La medida tiene como objetivo reducir los contactos a la cabeza que sean evitables entre el arranque de los campamentos de entrenamiento y el segundo partido de pretemporada
PALM BEACH -- La NFL y NFL Players Association han impuesto la obligatoriedad del uso de las cubiertas Guardian Cap sobre los cascos para ciertas posiciones durante una porción clave del campamento de entrenamiento, cuando las conmociones y el contacto a la cabeza usualmente se elevan, informaron oficiales de la liga este martes.
La resolución conjunta, aprobada durante una sesión matutina en las reuniones anuales de propietarios de la NFL, requerirá que linieros ofensivos y defensivos, alas cerradas y linebackers, porten las Guardian Caps para todas las prácticas de pretemporada entre el arranque del periodo de contacto en el campamento de entrenamiento, hasta el segundo encuentro de la pretemporada.
Las cubiertas están conformadas por colchones suaves que se adhieren a la parte exterior del casco, y se emplean con cierta frecuencia en el fútbol americano colegial. Equipos de la NFL han experimentado con ellas de modo esporádico en años recientes. De acuerdo a la empresa que los fabrica, la versión actual reduce la fuerza del contacto a la cabeza hasta en un 20 por ciento, si todos los jugadores involucrados la están empleando. Guardian Cap desarrolló la tecnología en parte a traves de un fondo entregado por la NFL en el 2017.
El mandato representa un primer paso significativo en el esfuerzo de la liga hacia eliminar todo contacto a la cabeza que sea evitable, una meta que el jefe médico de la NFL, Dr. Allen Sills, anunció a principios de este año.
"Incluso si no hay cambio al número de conmociones con esta intervención", acotó Sills, "lo seguiríamos considerando algo que vale la pena si reduce la fuerza que cada jugador recibe".
La NFL ha disminuido su número de conmociones desde que Sills emitió un llamado a la acción en el 2018. Hubo 187 conmociones reportadas en el 2021, entre el inicio del campamento de entrenamiento y el término de la temporada regular, una caída desde el promedio de 266.3 reportadas entre el 2015 y 2017. Sills dijo en febrero que la liga había comenzado a trabajar para disminuir los efectos de todo contacto a la cabeza, sea o no que resulte en conmoción.
"Sabemos que algún contacto a la cabeza ocurre inevitablemente en los deportes de todo tipo", explicó, "pero queremos enfocarnos en la parte que, creemos, es evitable".
Las primas dos semanas del campamento de entrenamiento producen una frecuencia alta de conmociones --aproximadamente 30 al año-- y un mayor grado de contacto a la cabeza en general, de acuerdo al vicepresidente ejecutivo de salud y seguridad de la NFL, Jeff Miller. Parte de la elevación en el número puede ser atribuido al número de jugadores involucrados al inicio de los campamentos de entrenamiento, muchos de los cuales improbablemente se quedarán en plantillas finales. Pero, esa primera porción consta de prácticas pesadas con equipamiento completo, y el uso elevado de ejercicios físicos, como las simulaciones de 9 contra 7, para aclimatar a los equipos al contacto.
La tasa de contactos a la cabeza disminuye después del segundo partido de pretemporada, cuando la mayoría de los equipos asume una carga de trabajo físico menor. A los jugadores se les alentará, pero no obligará, a portar Guardian Cap a partir de allí.
Mientras tanto, de acuerdo a Miller, la NFL y NFLPA también acordaron requerir que todos los jugadores porten tecnología móvil durante las prácticas de pretemporada y simulaciones. Los datos resultantes darán a la liga y al sindicato una mejor idea del trabajo durante ese periodo, aportando un agregado más preciso de las tendencias en toda la liga.
La mayoría de los equipos porta aparatos móviles --sobre todo, los de Zebra Technologies y Catapult--, pero la resolución estandarizará la práctica. Se pedirá a los equipos presentar video de dos prácticas completas de campamento de entrenamiento para confirmar si los planes del entrenamiento empatan con la actividad real del entrenamiento.