Una vez más, la fecha límite para cambios en la NFL pasó sin mucho ruido, mucho menos con algo noticioso.
Los New England Patriots agarraron al linebacker Jonathan Casillas de los Tampa Bay Buccaneers en un cambio por turnos menores en el sorteo el martes, la segunda adquisición de un linebacker por los Patriors en una semana. Los Bucs entonces movieron al safety Mark Barron, una selección de primera ronda en el 2012, por un No. 4 y un No.6. Quizás la movida más importante se dio hace poco menos de dos semanas cuando los Seattle Seahawks dejaron al ala abierta Percy Harvin irse a los New York Jetrs a cambio de un turno de sexta ronda.
En general, la temporada de cambios del 2014 fue una de las más débiles en años. Solo se ejecutaron 50 cambios y en los cuales solo 25 involucraron a jugadores. El resto fueron cambios de turnos en el sorteo.
Y aquí el resumen más interesante: Ningún equipo que cambió jugadores recibió un turno más alto que la cuarta ronda. Los Buffalo Bills entregaron un turno de cuarta ronda a los Philadelphia Eagles a cambio del running back Bryce Brown. Los Bucs enviaron al ala cerrada Tim Wright y un turno de cuarta ronda a los Patriots por el guard ofensivo Logan Mankings. Los Bills recibieron un turno de cuarta ronda de los San Francisco 49ers a cambio del ala abierta Stevie Johnson.
Creo que lo que ehemos visto de la temporada de cambios del 2014 será la pauta para el futuro. Los equipos le dan tanto valor a sus turnos en el sorte que no están propensos a sacrificar turnos altos a cambio de veteranos titulares. Miren a los Seahawks. Le dueron un No.1, No. 3 y No. 7 a los Minnesota Vikings por Harvin solo para moverlo en un año a cambio de de un No. 6. Los Indianapolis Colts todavía están esperando a ver si Trent Richardson en realidad va a valer el turno de primera ronda que utilizaron para adquirirlo el año pasado.
Con la manera en el que el convenio colectivo del 2011 limita salarios para los jugadores escogidos en el sorte, más equipos están intentado ganar con rósters más jóvenes. Para lograr eso, los gerentes generales necesitan turnos de calidad. Para poder tener éxito bajo el tope salarial, un equipo necesita lograr buenas selecciones en las primeras tres rondas en convertirlos en titulares. Firmar a titulares a segundos contratos después de cuatro años es caro, razón por la cual poco más del 20 por ciento de las selecciones del draft firman un segundo contrato con el equipo que los seleccionó originalmente.
Ocasionalmente, un gerente general tirará los dados para ofrecer más que una selección de cuarta ronda. Pero, mientras más grande el contrato, lo más difícil es para un equipo conseguir valor de vuelta. Cuando se trata de cambios, los equipos miran más al contrato de un jugador que al reporte de los escuchas.
¿Así qué cuán extraña fue esta temporada de cambios? La mejor adquisición fue un jugador que ya está retirado. El linebacker de los Baltimore Ravens, Rolando McCalin, salió de su retiro y fue cambiado a los Dallas Cowboys, junto a un turno de séptima ronda, a cambio de un turno de sexta ronda. McCalin ha sido uno de los mejores linebackers centrales en la NFL este año.
La segunda mejor adquisición ha sido Darren Sproles, quien fue de los New Orleans Saints a los Philadelphia Eagles a cambio de un turno de quinta ronda. Sproles ha sido eléctrico en la ofensiva de Chip Kelly este año.