Aclaración: muchos de los párrafos incluidos esta nota fueron extraídos de ediciones de junio y julio del "Diario de Voces".
BUENOS AIRES -- En la nota que pueden ver en este enlace, acompañada por la encuesta que pueden ver aquí, columnistas y lectores de ESPN.com expresan sus opiniones y sus votos acerca de cuál es, o debería ser, el "Equipo de América".
Mientras tanto, ESPNdeportes.com llevó a cabo en semanas recientes una serie de 11 encuestas, para intentar determinar cuál es el "Equipo de Latinoamérica".
La serie de encuestas transitó un camino parecido al de una temporada completa de NFL. Primero hubo ocho encuestas "divisionales", una por cada división. Luego hubo dos encuestas "de conferencia", en las que participaron los ganadores de cada división. Y finalmente hubo una "final", entre los ganadores de cada conferencia.
Esa "encuesta final" tuvo como protagonistas a Pittsburgh por la AFC y a Dallas por la NFC. Votaron 3,108 personas a lo largo de tres días, y el resultado fue el siguiente:
Steelers: 34 por ciento.
Cowboys: 27 por ciento.
El 39 por ciento restante dijo que ninguno de los dos equipos le simpatizaba.
Con lo cual estamos en condiciones de anunciar que, al menos hasta que vuelva a realizarse esta misma serie de encuestas el año que viene, los Steelers son, oficialmente, "El equipo de Latinoamérica".
Volveré sobre los Steelers y los Cowboys más abajo, al recopilar todo lo que se fue hablando en el "Diario de Voces" durante el transcurso de estas votaciones. Pero primero, para tener los elementos sobre la mesa, veamos el resultado de cada una de las encuestas que compusieron esta serie.
ENCUESTAS DIVISIONALES
En los capítulos "divisionales", la pregunta fue: "¿Cuál es tu equipo favorito en la división?" Y se le daba al votante la posibilidad de elegir la opción: "Ninguno".
Estas encuestas reunieron entre 2,100 y 2,500 votos cada una. Aquí, los resultados finales de cada división.
AFC Este
Patriots: 38 por ciento
Dolphins: 29 por ciento.
Bills: 9 por ciento.
Jets: 8 por ciento.
Ninguno: 16 por ciento.
AFC Norte
Steelers: 47 por ciento.
Ravens: 22 por ciento.
Bengals: 10 por ciento.
Browns: 6 por ciento.
Ninguno: 15 por ciento.
AFC Sur
Colts: 51 por ciento.
Titans: 13 por ciento.
Texans: 10 por ciento.
Jaguars: 9 por ciento.
Ninguno: 17 por ciento.
AFC Oeste
Chargers: 34 por ciento
Raiders: 26 por ciento
Broncos: 22 por ciento
Chiefs: 6 por ciento
Ninguno: 12 por ciento.
NFC Este
Cowboys: 36 por ciento
Eagles: 21 por ciento
Giants: 17 por ciento
Redskins: 9 por ciento
Ninguno: 17 por ciento.
NFC Norte
Packers: 33 por ciento.
Bears: 25 por ciento.
Vikings: 20 por ciento.
Lions: 7 por ciento.
Ninguno: 15 por ciento.
NFC Sur
Saints: 30 por ciento.
Panthers: 18 por ciento.
Buccaneers: 17 por ciento.
Falcons: 15 por ciento.
Ninguno: 20 por ciento.
NFC Oeste
49ers: 38 por ciento.
Cardinals: 27 por ciento.
Rams: 9 por ciento.
Seahawks: 8 por ciento.
Ninguno: 18 por ciento.
ENCUESTAS DE CONFERENCIA
Con esos resultados quedaron conformadas las dos siguientes encuestas, que reunieron a los ganadores de cada división.
Estas dos encuestas sumaron alrededor de 2,500 votos cada una. Aquí, los resultados finales de cada conferencia.
AFC
Steelers: 33 por ciento.
Patriots: 25 por ciento.
Colts: 17 por ciento.
Chargers: 12 por ciento.
Ninguno: 13 por ciento.
NFC
Cowboys: 34 por ciento.
49ers: 21 por ciento.
Packers: 14 por ciento.
Saints: 11 por ciento.
Ninguno: 20 por ciento.
EL PÉNDULO HACIA LA AFC
Más allá de haber coronado a Pittsburgh como el "Equipo de Latinoamérica", al analizar todo el desarrollo de esta serie de encuestas podemos llegar a algunas otras conclusiones.
Por ejemplo, que los Patriots son, en este momento, el tercer equipo de la afición hispana.
Los 49ers son el cuarto equipo, lo cual es altamente meritorio, considerando que llevan seis temporadas consecutivas con marca perdedora.
Luego vendrían los Colts y los Packers, según lo indicado en las votaciones "de conferencia", pero ya estaríamos hilando muy fino, porque podríamos pensar que correspondería poner en juego a algunos equipos que terminaron en el segundo lugar en las encuestas de sus respectivas divisiones.
Otro dato interesante de las encuestas "de conferencia" es la diferencia que existió en los votos por ningún equipo: 13 por ciento en la AFC y 20 por ciento en la NFC.
Eso muestra una leve inclinación de los fanáticos en general hacia la AFC; lo cual es esperable, si se tiene en cuenta la siguiente comparación.
En los últimos 10 años, por tomar el número más redondo posible, los cuatro equipos que participaron en nuestra encuesta final de la AFC reúnen seis victorias y una derrota en el Super Bowl, y siete victorias y cinco derrotas en el Campeonato de Conferencia. En total, 19 apariciones y 13 triunfos en lo que podríamos llamar las "grandes finales".
En esa misma década, los cuatro equipos de la NFC tienen dos derrotas en el Campeonato de Conferencia. Eso es todo. Un total de 2 apariciones en las "grandes finales", y ningún triunfo.
Desgranemos un poco mejor lo que sucedió en estos 10 años.
De los dos "favoritos históricos" de la afición latina en la AFC (Pittsburgh y Miami), al menos uno de ellos (Pittsburgh) siguió sumando títulos en estos años. Además apareció un nuevo equipo dinástico (New England), que logró convocar una notable cantidad de fanáticos.
En cambio, en la NFC sucedió casi lo contrario. Ninguno de los dos "favoritos históricos" de los aficionados hispanos (Dallas y San Francisco) llegó a jugar un Campeonato de Conferencia en estos 10 años. Y además no surgió un equipo dominante, capaz de aglutinar fanáticos. Lo más cercano a algo así fue el caso de Philadelphia, que disputó cinco Campeonatos de Conferencia en este período. El problema es que los Eagles perdieron cuatro de esos cinco partidos, y la vez que superaron el escollo fueron derrotados en el Super Bowl.
¿Qué pasará de aquí en adelante? Ah, la gran pregunta.
A partir de ahora llevaremos a cabo cada año esta serie de encuestas, a esta misma altura de la temporada baja. Y será muy interesante ver cómo van variando los resultados.
NO ESTÁN SOLOS EN EL DESIERTO
Particularmente interesante será ver cómo evoluciona el caso de Arizona, si este equipo logra mantenerse en un nivel competitivo.
Los Cardinals no participaron en la encuesta "de conferencia" de la NFC, pero es muy sorprendente el 27 por ciento de votos que obtuvieron en su división.
Es un porcentaje altísimo, comparado con lo que probablemente habrían conseguido si la encuesta se hubiera realizado en julio del año pasado.
Siempre pensé que lo único que necesitaban los Cards era una buena campaña, para empezar a ver los retornos de toda esa inversión que vienen realizando desde hace años en promover al equipo en Latinoamérica, específicamente en México. Inversión que llegó a su punto más alto algunos años atrás, cuando, por decisión propia y no de la liga, sacrificaron un partido de local en temporada regular para jugar en el Estadio Azteca.
PRENSA, POPULARIDAD Y PARIDAD
Durante las semanas en que se llevaron a cabo estas encuestas, algunos lectores del "Diario de Voces" opinaron que los Cowboys corren con ventaja en cuestiones de popularidad, dado que reciben mayor cobertura que el resto de los equipos en los medios de los Estados Unidos y también de Latinoamérica.
Para finalizar esta columna reproduzco a continuación, con algunas pocas alteraciones, la respuesta que di en ese momento.
Empecemos por el principio: ¿reciben los Cowboys mayor cobertura que el resto de los equipos en los medios de Latinoamérica y de los Estados Unidos?
Sí, verdadero. Por algo son el "Equipo de América".
Como la harina del panadero, la información de la NFL es la materia prima con la que yo trabajo día a día, y puedo dar fe de que los Cowboys generan un poco más de información que el resto de los equipos.
Entonces hay que caer en el trillado acertijo del huevo y la gallina: ¿qué nació primero, el fanatismo por los Cowboys o la cobertura de los medios?
Lo cierto es que ahora uno y otra, fanatismo y cobertura, se alimentan mutuamente.
¿Y qué opino yo de esto? Opino que no me importa.
Lo único que me importa es que el fútbol americano se dé a conocer fuera de los Estados Unidos. Que se rompan los preconceptos de que es un juego sin ritmo y sin sentido. Que se transforme de un deporte estadounidense en un deporte del mundo, así como tantos deportes ingleses son ahora patrimonio de todo el planeta.
En ese sentido hay tanto por hacer, tanto terreno por avanzar, que no me importa si los medios en español cubren a uno u otro equipo, mientras cubran algo de fútbol americano.
En esta etapa prehistórica de la evolución del fútbol americano en el mundo, no es tiempo de estar poniendo palos en la rueda y estar criticando a uno u otro medio por darle preponderancia a uno u otro equipo.
Yo no voy a criticar nada de lo que se haga, porque al final todo suma.
Vayamos al extremo: si en México se lanza un canal de TV dedicado exclusivamente a los Cowboys, por decir una exageración absurda, a mí me parecería fantástico. Simplemente porque me parece fantástico cualquier emprendimiento vinculado con dar a conocer este deporte en el mundo, aunque sea a través de un solo equipo.
Obviamente, el escenario ideal sería que cada uno de los 32 equipos de la NFL tuviera el 3.125 por ciento de los fanáticos totales, así el público estaría repartido en perfecta proporción. Pero no creo que sea el momento de apuntar a eso todavía. Cuando el fútbol americano haya ganado en todas partes la popularidad que tienen tantos otros deportes, entonces seré el primero en ponerme en campaña para que todos los equipos sean tratados por igual, aunque no creo que para entonces esté vivo para poder hacerlo.
Mientras tanto, quiero aprovechar para analizar otro aspecto de este asunto.
Es cierto que Dallas es el "Equipo de América". Y sin embargo, se han disputado ya 13 Super Bowls sin Dallas.
Ha transcurrido, redondeando, casi una década y media desde la última vez que los Cowboys jugaron por el título de la NFL. En ese tiempo disputaron el Super Bowl equipos con la menor base de fanáticos en toda la liga, como Tampa Bay, Carolina y Seattle.
¿Por qué la liga "permite" que su "equipo estrella" ande tan ausente de las grandes finales? ¿Es acaso la NFL la panacea de las buenas intenciones?
No. Es cuestión de dinero.
La NFL es en última instancia un negocio, y por lo tanto su objetivo final es el dinero. Es curioso cómo el hombre ha convertido en un fin al dinero, que no es otra cosa que un medio para facilitar el trueque. Pero quedémonos en el deporte.
Los dueños de la liga son, ante todo, hombres de negocio. Hombres de negocio lo suficientemente exitosos e inteligentes como para haber acumulado la riqueza necesaria para comprar un equipo de la NFL.
Y como personas inteligentes, saben que el negocio está en la paridad, porque la paridad permite a cualquier fanático soñar con que su equipo algún día podrá ganar un campeonato. Los dueños de la NFL son concientes de que mientras haya paridad, habrá público; mientras haya público, habrá mercado; mientras haya mercado, habrá negocio, y mientras haya negocio, habrá dinero.
Entonces, lejos de inventar algún mecanismo para que el "Equipo de América" esté presente en el Super Bowl con cierta periodicidad, los dueños han dejado hasta ahora que la NFL se rija por la paridad.
Sé que muchos estarán pensando en este momento en el escándalo de los Patriots. Pero ese escándalo no tiene nada que ver con la paridad. De hecho, el surgimiento de New England como potencia en la actual década es una demostración más de la paridad. Antes de que Mo Lewis lesionara a Drew Bledsoe, nadie hablaba de los Pats en la NFL.
El escándalo de los videos no pone en duda el compromiso de la NFL con la paridad. Lo que pone en duda es su compromiso con la transparencia.
En mi opinión, no hubo transparencia en el manejo del caso por parte de Roger Goodell. El comisionado quiso resguardar el buen nombre de la liga, y pensó que la mejor forma de hacerlo era barrer todo debajo de la alfombra, destruir la evidencia y pasar a otro tema.
Error.
Lo único que logró con eso fue dejar instalado para siempre un manto de duda sobre el caso. Si Goodell hubiera sido transparente, y hubiera exhibido el conjunto completo de las pruebas físicas, se podría haber debatido el tema hasta las últimas consecuencias. Ahora sólo tenemos la palabra del comisionado, cuyo discurso es algo así como: "Yo he visto los videos y he aplicado el castigo adecuado, y punto, nadie me discuta".
Volviendo a la paridad, lo que sí me preocupa es la negociación del próximo acuerdo colectivo de trabajo. El sostén de la paridad es el tope salarial, que obliga a los dueños de los equipos a mantenerse dentro de un máximo y un mínimo de gastos.
Sin un nuevo convenio colectivo no habrá tope salarial, y entonces cada dueño gastará lo que quiera. Los más derrochadores, quienes generalmente son propietarios de equipos emplazados en grandes urbes, invertirán millones de dólares en armar costosas plantillas, mientras que los más austeros --generalmente propietarios de equipos en ciudades pequeñas-- reducirán su nómina a lo mínimo indispensable.
Será el fin de la paridad, y los días de la NFL como el mayor negocio deportivo de los Estados Unidos estarán contados.