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Fórmula 2: Franco Colapinto, con la mente puesta en recuperarse en Australia

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Golpe al muro, trompo y final de carrera para Colapinto en Jeddah (1:48)

El argentino, tras superar a Victor Martins, le pegó a la pared, perdió el auto y debió abandonar. (1:48)

El golpe contra el muro en la feature race del callejero de Jeddah fue el summum de un fin de semana para el olvido de Franco Colapinto en Arabia Saudita. El error en la carrera larga fue el colofón de una cita que comenzó con otro impacto a la pared en la clasificación y que continuó con un problema en el momento de largar la competencia sprint (el auto se quedó parado en la grilla). La suma de errores caló hondo en el espíritu del argentino, a quien las cámaras de la TV oficial lo enfocaron sentado detrás del alambrado completamente apesadumbrado.

Colapinto eligió recluirse tras el paso por el urbano saudí, evitó brindar declaraciones y hasta optó por el silencio en sus redes sociales. Se tomó un tiempo para despejarse, quitarse los resabios de la amargura y tratar de pasar página para continuar adelante con la larga temporada de F2, que tiene 14 fechas en su agenda. El próximo objetivo es Melbourne, del 21 al 23.

Dos días después de la carrera que cerró el fin de semana saudí, Franco apareció con un mensaje en sus redes sociales: "Uno de los fines de semana más complicados. Algunos días para recuperarnos y volver mejor que antes. Esto recién empieza”, posteó en su cuenta de Instagram, con un par de fotos.

Colapinto deberá hacer tabula rasa a partir de Melbourne. Deberá dejar atrás los errores de Baréin y Arabia Saudita y comenzar el camino de la recuperación desde Australia, un circuito en el que ya corrió con Fórmula 3 y en el que ganó la carrera sprint del año pasado, aunque luego se quedó sin nada por la penalización por técnica que cayó sobre el auto del equipo MP. Después de Australia, habrá un largó parón de casi dos meses, hasta el desembarco en Europa de la categoría, que se producirá en Imola, en el fin de semana del 16 al 18 de mayo. Será clave para Franco irse con buenas sensaciones de Oceanía para que la espera de casi 60 días no sea una carga.