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Cinco claves de Chris Arreola

Chris Arreola tiene 33 años de edad y podría llegar a estar frente a su última oportunidad para hacer a su sueño realidad y convertirse en el primer boxeador México-estadounidense en ganar una parte del título del peso pesado.

El pugilista oriundo de Los Ángeles cuenta con la oportunidad de lograrlo y redimirse este sábado cuando se enfrente a Bermane Stiverne por segunda vez en una contienda que esta vez será por el título vacante en el Galen Center del predio de la Universidad del Sur de California (ESPN Deportes, 8 p.m. ET).

Arreola (36-3, 31 KO) fue derribado en el tercer asalto y terminó perdiendo por decisión unánime contra Stiverne (23-1-1, 20 KO) en Abril del 2013. Sin embargo, esta vez Arreola jura que está en condiciones y concentrado para aprovechar su segunda oportunidad.

A continuación, presentamos las cinco claves para que ¨La Pesadilla¨ considere en su revancha contra Stiverne:

MUÉVETE, NO TE QUEDES PARADO

La mejor defensa de Arreola en demasiadas ocasiones ha sido su pera tan dura como una piedra. El hecho de que él se haya recuperado de un derechazo devastador que lo dejó en la lona contra Stiverne para luego pelear por nueve rounds más con una nariz rota es un testimonio de su dureza. Sin embargo, contar con algo de movilidad para complementar a esa manera desafiante de pelear ayudaría mucho. Arreola dice que él está en la mejor condición física de su carrera, así que él debe aprovechar a su mayor resistencia y agilidad para mover su cabeza y ser más elusivo, algo que podría jugarle a su favor.

MANTÉN LA CALMA Y SIGUE GOLPEANDO

No es ningún secreto que Arreola es un boxeador que se deja guiar por sus emociones y pelea con el corazón en sus guantes. Cualquiera que recuerde su llanto desconsolado y apasionado tras perder su pelea por el título contra Vitali Klitschko en el 2009 puede corroborarlo. Eso sí, pelear con tanta emoción puede llegar a ser peligroso si te lleva a cometer errores. Stiverne demostró en la primer encuentro entre ambos que él cuenta con el poder necesario para convertir a cualquier error en un verdadero problema para Arreola.

ELIGE TUS BATALLAS

No es ningún secreto que la mejor versión de Arreola sale a la luz cuando él es agresivo y ataca con sus combinaciones de golpes para hacerle lugar a su poderoso derechazo. Él está mucho más cómodo tomando la iniciativa y dictando la acción. Sin embargo, Arreola también contará con oportunidades clave para contraatacar sí es que logra ser paciente. Stiverne cuenta con el habito de bajar a su mano izquierda tras cada jab, especialmente después de entrar en ritmo, así que un contragolpe bien medido de Arreola podría llegar a ser el tipo de piña que cambia el dominio de la pelea en cualquier momento.

RESPÁLDATE EN TU EXPERIENCIA

La nariz rota que Arreola sufrió en la primera pelea contra Stiverne tuvo el impacto suficiente como para afectar el resultado, así que sería justo decir que no hay mucho que separe a estos dos boxeadores en los papeles antes de esta revancha. Ellos cuentan con un peso y una altura similar, comparten varias de las mismas fortalezas y debilidades, y ambos de ellos recurren a distintas variaciones del mismo estilo de pelea. La única gran diferencia entre ellos es la experiencia. Stiverne había peleado por más de ocho asaltos apenas una vez antes de su primer choque. Mientras tanto, Arreola ha peleado hasta el final contra rivales de mucho mayor calibre y debería poder recordar las lecciones que aprendió de esas contiendas.

CARPE DIEM

Arreola ha tenido varias oportunidades para hacer su sueño realidad. Además de aquella derrota contra Vitali Klitschko, él también perdió la pelea de eliminación por el título contra Tomasz Adamek en el 2010 y otra más contra Stiverne el año pasado. En la mayoría de los casos, una falta de condición física y dedicación a su labor fueron los aspectos culpables fuera del ring para que Arreola no se de a sí mismo las mejores posibilidades para triunfar. Esta vez, él ya no tiene más excusas. No hay un mañana. Él está en buena condición física, contará con el apoyo del público local y necesita dejarlo todo en el ring para saber, de una vez por todas, qué tan bueno puede ser.