 8 de agosto de 1988. El Kid, a quienes sus amigos llamaban Yiyi, se fue alzando sus puños. En su casa nunca faltó el ron, ni la visita de sus amigos, ni el tabaco, porque como decía, "Sigo viviendo a mi manera, porque la vida es muy corta". Tenía 77 años. Una multitud se congregó a despedir sus restos y entre las ofrendas florales, no faltó una enviada por el Comandante Fidel Castro.

Vivieron ambos momentos de esplendor y de gloria como pocos, brillaron y luego, como suele ocurrir en la trágica parábola del boxeo, debieron asumir su decadencia. Uno, Kid Gavilán, murió lejos de su tierra. El otro, Kid Chocolate –para muchos, el más grande boxeador profesional de la historia de Cuba- entre los suyos. Dos historias. Dos campeones. Dos destinos.