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Se cayeron de su "galaxia"

MADRID (EFE) -- El 17 de marzo de 2004, el día que perdió la final de la Copa del Rey ante el Zaragoza (3-2), el Real Madrid entró en caída libre y lleva un mes y medio sumido en una crisis de resultados que le tiene al borde del fracaso.

De aspirar a ganarlo todo (Liga, Copa y UEFA Champions League), el equipo que entrena el portugués Carlos Queiroz ha pasado a una situación en la que sólo las matemáticas avalan su sueño de cerrar la temporada con algún éxito deportivo.

La lógica apunta a que el Real Madrid acabará la campaña sin incrementar su extensa colección de títulos.

Eliminado de la Copa de Europa por el Mónaco, es segundo en la Liga, a cuatro puntos del Valencia, cuando sólo restan tres jornadas para su conclusión. Y tiene al Barcelona pisándole los talones (a un punto de distancia).

El rendimiento del equipo blanco ha caído de forma estrepitosa en poco más de un mes. El fatídico 17 de marzo fue el inicio de una de las peores rachas madridistas en los últimos tiempos: diez partidos disputados, con un balance de cuatro victorias y seis derrotas, 19 goles a favor y 22 en contra.

Tres días después de perder la final de la Copa del Rey, cayó derrotado en su visita liguera al Athletic de Bilbao (4-2), resultado que enmendó el 24 de marzo con una victoria sobre el Mónaco por 4-2 en la ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones, el 28 goleó al Sevilla en el Bernabéu (5-1) y el 3 de abril se impuso a domicilio al Albacete (1-2).

Pero tres días después, llegó el segundo mazazo, del que apenas pudo recuperarse. El Mónaco le dejó fuera de Europa el 6 de abril con un triunfo por 3-1, el 11 sucumbió en casa ante el Osasuna (0-3) y comenzó a complicar su camino hacia al título de Liga, aunque se tomó un respiro con una victoria en el estadio del Atlético Madrid (1-2).

Pero no ha sumado un solo punto en las dos últimas jornadas (cayó 1-2 frente al Barcelona y 2-0 ante el Deportivo) y el Valencia se ha colocado con cuatro puntos de ventaja, con la posibilidad de conseguir el título anticipadamente el próximo fin de semana si gana al Sevilla y el Real Madrid y el Barcelona no vencen en sus respectivos compromisos con el Mallorca y el Celta.

El Valencia, y también el Barcelona, avanzan a toda velocidad. El Real Madrid, que tenía ocho puntos de ventaja respecto al equipo valenciano al concluir la vigésima sexta jornada de Liga, lo hace a trompicones y parece incapaz de encontrar la solución a sus males.

Se ha comenzado a cuestionar la estrategia deportiva de su presidente, Florentino Pérez, impulsor de una política que él mismo bautizó como de 'Zidanes y Pavones'.

Con esa frase quiso explicar su intención de confeccionar un plantel formada por jugadores consagrados como el francés Zinedine Zidane y futbolistas procedentes de la cantera como el defensa Francisco Pavón.

Florentino Pérez es criticado ahora por haberse olvidado de contratar a jugadores de 'clase media' que completaran un grupo equilibrada.

Once jugadores, doce como mucho, los que habitualmente forman el equipo titular, han sido 'exprimidos' por un entrenador que, por lo que demuestran las estadísticas, no tiene demasiada confianza en el resto de la plantilla.

Los titulares apenas han tenido descanso y están saturados de partidos. El rendimiento de Zidane, Roberto Carlos, David Beckham o Raúl, cuatro de los considerados 'galácticos', ha sufrido un bajón alarmante.

De las grandes estrellas del equipo blanco, sólo Ronaldo, máximo artillero de la Liga con 24 dianas, y Luis Figo han exhibido un juego acorde con lo que se espera de ellos.

Raúl, el capitán, un jugador determinante en el Real Madrid, vive tal vez la peor temporada de su carrera. En 32 partidos de Liga sólo ha marcado 11 goles, y lo peor es que en muchos encuentros ha pasado prácticamente inadvertido.

En la UEFA Champions League ha participado en nueve partidos y su registro goleador se reduce a dos tantos. Raúl no se parece en nada al que era hace sólo unos meses y el Real Madrid, indudablemente, acusa su mal momento de forma.

Pero los males madridistas no son sólo 'culpa' de Raúl. El equipo hace aguas en defensa. Encaja goles con demasiada facilidad y ante cualquier rival. Le han marcado 45 en 35 partidos del campeonato liguero y sólo en cinco encuentros ha mantenido su portería a cero.

El Real Madrid va cuesta abajo. El cuarto proyecto deportivo de Florentino Pérez está a punto de fracasar y ya se asegura que habrá muchos cambios de personal la próxima temporada.

Carlos Queiroz, el técnico que sustituyó a Vicente del Bosque, un entrenador muy querido por el madridismo, parece condenado a salir del club y se anuncian fichajes de jugadores que no serán 'Zidanes' ni 'Pavones'.

Para el Real Madrid, ser segundo es sinónimo de desastre y acabar una temporada en blanco, como el color de su camiseta, puede hacer reflexionar incluso al mismísimo Florentino Pérez, un hombre poco dado a cambiar el rumbo una vez iniciado el viaje.