JOHANNESBURGO -- La selección de Sudáfrica, conocida en todo el Mundo como los Bafana Bafana, concluyó en el cuarto puesto la Copa de la Confederaciones, un torneo en el que ofreció una buena imagen futbolística, aunque sólo fue capaz de ganar un encuentro, ante el equipo de Nueva Zelanda.
Los anfitriones del Mundial de 2010 lograron con esta cuarta posición el mejor resultado de su historia en una competición de primer nivel, tras haber perdido contra España (3-2) en la prórroga del choque por el tercer y cuarto puesto que se jugó en Rustenburgo.
La selección sudafricana inició el torneo con un empate a cero ante Irak en el encuentro inaugural, antes de lograr en el segundo partido una victoria por 2-0 contra Nueva Zelanda.
A pesar de la derrota por 2-0 en el tercer encuentro, ante España, los Bafana Bafana alcanzaron la clasificación para semifinales como segundos del grupo, por detrás de los españoles.
En la semifinal, el equipo que ha entrenado el brasileño Joel Santana se enfrentó a Brasil y mantuvo el empate a cero en el marcador hasta el minuto 87, con algunas fases en las que dominó con claridad el partido.
Fue en ese minuto cuando el lateral brasileño del Barcelona, Dani Alves, aprovechó el lanzamiento de una falta para dar la victoria a los sudamericanos y envió al equipo anfitrión a la final de consolación.
En este encuentro, hubo muchas alternativas y cuando parecía que el equipo sudafricano lo tenía ganado, dos tantos del español Dani Güiza dieron la vuelta al marcador en los minutos 88 y 89. El empate a dos llegó en tiempo de prolongación y en la prórroga se produjo el triunfo de los españoles.
Los sudafricanos han marcado cuatro goles en cinco encuentros y han recibido seis, con un balance global de una victoria, un empate y tres derrota.
Pese a ello, el balance de la participación del equipo local en el torneo ofrece algunos aspectos positivos dentro de la línea de crecimiento futbolístico de la selección y, en especial de algunos jugadores.
En este sentido ha destacado el juego del lateral izquierdo Tsepo Masilela, que juega en el Maccabi Haifa israelí, y el manejo en el centro del campo de Steven Piennaar, que milita en el Everton inglés.
Junto a ellos, el guardameta titular del equipo sudafricano Itumeleng Khune, que actúa en el equipo local de los Kaize Chiefs, ha tenido intervenciones muy notables a lo largo de toda la competición.
Los goles han corrido por cuenta de Katiego Mhpela, que los anotó ante España, y de Bernard Parker, que los logró ante Nueva Zelanda, aunque este delantero tuvo el infortunio de evitar un gol de su equipo, ya que la pelota le pegó en la parte posterior de la pierna cuando se colaba con meta de Irak en los minutos finales del partido inaugural.
La velocidad y la intensidad en el juego han sido los aspectos más favorables del equipo sudafricano, mientras que las imprecisiones en algunas acciones y, sobre todo, la falta de precisión en el último pase y de acierto en los remates a gol, se encuentran en el debe de estar selección.
Otro aspectos muy favorable para los Bafana Bafana ha sido el del apoyo del público, que se ha volcado con la selección en todos los encuentros que ha disputado y en los que, aunque las victorias no han sido frecuentes, el equipo siempre dio la cara y nunca cayó con estrépito.
Para la próxima edición de la Copa del Mundo, la selección sudafricana debe mejorar, pues es bien sabido que para una competición de estas características es bueno que el anfitrión llegue lejos, tal y como ha reconocido el presidente de la FIFA, Joseph Blatter.