BRISTOL -- Vamos a construir a través del draft.
¿Alguna vez han escuchado una frase más repetida sobre la construcción de un equipo de NFL? Es la meta pública de todo propietario y gerente general, aún aquellos cuyos equipos participan rutinariamente en la agencia libre de veteranos. Los jugadores más jóvenes son más baratos y sanos, y pueden ser atados a su equipo original por cuatro años, al menos.
Aquí hay una mejor pregunta: ¿Qué tanto se han apegado realmente los equipos a esa práctica? La tabla ofrece una, dicho sea de paso imperfecta, manera de medir ese compromiso.
El número asociado con cada equipo es el total del reclutas de draft originales que quedan en plantilla hasta finales de la semana pasada, de acuerdo a ESPN Stats & Information. Verán que la mayoría de los equipos están agrupados en los 20s, y como a menudo es el caso, las revelaciones que más iluminan están en las orillas.
Los Green Bay Packers lideran a la NFL con 33 jugadores de su actual plantilla reclutados por ellos mismos, más del doble que los Chicago Bears (15) y casi el doble de los Jacksonville Jaguars (17) y Tampa Bay Buccaneers (17).
Hay bastantes circunstancias mitigantes dentro de esas cifras; variaciones en el total de selecciones y la continuidad de las directivas son dos importantes. Pero al menos, se puede decir que los equipos en la parte baja de la tabla deben navegar a través de medios más inciertos para armar sus planteles.
Así que al tiempo que marchamos son descanso hacia el draft del 2014 (el 8 de mayo está apenas a la vuelta de la esquina), vale la pena observar la disparidad entre los equipos de la parte alta y de la parte baja, y cuán significativo es esto. Usaremos a los Packers y Bears, quienes han estado peleando por la supremacía de la NFC Norte en los últimos cuatro años, como guía.
Ningún equipo ha sido más disciplinado que los Packers para mantener y multiplicar su número de selecciones de draft, mientras que los Bears han estado entre los más agresivos de la liga en canjes y en la agencia libre. El punto es que los Packers han realizado 37 selecciones a lo largo de los últimos cuatro años, y los Bears han hecho 23.
¿Por qué tanta disparidad a lo largo de un periodo relativamente tan corto? Los dos factores más grandes son una serie de canjes de los Bears, y la exitosa manipulación de los Packers del sistema de selecciones compensatorias de la NFL.
Los Bears canjearon su primera selección del 2010 a los Denver Broncos como pago final por el mariscal de campo Jay Cutler. Su selección de segunda ronda ese año fue a los Atlanta Falcons por el ala defensiva Gaines Adams. Sus selecciones de tercera vuelta del 2012 y 2013 fueron para los Miami Dolphins por el receptor abierto Brandon Marshall, e invirtieron una selección de cuarta ronda para ascender en el orden en el 2011 y seleccionar al tackle defensivo Stephen Paea en la segunda ronda.
Mientras tanto, el uso continuo de los Bears de la agencia libre de veteranos --los fichajes del tackle izquierdo Jermon Bushrod, ala cerrada Martellus Bennett y corredor Michael Bush, entre ellos-- los dejaron sin una sola selección compensatoria entre el 2010 y 2013. Los Packers, quienes rara vez acuden a la agencia libre, acumularon siete selecciones adicionales bajo el sistema, en el mismo lapso.
Los Packers han ganado los últimos tres títulos de la NFC Norte, mientras que los Bears se han quedado fuera de los playoffs, pero es demasiado conveniente conectar esos resultados solamente a la filosofía de construcción de equipos. La diferencia entre los dos clubes --un total de 1.5 partidos en las dos últimas temporadas-- está más precisamente vinculada a la diferencia de juego entre Aaron Rodgers y Cutler, más que cualquier otro factor unitario.
Aún así, el éxito limitado de draft de los Bears ayudó a jalar el gatillo en una transición de gerencia general desde Jerry Angelo a Phil Emery hace dos años. El esfuerzo de Emery de solidificar al equipo en poco tiempo ha trabajado en contra de cualquier objetivo de acumular selecciones de draft. Lo mismo se puede decir de los Jaguars, quienes están entrando al segundo año de mandato del gerente general David Caldwell, y los Buccaneers, cuyo nuevo liderazgo está conformado por el gerente general Jason Licht y el entrenador en jefe Lovie Smith, quienes han dado una cara nueva al plantel con más de una docena de agentes libres en la primavera.
Por el otro lado, los seis equipos con más selecciones de draft originales en la plantilla cuentan con continuidad en sus directivas. Ted Thompson ha estado con los Packers desde el 2005. Los Falcons contrataron a Thomas Dimitroff en el 2008, El gerente general de San Francisco 49ers, Trent Baalke, ha laborado con la franquicia desde el 2005, y Ozzie Newsome ha estado en la directiva de los Baltimore Ravens/Cleveland Browns desde 1991. El propietario de los Cincinnati Bengals, Mike Brown, ha trabajado con el entrenador en jefe Marvin Lewis en decisiones de draft desde el 2003, y los New England Patriots encargaron por primera vez las operaciones de su equipo a Bill Belichick en el 2000.
¿Qué llegó primero? ¿Se han mantenido esos ejecutivos y entrenadores en jefe porque se comprometieron y fueron exitosos al ejecutar el draft? ¿O los que siguen a cargo simplemente son más proclives a retener a los jugadores que reclutan originalmente?
En todo caso, este análisis habla sobre el costo del recambio en las gerencias. La orden de darle la vuelta rápidamente a una franquicia se antepone a la meta a largo plazo de cualquiera. Construir a través del draft siempre será preferible, pero se toman años para igualar los logros de los mejores en la liga.