SAO PAULO (EFE) -- Los árbitros del estado brasileño de Sao Paulo pedirán autorización para portar equipos especiales durante los partidos que les permitan grabar las conversaciones con futbolistas y registrar posibles intercambios de insultos.
La decisión fue anunciada por el Sindicato de Arbitros de Fútbol del Estado de Sao Paulo luego de que el delantero argentino Carlos Tevez, jugador del club Corinthians, denunciara una supuesta persecución por parte de los referís brasileños, de los que dice haber recibido insultos.
Según el goleador del Corinthians, los árbitros no sólo lo persiguen e insultan a él sino también a los otros dos argentinos que juegan para el club paulista. Ante las constantes protestas de Tevez, el Corinthians decidió llevar una cámara de televisión a los estadios tan sólo dirigida a grabar las acciones y los diálogos de los árbitros.
"El Corinthians tiene todo el derecho de utilizar recursos electrónicos para defender sus intereses, pero los árbitros y los auxiliares también pueden actuar de la misma forma", afirmó el presidente del sindicato, Sergio Correa. "De esa manera, la verdad prevalecerá y si sabrá quién la tiene, si el árbitro o el jugador", agregó el dirigente sindical.
Correa admitió que el uso de grabadores tiene que ser autorizado por el Tribunal Superior de Justicia Deportiva, corte ante la cual el sindicato presentará la respectiva solicitud. "Si se aprueba la petición, cada árbitro decidirá si carga o no grabador, especialmente si es convocado para partidos de clubes que acostumbran transferir la responsabilidad por sus malos resultados a los árbitros", agregó.
El abogado del Corinthians, Joao Zanforlim, alega que el uso de grabador tan sólo puede ser autorizado por la Federación Internacional de Asociaciones de Fútbol (FIFA).
La disputa entre los árbitros y el Corinthians puede agravarse ante la decisión del sindicato de igualmente denunciar a Tevez por discriminación debido a una declaración en la que el delantero argentino rechazó la participación de mujeres entre los árbitros designados para partidos difíciles.
"Es una declaración discriminatoria contra todas las mujeres que actúan como árbitras", afirma Correa. "Tevez no discriminó a nadie. El apenas piensa que, en el fútbol, los hombres imponen más respeto", reaccionó Zanforlim.