<
>

Se abre una nueva historia de la Champions

Las filas siguen siendo largas. Las prensas que estampan los números y nombres en las camisetas no paran de trabajar. Blancas, negras, rosadas de James, Cristiano en menos cantidad las de 'Chicharito' según cuenta un dependiente de la tienda oficial. Pero no está lejos de los más vendidos. Es temprano en el día previo a que el Santiago Bernabéu abra sus puertas y que se enciendan sus faroles para iluminar otra noche europea.

Han pasado 114 días desde aquella tarde en Lisboa en la que el madridísmo vio a Iker Casillas levantar el trofeo de mayor jerarquía en el fútbol de clubes. La Décima está ya detrás de una vitrina del Museo. A su lado las que antes levantaron Muñoz, Zárraga, Gento, Sanchís, Hierro. La más reciente seguro estaría envidiando a las otras. Ninguna perdió tan rápido el crédito del título. La Décima ha pasado a la historia y aquel equipo también. Sólo dos se fueron, pero en estas veredas cercanas a la Castellana, se les extraña.

La actuación de Xabi Alonso en el triunfo del Bayern el sábado pasado y el gol de Di María en Old Trafford el domingo parecen alentar la molestia por su partida. Dos puntos de equilibrio ausente en un equipo que, según su entrenador, tiene suficientes mediocentros. "Tenemos buenos mediocentros y uno muy bueno que hasta ahora no ha jugado" dice Carlo Ancelotti que ese es Asier Illarramendi que quien sólo ha jugado cinco minutos en esta temporada. En la Supercopa de Europa ante el Sevilla.

La UEFA anunció este lunes que el premio por ganar ese título le ha dejado $3 millones de euros [3.8 mdd] a las arcas del Real Madrid. Ese partido mostró a un equipo con una superioridad tan amplia que a cualquiera le parecía que encaminado a ganar mucho. En poco más de un mes, aquello de la superioridad quedó lejos. Este martes ante el FC Basel abren la defensa del título de Champions (por ESPN para todo el continente americano). Ancelotti dijo que "este partido llega en el momento justo para demostrar lo que tenemos como equipo". El compromiso de corregir defectos que no tendría que padecer un equipo que viene de ganar el título más importante.

El pentacampeón suizo ha pasado por un problema similar. Ademas de estrenar técnico para esta tempora, el FC Basel ha perdido también a un par de piezas fundamentales. El arquero Yann Sommer, vendido al Borussia Monchengladbach y el delantero Valentin Stocker, ya en el Hertha. Paulo Sousa, ex entrenador del Maccabi Tel Aviv, conocía muy bien al equipo suizo. Lo enfrentó cuatro veces la temporada pasada en la Europa League. Ancelotti dice que su rival de este martes juega con "naturalidad". Quizás envidiable. Desde 2003 no tenían un arranque liguero tan bueno, más allá de su derrota el sábado ante el Grasshoppers. También, como fue el Atlético para el Real Madrid, un Derby.

Sousa ha cambiado la idea de un equipo directo y de transiciones. Ahora buscarán a Marco Streller ante la ausencia de Stocker. Streller tiene 37 goles en ultimas tres temporadas. No cambia la intención por ser protagonistas. Un equipo que construye con tres en el fondo y que en la mitad del campo sea la zona más cubierta por un plantel que dicen desde el cuerpo técnico, es bastante completo. Tendrán que recurrir a eso, la profundidad del plantel, para tapar la ausencia del chileno Marcelo Díaz, suspendido por tres partidos por una agresión sin balón en la eliminación de la última Europa League ante el Valencia. Para sorprender, el japonés Yoichiro Kakitani, de mucha velocidad puesta en beneficio del equipo para convertirlo en un uno más vertical. Para soster el fondo, Walter Samuel.

El argentino jugó una temporada en el Real Madrid, la 2004/05. Con 36 años el FC Basel es su cuarto equipo en Europa. Para el cuerpo técnico ya es un líder, aunque silencioso como es él. En la sombra. Se escuchan más sus tradicionales silbídos que su voz. Pero el peso es el mismo. La salida de pelota es buena porque buenas son sus decisiones en una línea de tres, no para defender con más. Para tener más opciones de salida de balón.

Real Madrid no pierde en su primer partido de UEFA Champions League en las últimas siete temporadas. El ambiente es pesimista pero dirigido a un equipo al que se le exige funcionar aún y cuando lo que parece es un equipo en construcción. Similar sensación a la temporada pasada. La temporada de la Décima.