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Gurú de las Diagonales: En momentos de frustración, lo mejor es alejarse del ruido

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Gurú: "Hoy Buffalo se despierta desesperado, (pero) les prometo que están cerca" (2:12)

Después de su eliminación de los playoffs, el Gurú de las Diagonales piensa que los Bills volverán a un Super Bowl si hace "pequeños ajustes". (2:12)

La Ronda Divisional dejó fuera cuatro equipos más, y si bien el acto reflejo es decepción y potenciales cambios, hay razones para ilusionarse a futuro.

MIAMI -- Y un día quedaron cuatro.

Con la llegada próxima de los Campeonatos de Conferencia, cuatro franquicias más vieron cómo sus sueños de ser campeones se quedaron en la puerta de la gloria.

Tal como suele suceder en esta sociedad de gratificación instantánea, la reacción inicial es pedir cambios al por mayor, dados los altos nivel de frustración.

Sin embargo, si miramos cada situación con lupa, quizás tengan más razones para ilusionarse de lo que piensan.

El ejemplo más bipolar parece estar en Buffalo, que perdió por tercera ocasión en tres enfrentamientos de playoffs ante Kansas City.

Una vez más, un gol de campo desviado a la derecha que trae pesadillas de Scott Norwood para los fanáticos de los Buffalo Bills.

La realidad es que más allá del yerro de Tyler Bass, Buffalo desperdició muchas oportunidades durante el partido, incluyendo par de pases dejados caer a lo profundo por parte de Stefon Diggs y Trent Sherfield, y quizás aun más importante el potencial touchdown en el cual Josh Allen no pudo conectarse con Khalil Shakir para lo que hubiera sido un touchdown, de no haber sido por un mal pase y la presión que recibió el mariscal.

En Buffalo genuinamente pensaron que esta era la temporada para dar ese siguiente salto; sobre todo porque se habían recuperado magistralmente tras un comienzo de 6-6, y porque este año enfrentaban a los Kansas City Chiefs en su casa.

De la mano de Sean McDermott, Buffalo ha clasificado a los playoffs en seis de siete temporadas, aunque por segundo año consecutivo, perdieron en casa, y por tercera campaña en fila, fueron eliminados en la Ronda Divisional.

Es fácil perder la perspectiva cuando gozas de éxito, pero no hay que olvidarse que Buffalo no clasificaba a playoffs hace 17 años, previo a su llegada.

Yo no sé si McDermott sea la respuesta idónea a futuro, pero sí sé que no se irá a ningún lado esta temporada baja, y que hay que destacar lo que ha logrado.

Fue una temporada atípica para Buffalo, si consideramos que despidieron a su coordinador ofensivo Ken Dorsey en plena campaña; lo reemplazó Joe Brady e hizo un gran trabajo.

Sin embargo, la desazón en Buffalo era palpable, y muchos de los fans de los Bills querían cambios, y se preguntaban si alguna vez volverán a llegar a un Super Bowl.

No tengo la respuesta concreta a esa pregunta, pero sí creo que hay razones para ilusionarse.

Josh Allen, cuando está en su mejor nivel, tiene posiblemente el techo más alto de la NFL, y tiene apenas 27 años de edad.

Y personalmente, siento que los Bills y Allen encontraron algo tras la asunción de Brady como coordinador ofensivo.

Allen entendió que no tiene que jugar fútbol americano de héroe todo el tiempo, y ha aprendido a tomar lo que la defensiva le da.

Buffalo seguirá siendo protagonista en la AFC, y la diferencia entre un equipo que llega al Super Bowl y uno que no lo hace son pequeños detalles.

Los Bills están tan cerca, que yo no pensaría en cambios profundos. Sufrieron muchas lesiones a la defensiva (tienen varios agentes libres ahora), y necesitan un receptor abierto más explosivo, pero Buffalo está cerca.

Las esperanzas quizás sean más evidentes en Green Bay y Houston.

Más que nada, porque a principio de temporada, la mayoría de los analistas no los veían como genuinos protagonistas esta temporada.

Y en ambos casos, sus jóvenes mariscal dieron un salto de calidad que los ilusiona de cara al futuro.

Durante nuestra transmisión del draft el año pasado, yo afirmé que "Jordan Love tendría una mejor temporada que Aaron Rodgers". Por supuesto que después Rodgers se lesionó en la cuarta jugada del año, y la discusión quedó en la nada.

Pero más que nada quería afirmar mi confianza en Love, y en el hecho de que los Green Bay Packers dieran vuelta la página.

Green Bay siempre ha sido una franquicia que confía en sus cazatalentos y se construye a través del draft.

Después de un buen comienzo, Love cayó en una meseta, y se empezó a escuchar el ruido en Green Bay. No obstante, la paciencia es virtud, y Love terminó el año jugando como uno de los mejores cinco mariscales de la liga.

Su química con su joven grupo de receptores fue creciendo partido tras partido, y más allá de las dos intercepciones que lanzó en la Ronda Divisional, hoy creo que no hay dudas de que puede ser un mariscal franquicia.

Love tiene 25 años de edad, y los Packers son el equipo más joven de la NFL. Ya sin las polémicas extracancha que traía Rodgers, Green Bay tomó el siguiente paso en su evolución.

El futuro, de la mano de Jordan Love, le sonríe a los Packers.

Algo similar pudiese decirse de los Houston Texans, dado que el novato C.J. Stroud luce como la pura verdad.

Hace bastante tiempo que no veo a un novato mariscal mostrar el temple de Stroud en el bolsillo, y que a la vez tenga la determinación y efectividad para atacar de manera vertical de manera frecuente en su primera temporada.

Y lo hizo pese a tener a un entrenador en jefe novato en DeMeco Ryans, y a múltiples lesiones entre sus tackles ofensivos; la temporada la terminó también sin dos de sus principales receptores.

Stroud terminó la temporada regular con 4,108 yardas por aire, 23 touchdowns y apenas cinco intercepciones, y en un momento dado, hasta se lo mencionó como potencial MVP antes de sufrir una conmoción cerebral.

Habrá que ver si su coordinador ofensivo Bobby Slowik recibe o no una oportunidad como entrenador en jefe, pero si se mantiene el status quo, la AFC Sur tranquilamente pudiese pasar por Houston en los próximos años.

El caso más complejo quizás esté en Tampa Bay, dado que los Tampa Bay Buccaneers sufrieron para ganar la peor división de la NFL.

El mariscal Baker Mayfield, quien suele brillar cuando no se le tiene en cuenta, superó todas las expectativas.

Tanto los Buccaneers como Mayfield tienen interés en renovar el vínculo, pero la pregunta del millón es a qué precio, dado que yo no pagaría nada cercano a 30 millones de dólares por Mayfield.

La línea entre la ratificación de confianza y pagar de más es muy delgada, y si tu equipo se encuentra en esta posición, como yo creo por ejemplo hicieron los New Orleans Saints, eso puede detener en seco el progreso de tu franquicia.

Me encantó la evolución que vi del coordinador ofensivo Dave Canales, aunque quizás es otro que reciba una oportunidad como entrenador en jefe.

¿Habremos visto el último partido de Mike Evans con los Buccaneers? ¿Devin White?

En Tampa Bay tenemos demasiada incertidumbre, y es la única franquicia de las cuatro eliminadas este fin de semana, que creo necesita algunos cambios para pensar en volver a estar en playoffs.

Pero como suele suceder en la era de las redes sociales, todo es gritos y poca racionalización.

Las decisiones más importantes no deben tomarse en el calor de la frustración, sino más bien después de un frío análisis.

Y en tres de los cuatro casos, se necesitan retoques y no cambios rotundos.

Paciencia es virtud.

*Los equipos locales están en segundo término

Kansas City Chiefs en Baltimore Ravens

Favorito: Ravens por 3 y medio

El fútbol americano es un deporte complementario por excelente. En la historia de la NFL previa a esta temporada, ha habido tres equipos con un mariscal All-Pro y la mejor defensiva de la liga en cuanto a puntos permitidos se refiere; los Miami Dolphins de 1972, los Pittsburgh Steelers en 1978 y los Green Bay Packers en 1996, y esos tres equipos ganaron el Super Bowl. Lo cual nos trae a estos Baltimore Ravens, cuya defensiva es la mejor de la NFL, y cuyo mariscal Lamar Jackson, ganará su segundo MVP este año. Seguramente estamos viendo lo último de Mike Macdonald como coordinador defensivo de Baltimore, dado que estoy convencido de que recibirá una oportunidad en jefe. No es para menos, teniendo en cuenta el éxito que ha tenido su defensiva, que viene de limitar a los Houston Texans a 213 yardas totales, la menor cantidad en toda la temporada para Houston, y a cero touchdowns en ataque.

Está claro que los Kansas City Chiefs no serán un rival sencillo, porque Patrick Mahomes parece inevitable en este tipo de situaciones, y Kansas City clasificó al Campeonato de Conferencia por sexto año consecutivo. A la vez, uno pudiese alegar, que Mahomes nunca ha tenido una defensiva tan dominante como este año; terminaron segundos en puntos y yardas permitidas. Habiendo dicho eso, permitieron demasiadas libertades por tierra ante los Buffalo Bills, y esa tendencia debe corregirse si quieren tener posibilidades ante los Ravens. Sobre todo teniendo en cuenta que del otro lado está Lamar Jackson, que viene de dominar tanto por tierra como por aire a Houston, y está jugando en un nivel superlativo.

Los Ravens tendrían de regreso a su ala cerrada Mark Andrews, que ciertamente ayudará a Baltimore, pero estoy particularmente ansioso por ver tres emparejamientos particulares este domingo. La defensiva de los Ravens, que viene de limitar por completo a los Texans por tierra, ante Isiah Pacheco, que corre como si su pelo estuviese prendido fuego. A la vez, quiero ver si la defensiva de los Chiefs puede contener a Lamar Jackson dentro del bolsillo de protección, y limitar la capacidad que tiene para lastimarte con sus piernas; insisto en que Kansas CIty viene de un mal partido por esa vía. Y el tercer emparejamiento que me intriga es la defensiva de Baltimore y sus cargas ante Patrick Mahomes. Nadie ha sido mejor a la hora de disfrazar cargas que los Ravens, pero Mahomes ha sido letal ante la carga en las últimas semanas. Algo tendrá que ceder en estos tres duelos de fortalezas.

Los receptores de Kansas CIty vienen de tener un buen partido, y los Chiefs son peligrosos con Mahomes y una muy buena defensiva. Sin embargo, yo alegaría que no ha habido equipo más completo que los Ravens durante toda la temporada, y por alguna razón, han volado debajo del radar.

Pronóstico: Ravens 26-21


Detroit Lions en San Francisco 49ers

Favorito: 49ers por 6 y medio

Hablando de equipos que han estado cerca y no han podido coronarse, los San Francisco 49ers tienen que estar al tope de la lista. Piensen ustedes que los 49ers han estado, contabilizando este año, en siete Campeonatos de Conferencia desde el año 2011. Sin embargo, San Francisco salió campeón por última vez en 1994, la clara muestra de que ganarlo todo no es nada fácil. En parte no es sencillo, porque cada emparejamiento es su mundo, y mantener la consistencia de semana a semana es extremadamente complicado. Si me preguntan a mí, la semana pasada era la jornada para eliminar a San Francisco. Los Green Bay Packers no lo pudieron hacer, y ahora los 49ers son más peligrosos que nunca.

El mariscal de San Francisco, Brock Purdy, no jugó un buen partido, pero crédito para él, porque aún en una mala tarde, se creció en la serie definitiva para guiar a su equipo al triunfo. El año pasado, Purdy se lesionó el codo en esta instancia, y ahora quiere su revancha. En este duelo particular, los 49ers pueden tener una ventaja atacando por aire, si consideramos que la defensiva de los Detroit Lions terminó ranqueada vigésimo séptima en cantidad de yardas por aire permitidas; han sido vulnerables a lo profundo y sólo cinco equipos han permitido más touchdowns por aire que Detroit; van a atacar a Cameron Sutton. Christian McCaffrey volvió a demostrar que está en una clase aparte. Y aunque a priori, los Lions serán un escollo duro, dado que sólo un equipo permitió menos yardas por tierra que Detroit este año, la realidad es que permitieron 5.9 yardas por acarreo ante los Tampa Bay Buccaneers la semana pasada.

El mariscal de los Lions, Jared Goff, es una de las grandes historias de esta temporada, y estará buscando llegar a su segundo Super Bowl en su carrera. Sin embargo, en Detroit todo comienza con su dúo de corredores de Jahmyr Gibbs y David Montgomery. Cuando enfrentas a un equipo tan físico como San Francisco, tienes que mostrar que puedes dominar las trincheras de entrada. Eso mismo hizo Green Bay la semana pasada, cuando le dio tiempo a Jordan Love, y a la vez Aaron Jones tuvo éxito por tierra. Esa es la fórmula del éxito para los Lions ante un equipo de San Francisco cuya defensiva lució más vulnerable este año que en temporadas anteriores. Amon-Ra St. Brown y Sam LaPorta son dos baluartes por aire (ahora firmaron a Zach Ertz), y me intriga ver el impacto que tendrán los dos linebackers Fred Warner y Dre Greenlaw en sus respectivas jornadas; allí radica una de las claves del encuentro. A la defensiva, Aidan Hutchinson está pasando por un gran momento, y habrá que ver si los Lions pueden ejercer presión sobre Purdy o no este domingo.

La historia de los Lions, que volvieron a un Campeonato de Conferencia por primera vez desde 1991, es fabulosa. No obstante, los 49ers tienen el ataque aéreo más eficiente de la liga; son el equipo que menos pasa, y que más yardas tiene. Por supuesto que la disponibilidad de Deebo Samuel será vital, considerando todos los distintos roles que cumple Samuel para San Francisco. En lo personal, confío en Purdy y dudo que él y los 49ers vuelvan a tener un partido flojo como la semana pasada. Al menos en el papel, no hay mejor plantel que San Francisco.

Pronóstico: 49ers 27-19

POWER 2

Como siempre digo, nunca es bueno jugar todos los partidos. En otras palabras, hay algunos que es mejor dejar pasar. Por eso, decidí añadir esta sección, para dar a conocer mis dos equipos favoritos con línea de apuesta en playoffs. Son bienvenidas las opiniones, ya que la idea es sumar un atributo que sea beneficioso para los lectores. El orden de los equipos no es casual y los pronósticos no afectan a las estadísticas totales.

  1. SAN FRANCISCO 49ERS

  2. BALTIMORE RAVENS

OVER/UNDER

A pedido de varios de los lectores, incluimos un partido de altas y de bajas para cada semana.

  1. ALTAS DE CHIEFS-RAVENS (44 y medio)

  2. BAJAS DE LIONS-49ERS (50 y medio)

Con Línea de Apuesta:

153-129

Sin Línea de Apuesta:

171-111

Altas y Bajas:

21-19

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