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ATENAS (Enviado especial) -- Ya está, faltan menos de 24 horas: la gran final de UEFA Champions League se asoma detrás de la esquina. Es, sin duda alguna, el partido más esperado del año y, como hacía notar Kaká en la rueda de prensa, al no haber Mundial ni Eurocopa ni Juegos Olímpicos, posiblemente sea el encuentro más importante de toda la temporada. No es para menos: en la cancha estarán dos de los clubes más gloriosos de Europa, el Milan con sus seis trofeos y el Liverpool que buscará alcanzarlo en el palmarés sumando esta nueva edición a las cinco ganadas anteriormente. Por encima, se trata de dos equipos que disputaron la misma final hace apenas dos años, con los mismos entrenadores y casi idénticos planteles, y por encima una definición que resultó ser drámatica, apasionante y altamente espectacular. En suma, están dadas todas las condiciones para un encuentro inolvidable, una de esas ocasiones que vuelven el fútbol el deporte más lindo y más seguido del mundo. SIGUEN LAS DUDAS
La jornada del martes, dedicada a las conferencias de prensa de ambos equipos (entrenador y dos jugadores cada uno) y al reconocimiento de la cancha, pasó sin que llegaran noticias nuevas. Todo sigue igual, al parecer con una gran calma por parte de ambos, pero es fácil imaginar cuan tensos y nerviosos deben estar todos por estas horas. También no se develaron las dudas que había respecto a las dos alineaciones iniciales. En el caso del Milan, como veremos más adelante, parece estar asegurada la presencia de capitán Maldini - porque participó a la conferencia de prensa, algo que no hubiera hecho de no estar en condiciones de jugar - mientras que sigue la duda sobre el nombre del único delantero, con un apasionante duelo entre Inzaghi y Gilardino. Con respecto al Liverpool, hay una duda debida a las malas condiciones de Zenden (problemas en un tobillo) y tampoco es muy claro quien será su eventual remplazante. Algunos colegas ingleses manejaban la opción de que el entrenador se decida por los dos atacantes, y en este caso el elegido debería ser Bellamy, pero la chance no nos parece demasiado confiable. 
UN MARTES TRANQUILO
Las conferencias de prensa estuvieron muy concurridas, aún cuando realmente uno se pregunte para qué sirven, puesto que los entrenadores no largan prenda y contestan preguntas previsibles y banales con respuestas aún más vacías de contenidos reales.
Algo más interesante, en cambio, estuvo la presencia de Maldini, quien tiene demasiada experiencia en esto - su octava final, igualado el récord de Gento - como para perder el tiempo con respuesta banales y de circunstancia. Pero vayamos por orden: el primero fue Benítez, quien obviamente no dio la alineación inicial ni mucho menos, dejando como quedó dicho todas las dudas existentes. También dijo que no va a tomar a hombre Kaká, algo que nos parece muy razonable puestas las característcas del brasileño. ¿Previsiones? El español afirmó que había pronosticado un partido con pocos goles en 2005, y entonces entre risas se rehusó a formular otro pronóstico tan desacertado. Se declaró convencido de que el partido será diferente de aquel, algo que todo sumado también le conviene, y manifestó una vez más que en su equipo no hay jugadores decisivos, sino que lo que cuenta es el espíritu de grupo y el trabajo de todos. En suma, aire frito, de la misma marca que, una horita más tarde, trató de vendernos Ancelotti. Él también afirmó que el partido será diferente, que el desarrollo dependerá de quien se ponga en ventaja primero (¿en serio?), que el Milan tratará de imponer su juego sin preocuparse mucho de lo que hará el rival (¿entonces por qué no nos dan las alineaciones?) y otras tonterías similares. Ojo, la culpa no es de ellos, sino de quienes les hacen perguntas tan banales e imposibles de contestar 24 horas antes de una final de este nivel. Kaká, por su parte, agregó algo interesante cuando recordó que en efecto, a lo largo de toda la temporada, ningún equipo le había dedicado una marca a hombre y que por eso no se esperaba una "atención" de ese tipo ni siquiera en este caso. EL ORGULLO DE MALDINI
Obviamente, tampoco Maldini pudo agregar mucho más, por lo menos respecto al aspecto técnico y táctico del partido del miércoles. En cambio, el capitán rossonero regaló algunas definiciones interesantes desde su enorme experiencia. Por ejemplo, fue muy impactante el pasaje en el que se habló de la ceremonia de premiación: desde esta edición se volverá al modelo antiguo, con la entrega de la copa realizada en la tribuna, un modelo que no le gusta al veterano defensor. 
"Recuerdo muy bien la final de Manchester, -- afirmó - cuando al final del partido levanté la copa con todos mis compañeros en línea detrás de mí: me parece que esa forma premia más el equipo como conjunto. Fijense también las imagenes de la premiación del Mundial, realmente muy lindas".
Por otra parte, Maldini manifestó que las emociones son siempre diferentes, final tras final, y que en este caso el sentimiento predominante para él era el orgullo, porque este equipo alcanzó algo que nadie afuera del plantel creía realmente posible y él se siente orgulloso de ser el capitán de este equipo. También Kaká regaló alguna caricia a su capitán, especialmente cuando afirmó que su mayor estímulo es el ejemplo de jugadores como "Paolo y Billy" (por Maldini y Costacurta). Todo muy lindo y poético, en suma, pero a esta altura de los acontecimientos es evidente que las palabras están de más. Como dijo el capitán, "no veo la hora de bajar a la cancha para volver a sentir esas emociones que se prueban sólo en ocasiones tan especiales como esta". Nosotros, capitán, estamos de acuerdo plenamente con usted: que la pelota comience a rodar, por favor. EL PRONÓSTICO
Bueno, para completar este anuncio falta lo de siempre, el pronóstico. Nuestros lectores saben que nunca nos echamos atrás, pero realmente este es un caso muy especial, porque se trata, además de una final, de una revancha y realmente hay que ver si la carga agonística que seguramente sienten muy fuerte los rossoneri acabará jugando a favor o en contra de ellos. De cualquier manera, vamos a tratar de adivinar: ganará el Milan, 3-1 y con cierta comodidad. Porque como equipo nos parece más completo técnicamente, porque pasa por un excelente momento y porque es difícil que jugadores tan expertos pierdan la ocasión de tomarse un desquite tan perfecto luego de una derrota tan dolorosa. Además somos italianos y es obvio que deseamos que el Calcio pueda defender el prestigio que tiene desde siempre y que ratificó con la victoria del Mundial de Alemania 2006. Eso sí, por favor, basta de penales...
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