<
>

00, 04, ¿08?

El campeón de 2000: Costa, Corretja, Balcells y Ferrero Getty Images

BUENOS AIRES -- Cuando, en el año 2000, el equipo compuesto por Alex Corretja, Albert Costa, Joan Balcells y un joven Juan Carlos Ferrero levantó la Copa Davis, España selló un triunfo con sabor a justicia. Fue el primer título en el torneo para uno de los países con más historia tenística del mundo.

No fue el último: cuatro años más tarde, el propio Ferrero -ya no tan joven-, Carlos Moyá, Tommy Robredo y un tal Rafael Nadal volvieron a festejar con el trofeo. Una vez cada cuatro años desde el inicio del milenio: 2000 y 2004. La secuencia indicaría una nueva victoria en 2008. Ya están en la final.

Esas dos finales victoriosas no fueron las únicas de España, pero sí las más recordadas. En 2000, favorecida por el sorteo, eliminó como local a Rusia, Italia y Estados Unidos para definir -también en casa- frente a la Australia de Lleyton Hewitt y Patrick Rafter.

Y aunque los 'aussies' se llevaron el primer punto en el polvo de ladrillo de Barcelona (victoria de Hewitt sobre Costa), el equipo ibérico se llevó los siguientes tres encuentros en línea (Ferrero a Rafter primero y a Hewitt después; en el medio la victoria de Balcells-Corretja) para pegar el grito más glorioso de su historia tenística colectiva hasta el momento.

En 2004, la nueva generación de la armada española ya estaba funcionando a pleno. Después de eliminar como visitantes a República Checa, los cuatro fantásticos de aquel momento -que venían de perder la final de 2003 ante Austraolia- volvieron a ser locales en todas las series: superaron a Holanda en cuartos, a Francia en semis y a Estados Unidos en la final.

Esta vez ni siquiera hubo sufrimiento: en Sevilla, y también sobre polvo, Nadal venció a Andy Roddick y Moyá a Mardy Fish durante el día uno. La victoria de los hermanos Bryan el sábado sólo hizo que se retrasara lo inevitable: Moyá volvió a ganar el domingo y España volvió a festejar.

Además, el equipo jugó la final ya citada de 2003, cuando cayó ante Australia -el año en que eliminó a Argentina en semifinales, en el quinto punto, en Málaga-, y tuvo otras dos definiciones, en 1965 y 1967: las dos veces cayó 4-1, como visitante, sobre césped, frente a la Australia de Roy Emerson y John Newcombe (todo un dèja vu). Es decir: jugó cinco finales en total y tiene dos títulos.

El responsable de que España alcanzara la instancia definitoria en el '65 y el '67 es el hombre récord del país en la Davis: Manolo Santana. El madrileño es el español con más victorias en la competencia (92), el más ganador en singles y en dobles (tiene 69 y 23 triunfos, respectivamente) y el que cuenta con más participaciones (46 series en 12 ediciones distintas). Además, es parte de la pareja con mejor registro en la disciplina de dobles -15 victorias y 7 derrotas junto con Josi Luns Arilla-.

No es el único nombre que alimenta una historia rica. España apareció en el ámbito de la Copa Davis en 1921 y, desde entonces, estuvo presente en 72 ediciones. Y, desde 1981, cuando se creó el Grupo Mundial, España hizo historia en serio.

Ahora -y tras dos festejos como local- jugará su primera final como visitante, ante un equipo que no sea Australia. Quizá la lógica de ganar cada cuatro años cambie esa suerte hasta ahora adversa que tuvo al definir un título lejos de los suyos.