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El clima en Melbourne

BRISTOL -- Llovió en Melbourne y si no hubiera sido por el techo en la Laver y la Hisense, no hubiéramos visto caer la primera lluvia de estrellas en Australia.

La primera ráfaga se produjo cuando dos hermosas "María", rusas de 22 años, cuyos padres son sus entrenadores y además se llaman Yuri, salpicaron la cancha central. El glamour y la belleza se esparcieron por todos lados y nos brindaron un partido tormentoso, donde al final Sharapova, conquistadora de esas tierras lejanas en el 2008, cayó vencida ante Kirilenko.

"Esa María, es la mía", gritó su padre, también gritó Rusia y provocaba un clima nublado para otras jugadoras en la siembra cuya cosecha se cuida con celos, sobre todos en primeras rondas de un torneo de Grand Slam.

Sharapova fue eliminada en Australia

Luego llegó el turno de Clijsters, que ya el año pasado dijo: "Al mal tiempo, buena cara". A la belga se le despejó el cielo tras su maternidad y se dio cuenta de que es capaz de superar cualquier condición para transformar un clima borrascoso en apacible y soleado. Ella brilla, lo demostró en Flushing Meadows y lo corroboró el lunes en Melbourne Park. Pide que no cierren los paraguas y que los utilicen como sombrillas porque promete irradiar todo su esplendor hasta el segundo sábado del torneo.

Mientras esto sucedía bajo el techo de la Laver, Safina saltaba un pozo en la Hisense, una charca, no un bache como los que se le han presentado en finales grandes. Quiere manifestar a viva voz que no hay chaparrón que la detenga. Por su parte, Henin pasó su primera gran prueba y deja entender que quiere convencer contra viento y marea que volvió para triunfar y no por el simple hecho de volver.

El primer día también nos mostró algunas hostiles, que desafiaron a la naturaleza y completaron su tarea a pesar del aguacero. Ellas esperan un diluvio en el resto de estas dos semanas, a expensas de las preferidas del público, quienes se presentarán a la cancha con el temor de dar un traspié y abrir un cuadro que se ve muy cerrado.

Así fue el Día 1 de Australia. Puede ser que haya llovido sobre mojado. Pero la curiosidad, por lo que sucederá en los próximos días, nos invita a estar a la expectativa de un tornado que deje a todos sorprendidos en la tierra de los canguros.