Salvador Rodríguez 10y

Le gusta el papel de villano

LAS VEGAS -- Finalmente Timothy Bradley guardó las palabras, pero esa intención de convertirse este fin de semana en el 'Villano Favorito' ante Manny Pacquiao, nadie se la quita.

A diferencia de los días anteriores en que aseguraba golpearía tan duro a Pacquiao como pocos lo han hecho, esta vez el estadounidense se mostró cauto pero confiado en la conferencia de prensa, se relajó y aseguró que lo dicho ahí está, ahora falta hablar en el ring.

Bradley, quien nuevamente no es favorito para ganar el duelo en Las Vegas, se dijo listo para despejar las dudas, demostrar que realmente merece estar entre los mejores libra por libra y que lo mismo puede ser un boxeador tan fino como veloz como un agresivo con instinto asesino en el cuadrilátero.

"Esta es la noche que esperaba, vengo de dos peleas distintas, primero fui a pelearle de tú a tú con (Ruslan) Provodnikov y luego pude boxear a (Juan Manuel) Márquez, esta vez haré lo necesario, y sé que lo tengo, para poder ganar claramente a Pacquiao", advirtió el estadounidense.

Sobre Bradley camina al lado una sombra de dudas que esta vez quiere despejar y quizá por ello se ha soltado un poco más a hablar. Ha asegurado que pega más duro, que esta vez podría incluso detener a Pacquiao antes del límite y por donde se le vea, transpira confianza.

Sin duda alguna, no es algo que le incomode.

"Esta vez será diferente por dos cosas, porque vengo sin una lesión en mi cuerpo, y porque he mejorado mucho", señaló. "No siento que esté muy confiado, simplemente he hecho mi parte, cuando eso pasa, no hay nada que me haga perder", agregó.

Sin embargo, Bradley sabe que no es el favorito, que la gente viene a ver de nuevo a Pacquiao y que ello, en algún momento, lo obligará a jugarse el todo por el todo en el ring para tratar de ganar algunas fans, y convencer de que puede ser ese 'Villano Favorito' que él espera.

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